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Jinyoung estiró los brazos por encima de su cabeza, y entonces se estremeció cuando recordó que aún había un gran mordisco en su hombro y cuello. 

-Ow...-Dijo, esforzándose por levantarse tan despacio como podía de modo que pudiera sentarse en la cama. 

Echo un vistazo a su alrededor. Estaba la luz del sol que entraba a través de las cortinas cerradas. Debía ser un día muy lindo afuera si ni siquiera las cortinas podían impedir la entra de la luz natural. 

La habitación se veía mas agradable, mucho menos probable a que un pariente de Dracula estuviera viviendo allí.  Jinyoung sentía como si acabara de despertarse en una linda habitación de hotel, y no en el lugar donde...

Él aun no sabia donde estaba.

Y su culo lo estaba matando. 

Mierda, era cierto. Había tenido sexo la noche anterior. Se... se había venido dos veces. Una vez cuando había sido mordido y la otra cuando Jaebeom habia estado dentro de él. 

Jaebeom...

Jinyoung aún no entendía. Si estaba acoplado al hombre, entonces ¿Porque lo habia secuestrado? ¿Porque no decirselo simplemente? La mayoría de la gente estaba bastante dispuesta a seguir adelante cuando descubrían que podían estar emparejados a un hombre lobo. Habia aquellos que querían correr el riesgo y romper cualquier conexión que pudiera haber, pero Jinyoung definitivamente no era uno de esos. Era demasiado joven como para querer arriesgar su vida de ese modo, y la atracción que había sentido por el hombre, a pesar de su personalidad arisca y naturaleza malvada en general... Jinyoung no creía que alguna vez fuera capaz de estar lejos de él.  

¿Cuan jodido era eso?

Jinyoung sacó sus piernas por el borde de la cama y se puso de pie. 

Sus piernas se tambalearon, pero había tres puertas en esa habitación y estaba bastante seguro que una de ellas tenía que ser la del baño.

Cuando Jinyoung estaba estudiando medicina y el tema de los shifters había surgido, había leído los textos y pasado los exámenes, pero no había entendido lo que los autores habían querido decir cuando habían descrito la atracción del acoplamiento. 

Aún en privado él se había burlado de eso, la idea de que pudiera estar tan enamorado y lleno de deseo por un perfecto extraño justo después de verlo o verla una vez era absurda. 

Había gente hoy en dia, afirmando que era de donde Shakespeare se había inspirado para su Romeo y Julieta.  De que los trágicos amantes habían sido realmente hombres lobo y que la historia se continuo transmitiendo hasta que esa parte se perdio, y Shakespeare tomó su pluma para escribir su versión. 

Definitivamente Jinyoung sentía la atracción del acoplamiento por Jaebeom. Ni siquiera conocía el apellido del hombre. No sabía nada de él, o de su manada, excepto de que aparentemente eran lo bastante ricos como para vivir en un lugar como este. 

A menos que estuvieran rentandolo, pero eso no parecia probable. 

Gracias a dios, la primera puerta que Jinyoung abrió era la del baño. Un baño muy bonito. 

Camino hacia el inodoro para ocuparse de sus asuntos y de ahí se quedo mirando la ducha con anhelo. 

¿Alguien le haría problema si quería darse una pequeña ducha? ¿No , verdad?

Se metió, prometiéndose ser rapido. No necesitaba lavar su cabello o algo. No se sentía cómodo usando las cosas de alguien mas. Solo necesitaba lavar el sudor y cualquier otro fluido seco de la noche anterior. 

Por raro que pareciera, realmente no había nada en la ducha.

Estaba limpia, pero aún tenía el aspecto de haber sido usada. Había una barra de jabón en la repisa, pero no había gel de baño, ni shampoo, ni acondicionador. 

Esta bien, quizás a estos lobos les gustaba mantener las cosas simples. O podía ser solo la forma en que Jaebeom era. 

Jinyoung se restregó lo mejor que pudo, desasiéndose de células de piel muertas y metiendo la cabeza bajo el chorro caliente por un minuto completo, hasta que estuvo seguro de que eso significara que su cara estaba lo bastante limpia para mostrarla. 

Entonces tuvo otro problema que encarar cuando salio de la ducha.

No tenia ropa. 

Estaba la camiseta de la noche pasada, pero no creía que quisiera vestir eso de nuevo cuando iba a estar en una casa llena de hombres lobos. Olerían el sexo en ella sin ningún problema. 

Al menos había toallas.

Frotó una por su cabello y luego la ató a su cintura. Por lo menos se sentía como algo cercano a un humano de nuevo, pero ¿Donde estaba Jaebeom?

Mierda, Jinyoung lo recordó bien. Jaebeom estaba cabreado con él.

Jinyoung lo había tocado. 

Era raro, que basicamente estuviera casado a un tipo que no tenía problemas con tocar a Jinyoung, pero que no quería que lo tocaran de vuelta. 

No tenia idea de qué hacer con eso.

Bueno, tenía una conjetura, y esperaba por dios estar equivocado, pero no había mucho mas que pudiera hacer.

Jinyoung había soltado sus rodillas y sujetado a Jaebeom un poquito después de que gimiera y lo besara, de hecho chocara contra él. 

Realmente no era su culpa. 

Necesitaba de algún modo sujetarse para ese especifico tipo de montada. 

Y había sido tan buena. Las piernas de Jinyoung solo ahora comenzaban a dejar de tambalearse. Y ahora que lo pensaba, tampoco se sentía muy afiebrado. Se sentía bastante bien, de hecho. 

No encontró ningún cepillo de dientes de repuesto bajo el caño ni en ninguno de los cajones, y no creía que Jaebeom, un hombre al que no le gustaba ser tocado, apreciara el que Jinyoung usara su cepillo de dientes, a pesar del sexo que habían tenido la noche pasada. 

Así que Jinyoung solo puso algo de pasta dental en su dedo e hizo lo mejor que pudo con ello. Cuando salia del baño, se detuvo bruscamente al ver a alguien mas en la habitación. 

ORDENAME ALFA [BNIOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora