Daha ölüm/Más muerte

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11 de enero de 1645

—¡Ibrahim! —le gritó el Sultan a su hermano. El şehzade corrió hasta llegar con él. —Ve al palacio.

—¿Qué? —preguntó, confundido.

—¡Ve al palacio! —le gritó. —Todos están en peligro.

—¿De qué habla? —le preguntó Mehmed.

—Gülbahar mentía.

—Explícate —le pidió Selim.

—Tendremos que pelear aquí —respondió. —Pero Ibrahim tendrá que regresar, Murad necesitará ayuda.

—Y ¿Por qué crees que Mahmud ataque el palacio? —le preguntó Ibrahim.

—Porque yo lo haría. Algo me dice que él también lo hará, tengo un mal presentimiento así que vuelve con unos cuantos a la capital.

Ibrahim asintió, hizo reverencia y fue a buscar a soldados para regresar a Estambul.

—¿Cuál es el plan? —le preguntó Mehmed.

—Matar a Mahmud —respondió. —¡Inicien todo para luchar! —le gritó a su ejército.

Ellos lo miraron confundido pero aún así obedecieron.

—Sultan —lo llamó el sultanzade Mustafa, hijo de Ayşe Sultan. —¿Pasó algo?

—Mahmud está aquí —respondió.

—Ganaremos —le aseguró.

—Ganaremos —le aseguró

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—Allah mediante sí.

—Amén —dijeron los príncipes y el sultanzade.











Fatmagül gastó su última flecha en un verdugo para después sacar una daga de su vestido y posteriormente pelear con un eunuco al cual le cortó la garganta

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Fatmagül gastó su última flecha en un verdugo para después sacar una daga de su vestido y posteriormente pelear con un eunuco al cual le cortó la garganta. Tenía en claro que daría su vida por la familia que tenía. Tanto era su amor que sería capaz de matar a personas por ellos. La Sultana no sabía cuándo tiempo tenía luchando pero, sabía que no se rendiría.

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