Los Otros

C. 27

[ Aún si fallo, soy quien ganará. ]

[ No se trata de ganar, sino de sobrevivir.
De este momento, no pasarás. ]

No entendía bien lo que pasaba, luces brillantes y pequeñas se alzaban sobre él y volaban hacia arriba, botando contra una superficie invisible, volviendo nuevamente, para repetir la acción. Miró con más claridad y creyó ver manchas oscuras repetir la misma acción.

— Concentrate Jimin — una voz habló desde atrás. Volteó, encontrándose con Moonbyul.

Ambos estaban en lo que parecía un escenario sin fin, con nada al rededor, más que oscuridad y la luz de ambos, junto con esas luces, iluminando el lugar.

— ¿Dónde estamos? Creí que teníamos que luchar o algo así — dijo con algo de pena, sintiéndose tonto.

— Lo hacemos, Jimin. Estamos luchando, todos juntos. — el pelinegro no entendió. Ellos sólo estaban parados ahí. — Esto no es cosa física, es de mente y alma — Lo señaló — Por eso, tu cuerpo debe estar sudando.

— ¿Cómo es posible? No estoy haciendo nada.

— Ellos están utilizando nuestra energía — señaló a los pequeños haces de luces — Concéntrate en ayudarlos y te cansarás menos.

Park miró hacia arriba — ¿Esas luces? Parecen copos de nieve — sonrió ante la calidez y trató de tocar una cuando ésta rebotó y quedó frente a él, esperando para subir de nuevo.

— Son almas.

La miró con espanto, alejando su mano — ¿Cómo?

— Están tratando de volver a su plano — señaló hacia arriba — Sus cuerpos originales están ahí, los otros, también quieren eso — señaló ahora las manchas negras — Tratan de reemplazarlos en tu dimensión.

— No puede ser...

— Por eso debes concentrarte, dales tu energía, ayudalos a volver.

— ¿Entonces esto sólo depende de ellos? ¿Es lo mismo para Seokjin?

Ella asintió — Pero él es poderoso y tiene una acompañante poderosa. Mas yo también lo soy, y también lo tengo — una mancha acababa de desaparecer y ella lo sintió. — Ya no puede más, acaba de rendirse.

Jimin sonrió — ¿Significa que alguien recuperará su cuerpo?

— Así es — dijo con una sonrisa, que se perdió en cuanto sintió que una de las luces se apagó — No...

— ¿Qué pasó? ¿Quiere decir que ya volvió? — pero la cara de espanto de la plateada, le hizo saber lo contrario — ¿Qué pasa?

— Acaba de morir...

— No. ¿Cómo es eso posible? El otro fue el que perdió, ¿o no? — Jimin comenzaba a desesperarse — ¡Moonbyul, contestame!

— ¡No lo sé! No... No lo hizo... — cubrió su boca con temor cuando, de nuevo, a la vez que una mancha perdía, otro haz de luz se desvanecía.

— Moonbyul... Moonbyul, por favor, contestame.

— No sé cómo lo hizo... Pero, cada alma que trajo hasta aquí, parece estar ligada a uno de los suyos.

— Wow, espera, ¿qué significa eso? ¿Cuando ellos mueran, las almas también lo harán?

— Ello no mueren, simplemente regresan a su plano, el equilibrio debe mantenerse...

— ¿Pero y las almas? , si no tienen dónde volver, entonces...— Jimin negó — Moonbyul, entonces... ¿Esto fue en vano? ¿La muerte de Hoseok lo fue? Mi familia... ¿Está acabada?