Mi ojo produjo una lagrima, no de tristeza, si no de emoción, pues me ponía feliz saber que alguien sentía un cariño tan grande por mí, pero también esa lagrima contenía nostalgia, pues Neithan y yo no podíamos ser algo más que amigos, pues yo quería a Tay, o al menos eso creía.

-Neithan, te dije que no dijeras nada. Mis pensamientos ya estaban en orden, estaba segura de que estaba enamorada de Tay, pero llegas tú, con tus palabras, con tus flores y con tu mirada, y solo me haces dudar de lo que siento. Sabes que esto está mal. Pues si amara a Tay n tendría ni la menor duda, pero no, estás tú, y eso solo me deja una opción y es pedirte que olvidemos todo esto. Olvidemos que viniste y que me dijiste eso. Ambos debemos aceptar que estoy con Tay y así pienso quedarme.

-¿te será fácil olvidar esto? – me empujó hacia él, se acercó aún más a mí, tomo con su mano mi rostro, podía ver mi reflejo en sus ojos, mi piel sentía mucho frio, pero después percibí su aroma y mi cuerpo tomo una temperatura cálida. Miro mis labios y yo los suyos. Desvió sus labios de los mis y me susurro al oído – No me pidas olvidarte, porque tú misma sabes que no me podrás olvidar, porque ambos sentimos lo mismo uno por el otro – sus palabras entraron a mi mente y después se fueron a mi corazón, en ese momento tome su rostro con mis manos, me acerque a él, tome valor y le dije:

-n puedo hacer esto, yo estoy con Tay, el me ama y yo aprenderé a amarlo – pude ver cm se le tenso la mandíbula, cerró los ojos y se apartó.

-bueno, ahora sabes lo que siento por ti, y no vine para cambiar tus sentimientos por Tay, solo vine para que lo supieras.

-si no viniste a eso, que es lo que queras lograr.

-quería que me disculparas y que me des una oportunidad para convertirme en tu mejor amigo y confidente – me giño el ojo

-claro que serás mi mejor amigo, jajajaja mientras no me intentes besar siempre que vengas todo estará bien...

-jajaja no te prometo nada. Nos vemos en el baile.

Neithan se fue, pero por primera vez no deje que los pensamientos me invadieran, me metí a bañar y me quede un buen rato bajo la ducha cantando canciones de mi adolescencia. No me sentía mal, pues sabía que había dejado claro que Tay era mi novio y que eso no lo podía cambiar Neithan.

Salí del baño y me puse el pants que Tay me había dado el día en que nos habíamos quedado en su departamento a ver películas.

Me mire al espejo y puse mi lap top enfrente a mí para ver la imagen del maquillaje que había escogido y del peinado que me pensaba hacer. Puse música a todo volumen y comencé a arreglarme.

No quería verme muy extravagante, así que comencé maquillándome como de costumbre, pero esta vez, aplicaba un poco más de cada maquillaje. Me puse pestañas postizas y as peiné y maquile como una profesional. Me pinte las cejas un poco y me puse una sombra oscura.

Mis labios los pinte con un color similar al que yo tenía naturalmente, solo que este era más fuerte y era estilo mate.

En menos de dos horas mi maquillaje estaba listo pero mi cabello no.

En ese momento recordé que para mí fiesta de 16 años solo me había ondulado el cabello y me había hecho un chongo con mechones salidos. Se veía elegante y era fácil. No lo dude mucho, saque mis tenaza y comencé a peinarme.

Estaba a punto de terminar cuando llegó Elaisa.

-¡He vuelto! – fui a ver como se veía, pero la que se llevó la sorpresa o fui yo.

-¡¡¡Elizabeth!!! Pero que hermosa te ves. A mí no me mientes, ¿quién demonios te maquillo? Te ves divina

-mira quien lo dice. ¡Elaisa te ves fenomenal! – iba con su misma ropa con la que se había ido en la tarde. Sus ojos se veían más grandes, se había puesto unas pestañas postizas más grandes que las mías, sus ojos estaban cubiertos por una sombra negra con azul, sus labios eran rojos y sus mejillas estaba un poco tintadas de color melón. Su cabello está totalmente lacio, solo tenía una trenza en forma de corona, per con el vestido Elaisa parecería una estrella de cine que va al estreno de su película.

Te amo, quizá  no es para tanto, pero es para siempre.Where stories live. Discover now