El Poder de Amarte

Capítulo 40

Estamos estacionados frente a mi casa, él me toma por el cuello y comienza a besarme con intensidad.

Vegeta: Me estás enloqueciendo mujer, ya deseo tenerte en las noches a mi lado.

Bulma: Yo más deseo vivir contigo, bueno, eres mi esposo —le digo mostrando el anillo que llevo en mi dedo anular.

Vegeta: Lo sé, eres solo para mí. Lamento mucho lo de esta noche, no debí llevarte a conocer a mis padres.

Bulma: No te preocupes, estoy bien. Me importas tú, no quiero que tengas problemas con tus padres por mí.

Vegeta: Al demonio con ellos. Tú y yo tenemos una conversación pendiente, pero no quiero estropear este momento, mañana vengo a buscarte, quiero llevarte a conocer a alguien.

Bulma: Bien, te veo mañana. Adiós cariño —me aproximo a él para darle un beso.

Vegeta: Adiós preciosa —responde tomando mi mejilla y dando un beso aún más intenso.

Bajo del auto con mi cuerpo erizado, aquella corriente que me invade son como mariposas que me hacen volar. Desde la puerta me giro y me despido dando un beso en mi mano y arrojándolo, él sonríe y se va sin dejar rastro.

Cierro la puerta, me quito las sandalias altas para no hacer ruido, subo las escaleras, camino por el pasillo y justo al pasar por la habitación de mis padres me detengo para ver que estén durmiendo pero al momento de tomar la perilla escucho gemidos leves, que lindo es demostrarse amor y más cuando tienes tiempo sin ver a esa persona que amas. Sonrío y continúo caminando hacia mi habitación, entro en ella y cierro la puerta. Bajo la cremallera de mi vestido y lo dejo deslizarse al suelo, camino hacia el baño en ropa interior y mi smartphone me notifica una llamada, lo tomo y contesto.

*Llamada Entrante*

Bulma: ¿Hola? —contesto.

¿?: Bulma Brief —una voz distorsionada se escucha por el móvil y salgo de mi habitación rápidamente hasta llegar al laboratorio, alguien llama para molestar.

Bulma: ¿Quién habla? —pregunto a la vez que saco en silencio mi maletín para rastrear llamadas, se lo que puede estar ocurriendo.

¿?: Eso no importa. Tenemos un trabajo para usted, la necesitamos en nuestra agencia especial, hemos estudiado todos sus negocios, sabemos lo buena que es en su ámbito laboral.

Bulma: ¿Tenemos? ¿Quiénes? —pregunto a la vez que conecto unos cables a mi teléfono y lo sitúo a un lado activando el altavoz mientras escribo unos comando en el teclado.

¿?: Es información clasificada. Pero le aseguramos una mejor área de la que se encuentra actualmente.

Bulma: Ustedes no saben nada de mí —intento rastrearlo pero el número no puede ser localizado, maldición está bloqueado.

¿?: Sabemos todo de usted, más de lo que se pueda imaginar, le conviene trabajar para nosotros si no sus padres y en especial su esposo sufrirán las consecuencias.

Bulma: No comprendo —pregunto mientras estudio la voz.

¿?: Somos su competencia. Tenemos misiones y usted es la indicada para trabajar en ellas, serás la jefa, la agente superior por así decirlo, la encargada de esas misiones. Hay una misión en Dubái para la próxima semana, si no coopera prepare el funeral de sus padres y de Vegeta Ouji, estamos avanzados en información, sabemos que tiene agentes especiales cuidando su casa, ¿puede ver la luz azul titilar frente a su ventana? Somos nosotros, conocemos todos sus pasos y proyectos. Tiene tres días para decidir.

Demonios, me aproximo a la ventana y veo aquella luz.

*Fin de llamada*

Bulma: Maldita sea ¿qué voy a hacer?