0.14; there you are

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SeungMin puede o no puede que ya se esté arrepintiendo de aceptar venir a la fiesta; a pesar de haber rechazado inmediatamente la invitación de MinHo pues el mejor que nadie sabía que él y una multitud de gente ya sea conocida o desconocida no iba de la mano luego del acontecimiento. Pero esa misma noche Kim lo pensó seriamente recordando las únicas palabras de apoyo que le dieron sus padres antes de dejarlo a la merced de MinHo una vez que salió de la correccional con libertad incondicional.

Deberías vivir tu vida como el inocente que eres. Tú sabes que no eres el culpable que todos dicen que eres, así que deja de esconderte y vive.

Al día siguiente en vez de tomar el bus que le llevaba a su casa tomó el que lo llevaba a la cárcel, pues HoJung, quién fue su compañero de celda y el causante de que nadie le haga daño, al cumplir la mayoría de edad fue trasladado de la correccional a la cárcel estatal.

—¿Crees que debería vivir mi vida?—preguntó directo en cuanto Ko se sentó detrás del vidrio y agarró el teléfono.

—¿Eso no es lo que estabas haciendo ya?—preguntó confundido viendo a su amigo, normalmente él no venía entre semana—espera ¿no deberías estar en la escuela?

—¿Crees que debería dejar de ocultarme? En plan, ¿crees que debería salir como los chicos de mi edad lo hacen?—volvió a preguntar sin responder a sus otras preguntas.

—Eres inocente, Min. No hay ningún problema en que hagas tu vida como un chico de diecinueve tiene derecho a hacerla—respondió mirando con ternura a su amigo. Puede que sólo sean tres años de diferencia pero Min era su hermanito menor que tenía que cuidar ante todo.

—Pero eso no dice la ley...

—Pero eso dices tú—habló agarrando fuertemente el teléfono—y el cambio comienza cuando te empiezas a creer.

SeungMin le dio una última sonrisa, quisiera que su amigo salga de ahí de una vez, ya no soporta verlo y hablar con él cuando hay un pared en medio que los separa, desearía verlo en una cafetería o en un restaurante. O simplemente en la casa del otro, puede que Ko HoJung no sea tan inocente como lo es el menor, pero al menos, no cometió ese delito con malas intenciones.

Se despidió rápidamente de él diciendo que de hecho si debería estar en la escuela y que intentará venir el sábado o si no el próximo sin falta. A Jung no le sorprende que su amigo venga a visitarlo solo cinco minutos a preguntarle cosas tan simples, Kim siempre es así y le encanta que lo sea. Siempre tiene ese sentimiento que así era él antes que presentarán los cargos.

Esa misma tarde en cuanto MinHo volvió a casa, el menor le comentó que decidió acompañarlo a la fiesta siempre y cuando no lo abandoné, Lee aceptó enseguida avisando a su amigos que su presencia era confirmada.

Lástima que la promesa que le hizo MinHo al no abandonarlo fue rota, bueno no tanto pero se sentí solo con tan solo escuchar a su amigo hablar animadamente con otras personas mientras él no sabía como adentrarse a la conversación.
SeungMin no conocía a absolutamente nadie y puede que los pequeños tragos que tomó junto a JungWoo, Lucas y otros de sus amigos, le estén afectando peor de lo que se imaginaba.

[…]

—Anoten este día en su calendario pues el ChanHyunLix está devuelta—comentó el menor en cuanto el amigo de este le abrió la puerta a su casa. Eran las diez y media apuntando a once de la noche, y el lugar ya estaba llena de gente que HyunJin medianamente conocía, pero cada persona que se acercaba era para darle un trago de quien sabe que habrá sido.

Casi la media noche había llegado y Felix se fue contento con sus ex compañeros a bailar o tomar por ahí, mientras Chan quien conocía a más personas—para variar—que Hwang se quedaba charlando con ellas mientras él con un vaso que cree es de ron estaba parado ahí sin saber mucho que hacer, por lo cual se apoyo en la pared observando como iba la fiesta, no la estaba pasando mal pero tampoco es que estaba teniendo la noche de su vida.

