London days

24. Rodaje

A las seis suena la alarma de su móvil. A Anna le parece que ha dormido únicamente diez minutos. Está destrozada. Aún así, se levanta y empieza a vestirse. Ve que Matt se despereza también. 

_ Buenos días - susurra Anna -. Voy a ver si me puedo duchar. Espero poder entrar en mi habitación.

_ Te puedes duchar aquí si quieres - le propone Matt. Pero Anna niega con la cabeza.

_ Tengo allí toda mi ropa. Nos vemos luego.

_ Ciao.

Anna se dirige a su habitación y llama a la puerta con la mano. Segundos después, Cres abre con una sonrisa enorme en la cara. 

_ ¡Hola! - dice bajito.

_ Veo que la noche ha ido bien, ¿eh? - comenta Anna.

_ Más que bien. Aún está ahí medio-dormido. Pasa, pasa...

Anna entra y ve a Ian durmiendo a pierna suelta en la cama de Cres. Ella se dirige hacia su maleta y empieza a preparar la ropa que se pondrá después de la ducha. Cres intenta despertar a Ian.

_ Ian, levanta. Ya es la hora. Te tienes que ir a tu habitación a vestirte.

_ Mmmpfff...

_ Ian...

Finalmente, parece conseguirlo. Abre los ojos. Mira a Cres, mira a Anna y sale de la cama. 

_ ¡Ian! ¡Que estás desnudo! - exclama Cres.

_ Ya lo sé.

_ ¿Qué va a pensar Anna? - cuestiona Cres.

_ Bueno, nada que no haya podido pensar antes - responde Ian.

_ ¿Cómo? - le pregunta Cres.

Anna intenta parecer ajena a la conversación, rebuscando en su maleta, pero por dentro piensa “ay”. Ian se queda mirando a Cres, extrañado. Se explica.

_ Bueno, Anna ya ha visto antes esto.

_ ¿Te refieres  a que ha visto a otros hombres antes o que ha visto a “este hombre” antes?

_ Creí que sabías... Anna y yo estuvimos liados.

_ Bueno, yo no lo llamaría así... - interrumpe Anna.

_ ¿Os habíais acostado juntos? - pregunta Cres.

_ Yo también creía que lo sabías, Cres - responde Anna. 

Pues no, por lo visto, no lo sabía. Y aunque no dice nada más, se nota a la legua que ha pillado un mosqueo monumental. Anna aprovecha el momento de tensión para coger su ropa y entrar en el lavabo a ducharse. 

Cuando sale, Ian ya se ha ido. Antes de que Cres entre a la ducha, aprovecha para explicarse un poco.

_ Cres, lo siento. Estaba convencida de que lo sabías. No te lo quería esconder ni nada parecido. Para mí no tiene ninguna importancia. Ya te dije que no estoy interesada en él. 

_ Anna... - Cres duda antes de proseguir -. No debería hacerme ilusiones con él. Se dedica a follar con todas, ¿verdad?

_ Bueno... No sé...

_ ¿Salisteis juntos?

_ No. 

_ ¿No te lo pidió?