Un rato de reflexión

Café

Una tarde calurosa en la hora de salida de mi preparatoria mi forzó a refrescarme con un barato y sencillo helado, como no sabia de que sabor pedirlo solo dije "uno de café por favor", lo tome en mis manos luego fui a la parada del buss ya que mi mejor amigo me esperaba ahí mismo, subimos al buss tomamos asiento saque mi hielit, lo mordi y en ese momento al probar el sabor familiar e intenso recorrió mi paladar, mi mente se lleno de nostalgia pues era la misma marca de café el mismo sabor que tomaba en cada uno de los funerales de parte de mi familia, ahí me di cuenta de que no era solo sabor café, era sabor a tristeza melancólica que de apoderaba de mi ser.

El delicioso sabor del café forma parte de mis cadenas de tristeza que me rodean en mis dias de melancolía. Hm es raro, la melancolía es el único sentimiento que nunca me ha molestado tener en mi vida e incluso en pequeña y profunda mente