Todos creían que Nanase Haruka tenia solo 2 amores:
El Agua y la Caballa.
Pero existía un tercero, que superaba a los otros dos: "Tachibana Makoto"
Para superar la barrera llamada "Amistad", Haru deberá vivir como una chica toda una semana.
Con un...
-¡Haru!-Mientras estaba recostado en el piso de la azotea escuche una voz que me llamaba.
-Llegaste -contesté reconociendo a mi mejor amigo a medida que abría mis ojos, el cual se coloco a mi lado con cuidado y me observo desde arriba
-¿Que haces tan distraído? Levántate , vamos a casa- Makoto sonrió como siempre mientras me tendía la Mano, finalmente acepte su ayuda y me levanté
-Tardaste mas de lo normal- Mencione mientras tomaba mi mochila y caminábamos hacia la puerta- ¿Sucedió Algo?- Al terminar de formular mi pregunta pude notar como su cuerpo se tenso, señal de que había algo
-N-No...- Makoto comenzó a caminar mas rápido tratando de huir de mi pregunta.
-Makoto...¿Que paso?- Pregunte nuevamente una vez que salimos de el terreno escolar y comenzamos a caminar por la calle.
-Haru...- Makoto se detuvo en el camino y me miro fijamente, el nerviosismo seguía presente en su mirada. Pero había algo mas ahí, algo que no lograba identificar- Es algo complicado... Te prometo que te lo diré luego- Me sonrió nuevamente antes de seguir caminando.
Peroesarespuestanofuesuficienteparami.
Continuamos nuestro camino, el rápidamente trato de distraerme con otro tema de conversación. Animadamente me contó de la broma que Nagisa le hizo a Rei en el descanso, de el nuevo plan de entrenamiento que el y Gou habían desarrollado, de el accidente que había ocurrido en el equipo de baloncesto, etc.
El reía con sus recuerdos y yo solo lo miraba reír. Era la misma risa que conozco desde que eramos niños, la misma risa que vi en mi infancia y adolescencia, la misma risa de la que nunca me cansaba.
Así mientras el hablaba y hablaba, yo lo miraba y suspiraba.
El que me ocultara cosas era desconcertante. Conocía su personalidad y sabia que cuando hacia eso era para no preocuparme
Peroesomepreocupamas
Pero no tenia derecho a quejarme, pues si de ocultar cosas se trata... Yo soy peor.
Yo, que había traicionado esa amistad que el me había dado por tantos años, no tenia derecho de hablar.
Cuando la amistad se transformo en amor, me di cuenta de lo que había hecho todo este tiempo.
El como lo había retenido, el como lo había manipulado para tenerlo conmigo.
Y cuando me di cuenta de que mi amor por el seguía creciendo, me asuste.
por que entre mas grande es el amor, mas grande es la perdida.
Y el día en que el finalmente se fuera de mi lado...
Habríaacabadotodoparami
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