capitulo: 3,5

5 0 0
                                    

Capitulo: 3,5 Sacrificar tus deseos para hacer realidad los de alguien más

-¿Qué haces tú aquí? Largo de mi casa.

-está bien, me iré, fui muy tonta al pensar que podíamos resolver esto juntos.

Cuando Hiro se despertó y me vio sentada en el piso me trato como una cualquiera.

No sé, donde ir ya que mi hogar desapareció.

Al momento de abrir la puerta de la salida de la casa de Hiro me empezó a dar una jaqueca horrible.

Escuche un grito espantoso dentro de la casa, era Hiro quien sufría no dude en volver a entrar a su habitación.

-¿Estas bien?, pregunte muy agitada.

-que me has hecho, porque me empezó a doler la cabeza de repente.

- no sé porque sucedió esto, a mí también me dolió muy fuerte la cabeza al abrir la puerta de tu casa.

Quizás no debemos estar separados, es lo que yo pensaba en ese instante.

En ese momento un niño pequeño como de unos 4 años de edad entro corriendo a la habitación.

-¿estás bien hermanito?

El niñito corre para abrazar a su hermano, pero su cuerpo me traspasa

Mientras que Hiro, abrazaba a su hermano, miraba mis manos y me decía a mí misma, claro recuerda que estas muerta.

-Si estoy bien Koichi, decía Hiro al preocupado niño.

La historia de Hiro es algo dramática, sus padres son empresarios y por eso casi nunca tienen tiempo para estar con él, por lo menos su hermana mayor, cuido de el en su niñez, pero a hora su hermana está casada y con familia, por eso Hiro a hora le tiene una especie de rencor a su hermana.

Lo único que me queda es mi hermanito, me decía.

Hiro fue a su escuela, y yo deambulaba por la casa.

La vecina de Hiro, también es muy buena persona, Hiro siempre en las mañanas le dice si puede hacer el almuerzo para el pequeño Koichi.

Me recuerda a mi pequeña Momo, ahh como estará mi hermanita, ¿pudo salir de las llamas?

Cuando Hiro llego, nos pusimos de acuerdo para terminar de una vez, este maldito juego.

Despertamos en un lugar abarrotado, con muy poca luz.

-qué extraño estamos encerrados en este lugar, le dije a Hiro sacudiendo fuerte los barrotes

Al agitar uno de los barrotes, un papel doblado cae a mi lado.

En el papel decía exactamente esto.

"si deseas continuar debes cortar cuatro dedos de tu mano, si no lo haces pierdes el juego, si es necesario puedes pedirle ayuda a tu compañero"

En el suelo de este lugar, había una cierra

-Hiro observa el papel y dice, entonces procedamos.

Hiro toma fuerte la mano de Mikan y con la otra mano toma la sierra.

-Espera, me duele, suelta mi mano

-debemos cortar tus dedos.

-puedo hacerlo yo sola.

Hiro mira con odio a Mikan y le lanza la sierra.

-vamos hazlo, si no quieres morir, corta tus dedos

Casa de Muñecas 2 :EXTRADonde viven las historias. Descúbrelo ahora