—Hola—escuchó una voz ciertamente conocida apesar que la música esta sonando fuerte.

El rubio giró su cabeza un poco encontrándose a un SeungMin bastante feliz apoyando de igual manera en la pared. De todos los lugares que pensaría que podía encontrarse con él, una fiesta no estaba ni si quiera en sus opciones.

—¿No eres muy joven para estar acá? —fue lo primero que se le ocurrió decir, estaba bastante sorprendido.

—Primero, esto no es un bar—comentó acercándose un paso hacia Hwang—y segundo, ya soy mayor de edad.

Dio una mini vuelta y ahí el mayor pudo observar bien lo que estaba usando, nunca había visto a Kim sin el uniforme de colegio así que verlo con otra ropa crea otro impacto y peor la que tenia puesta ahora, unos jeans azules relativamente apretados, una básica gris y una chaqueta relativamente suelta de color entre negro y café. Pero lo que hacia más diferente y que lo hizo dudar en un principio si era él, era su peinado pues ya no tenia ese flequillo que le tapaba la vista, ahora su frente estaba a la vista con cerquillos a ambos lados y levantados.

Se quedaron charlando de como es que ambos terminaron ahí y en soledad cuando HyunJin se dio cuenta que mientras él hablaba el menor estaba viendo sin disimulo alguno sus labios y lamiendose los suyos.

—¿Tengo algo en mis labios, SeungMin?—preguntó coqueto teniendo ahora su mirada en sus ojos, un pequeño sonrojo aparecieron en sus mejillas pero que podían pasar desapercibido fácilmente.

—Más que mis ganas de probarlos, nada.

Hwang se sorprendió ante a aquella respuesta que sus ojos se abrieron más de lo normal, ¿quién era esa persona y que pasó con el Kim SeungMin que conocía? Sin embargo aquel comentario logro exitarlo de una manera que sabía que no estaba bien, pero ¿acaso los dos lo estaban?.

—¿Quieres probarlos?—habló dando un paso más cerca al contrario, aún había cierta distancia pero en un abrir y cerrar de ojos podía ser cortada.

—¿Puedo?—los ojos del menor brillaron ante la propuesta de Hwang, volvió la vista a esos labios rojos y carnosos que juraba que llamaban su nombre.

—¿Estas seguro que quieres haces eso, Kim? recuerda que soy tu profesor—esa era la voz de conciencia que aún estaba viva en el mayor pero que en la del menor, había muerto en el cuarto vaso de vodka.

—Entonces como profesor deberías enseñarme que hacer para llegar a conocer su sabor—y era era la respuesta que acabó con la cordura que Hyun intentaba mantener.

Rompió la distancia entre ambos empujando al menor a la pared y atacando esos labios, su plan era comenzar el beso suavemente, pero ambos estaban muy calientes para ir paso por paso, aunque por momento no habían aparecido sus lenguas, ambos estaban conociendo la cavidad bucal del otro mientras las manos del rubio estaban en la cadera del contrario y una vez que sus lenguas se tocaron fue la perdición misma.

SeungMin jugaba con el cabello de HyunJin, metia sus manos entre sus hebras y de vez en cuando lo jalaba cuando necesitaba aire para respirar de aquellos besos que ni una pizca de inocencia tenía, sus lenguas peleaban buscando el control del momento, algunas veces habían mordidas ente medio y la manos de HyunJin sin darse cuenta bajan de su cadera hasta el trasero. Y diablos, si no fuera por que Jin aun tenia un pieza—pequeña —de decencia ya hubiera empezado a atacar el cuello de Min.

Sus besos eran tan dulces como adictivos, pareciera que ninguno se iba a cansar de probarlos una y otra vez.
¿Ambos se arrepentirán de esto después? Probablemente.
¿Les importa en este momento? Claro que no.

~★~
Ahora si empieza lo bueno ala, no pero enserio partir de este capítulo nos vamos a dirigir más hacia la vida de seungmin y lo que paso y por su puesto ahora si el hyunmin va estar más presente que nuncaaa.
Gracias por leer, espero que les haya gustado ♡♡

flor de oro ❀ hyunminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora