El desafío de Savi

28 Sorpresas

Legamos a los estudios que estaban nada más cruzar la calle y Malú me dirigió a una sala enorme con una mesa enorme en el medio, con cuatro personas dentro, José, Rubén, que no lo conocía en persona pero sabía de sobra quien era, un hombre más y una mujer, a esos ya si que no les conocía

-Hola Savi yo soy Valentina, pero me podes llamar Valen, de acá en adelante seré tu manager- me dijo con un acento argentino muy dulce y dándome la mano, parecía una mujer muy amable, tendría unos 30 años, de estatura mediana y de pelo largo y marro, a primera vista me cayo bien, eso era impórtate ya que de ahora en adelante pasaría mucho tiempo con ella

-Yo soy Alberto el productor musical, encantado- dijo dándome otros dos besos

-Buenas yo soy Rubén, he venido a ayudarte con las canciones y tal- me dio dos besos, era un poco seco, pero supuse que sería porque era vergonzoso porque a Malú la saludo con un fuerte abrazo

-Hombre la pequeña artista- dijo José cogiéndome en brazos -¿Qué tal estas?- dijo ya cuando me dejo en el suelo

-Bien gracias ¿Y tú?-

-Bien, aquí estamos ha ayudarte y a ver a mi hermanita que últimamente esta desaparecida- dijo alzando el tono de voz para que Malú lo escuchara

-Te he oído y sabes de sobra que eso es mentira- dijo acercándose –Anda vamos a sentarnos para empezar cuanto antes que sino no acabamos- nos sentamos y comenzamos la “reunión”. Me estaban explicando como seria mi vida a partir de ahora y de repente entro un hombre vestido con un traje, muy serio

-Buenas señorita Savannah- yo ante esas palabras me quede atónita ¿señorita? –Soy Juan, el director de la discográfica, espero que de su 110% con nosotros sino la lleva clara, a sido un placer conocerla- de dio media vuelta y se fue, mi cara debió de ser un cuadro porque cuando Malú se giro se empezó a reír a todo volumen

-No te preocupes, Juan es muy serio pero es una buena persona- dijo Alberto

-Bueno ya esta todo explicado, ¿Has traído el consentimiento de tus padres?- al oír esa palabra me quede paralizada

-Sí, la tengo yo- dijo Malú rebuscando en su bolso -¡Aquí esta!- dijo alzándola en alto a modo de victoria –Estos bolsos tan grandes, entra de todo pero luego no encuentras nada- dijo negando con la cabeza, menos mal que ella reacciono rápido

-Bueno pues ahora te toca firmar a ti Savi- dijo Alberto, yo al oír mi nombre volví al mundo real

-Eh, claro- dije yo cogiendo el papel y el boli y firmando

-Bueno ahora que ya hemos acabado el papeleo vamos al estudio y nos ponemos a elegir canciones- fuimos a un estudio que era muy acogedor, era pequeñito, tenía un sofá y unos taburetes, lo demás era casi todo la cabina donde se graba y poco más.

-Bueno Savi tu entra y que surja la magia- dijo Alberto muy convencido, Malú me agarro de los brazos

-Savi tu ante todo relájate y suelta todo lo que tienes ahí dentro vale- dijo señalándome el corazón con su dedo –Suerte- me dio un beso en la frente y me metí para dentro, empecé a tocar canción tras canción, aquello iba muy bien, me estaba saliendo de maravilla, me sentía muy a gusto y por los gestos de Alberto, de Malú, de José, de Rubén y de Valentina parecía que les gustaba, a mitad de las canciones entro una mujer a la que yo no conocía, saludo todos y se quedo allí mirándome y escuchándome atentamente, notaba como examinaba todos y cada uno de mis movimientos, me dio un poco de miedo la verdad, paramos para comer.

-Princesa has estado genial- dijo Malú abrazándome fuerte nada más salir de la cabina –Mira te presento, esta es Rosa, mi manager- se acerco y me dio dos besos, ahora yo tenia que encontrar el momento para hablar con ella a solas

-Lo has hecho genial pequeña- dijo José levantándome en sus brazos

-Esta niña tiene mucho talento, felicidades- dijo Rubén

-Sí, vas a vender muchos discos, que digo muchos, muchísimos- dijo Alberto

-Voy a tener que ponerme las pilas, esta nena viene pisando fuerte- dijo Valen muy emocionada y revolviéndome el pelo

-Gracias- dije yo tímidamente, mis tripas sonaron y me puse roja

-Bueno parece que la artista tiene hambre, ¿Qué tal si vamos a comer?- dijo José

-Claro yo también me muero de hambre- dijo Malú acariciándose la tripa

-Vamos pues- dijo Rubén, cogimos nuestras cosas y nos dirigimos a un restaurante que había aquí al lado, nos sentamos y tocaba pedir. Cada uno se pidió su plato y como no Malú se pidió una ensalada y pescado, yo la imite.

-Chicos necesito ir al baño- dijo Malú levantándose y cogiendo su bolso -¿Vienes Savi?

-No, yo me quedo aquí- dije, esta era mi oportunidad para hablar con Rosa

-Vale- cuando Malú entro por la puerta del baño empecé a hablar

-Rosa quería pedirte un favor- dije

-Claro dime-

-Tengo entendido que a Malú le falta una canción para terminar su disco y me gustaría cederle una mía que se que le encanta- dije segura

-Eso no deberías hablarlo con ella, y luego Valen y yo nos encargaríamos del precio- dijo Rosa

-Ahí tiene razón Savi, deberías habérmelo dicho- dijo Valen

-No, no  quiero que se entere, quiero que sea una sorpresa y un regalo- dije muy segura

-Bueno por mí esta bien, tiene muchas canciones y si se la quieres regalar no hay ningún inconveniente- dijo Valen

-Gracias Valen, ¿Rosa?- pregunte

-Claro- iba a decir algo más pero José la interrumpió

-Savi, como vas a hacer para que se la quede, Malú no va a querer coger la canción, ella es muy cabezota-

-Lo sé, para coger una canción que no es tuya hay que firmar algún papel ¿no?-

-Así es- dijo Rosa

-Bien, pues tú haces que Malú firme primero el contrato y ya después le dices que es mi canción lo que ha cogido, ya me llevare yo la bronca- dije y me calle porque vi como se abría la puerta del baño y salía Malú. Comimos entre risas y anécdotas, después volvimos al estudio.