Lo inefable del alma

Dos años

Hoy se cumplen dos años,
de el mejor gran error de mi vida,
del inicio de mi trágica historia de enamoramiento.

Dos años de versos y besos.
Dos años de problemas y poemas.
Veinticuatro meses de amor.
Veinticuatro meses de dolor.

Aquella noche tu mirada iluminaba mis pupilas,
esta noche lágrimas brillan atoradas en ellas.
Aquella noche me abrazaba con fuerza a tu espalda,
esta noche me aferro a una almohada desgastada.
Aquella noche el calor de tu cuerpo ardía en mi alma,
esta noche me congelaria de no ser por una flama.
Aquella noche mis comisuras dolían de tanto sonreír,
esta noche duelen de llanto y no poder dormir.

Te he pedido que te quedarás.
Te he pedido que volvieras.
Te he pedido que me recordarás.
Nunca te he pedido que me amarás.

Ojalá pudiera parar de escribirte.
Ojalá pudiera dejar de pensarte.
Pero me parece tan irreal el dejarte.

Te he dicho que te amo, te he abrazado con miedo.
Te he dedicado poemas, lágrimas, risas, de todo.
Dedico mis rezos a tu bienestar.
Dedico mis madrugadas a lamentar.

Te diré, te contaré...
Que cuatro años no te he dejado de pensar.
Que tres años no me has dejado de gustar.
Que dos años no te he dejado de amar.
Que un año no me has dejado de matar.

¿Quién estaría tanto tiempo?
Sin avanzar, sin olvidar, sin superar.
Solo una tonta te vería como lo mejor.
Simplemente no debería soportarte más.

Pero a riesgo de parecer una idiota...
Sigo viendo lo mejor de ti, tras un rostro desconocido.
Sigo aquí, convencida que vales la pena.
Sigo pidiendo lo mejor para ti, y lo mejor de ti.
Sigo buscando razones para toparme contigo.
Sigo temblando cuando pienso en ti.

Sí, serán dos años de muchos errores.
De momentos que hubiera cambiado.
De palabras que hubiera callado.
Sí, son dos años de muchos cambios.
De kilómetros incesantes retumbando.
De relaciones omitidas y pérdidas.

Pero no, no los cambiaría.
No cambiaría ninguna noche a tu lado.
No cambiaría ninguna charla de madrugada.
No cambiaría ni las peleas sin sentido.
No cambiaría las personas que nos cruzaron.

Me dirán que es por la lección.
Y no.
Simplemente viviste en mi.
Y no.
No cambiaría mi paz por tu ausencia.

Dos años, y serán más.
Dos años, y no se detendrán.