SeCrEtOS(TERMINADA)

II

Siempre tienes que aprovechar todos los momentos de la vida
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Meses después

- Lo siento mucho señor y señora Cheing...pero tendremos que cerrar este caso - dijo el oficial hacia los casados quienes lloraban.

- Pero ¿porque? Su trabajo es encontrar y capturar a los criminales, que pasa si nuestra hija está en peligro y no hacen nada - decía Sabine sollozando.

- La razón es porque, ella no dejo pistas, ella no dejo una prueba en donde se vea que la hayan secuestrado o algo señora y perdóneme pero hay personas que esperan a que un oficial los ayude.

- Gracias por nada - dijo Tom enojado y saliendo de la oficina.

- ¿Que les dijo? - preguntó Adrien.

- Dieron el caso por cerrado - respondió Sabine.

- ¿Que? No puede ser.

- Pues así es hijo...- dijo Tom poniendo su mano en el hombro de Adrien.

- Y ¿que harán ahora?.

- Vivir sin Marinette...- respondió Sabine mientras empezaba a caminar hacia el auto.

- Nos tenemos que ir - empezó Tom a caminar - Y Adrien...- llamó la atención de él nombrado - Fuiste un gran novio para mi hija y gracias por todo lo que hiciste por ella - sus lágrimas empezaron a caer.

- Sigo siendo su novio.

Tom solo asintió, le dedicó una sonrisa a Adrien y empezó a caminar hacia la salida de la comisaría.

Pov Adrien

Todo lo que pase con ella, como para que venga alguien y me la arrebate de mi lado.
Camine hacia mi casa y mientras iba en el camino empecé a recordar los bellos momentos que pase con ella. Cómo de tanta felicidad pasó a una depresión.

Llegue a mi casa y fui a mi cuarto, estuve acostado un rato hasta que me gano el sueño.
Soñé algo que nunca lo había pensado.
Ví a Marinette caminando hacia mi...pero con una pequeña niña.

- Mi amor.

- Hola.

Se acercó a mí y me abrazó muy fuerte, cosa que obviamente le correspondí.

- Conoce a tu hija Emma.

En cuanto dijo Emma me sorprendí y me puse muy pero que muy feliz, me puse a la altura de mi hija y la abrace.

- Hola pequeña - dije - yo soy tu papá.

- Si, ya sabía de tu existencia - me respondió con una voz tan tierna.

- Marinette vuelve con nosotros - dije y a ella se le borro la sonrisa.

- ¡No voy a volver! - grito y ahí fue cuando me desperté de golpe.

Continuara