Different || Matt Espinosa

Once

"Ya estoy acá ¡Es hermoso! ¿Quieres fotos?" leo en la pantalla de mi teléfono mientras mastico mi sándwich de huevo. Mastico más rápido y trago, para escribir la respuesta. Sacudo mis manos y las limpio en mi camiseta antes de tomar mi teléfono, para no llenarlo de comida.

"Claro!! Mándame todas las que tomes!" la campana suena indicando que la hora de almuerzo ha concluído. Me levanto de las gradas, arreglando mi falda y caminando hacia mi siguiente clase. Se supone que tengo Matemáticas, pero el profesor no está en la ciudad desde hace unos días, por lo que voy al salón y me siento al final, haciendo nada. Me coloco mis audífonos y la música de The 1975, mi banda favorita, llena mis oídos.

Un fuerte ruido me despierta de mi sueño, y cuando abro los ojos Noa me observa con una sonrisa burlona- Levántate, maldita -no entiendo porque me llama de ese modo y puedo sentir mis cejas arrugarse en una mala cara. Ella ríe y se encoge de hombros, sentándose en el pupitre de enfrente.

-Supongo que te he tomado cariño -ella comenta con una sonrisa. Me estiro para después volverme a acostar sobre el pupitre- ¿Qué hora es? -Pregunto con los ojos cerrados- Sólo falta una clase -abro los ojos de golpe y ella ríe- Antes que puedas decir nada, no sabía donde estabas y como el profesor Phillips no vino, nadie entra en el salón, pero yo voy a Matemáticas y cuando entre acá estabas -no puedo enojarme ya que su tono de voz no me lo permite, siempre me causa gracia cuán enérgica es cuando habla.

-Bien, tranquila -digo riendo- Hey, en una semana es tu cumpleaños -ella dice y me siento agradecida por su lindo gesto de recordármelo- ¿Has hablado con Nash? -pregunto enrollando mis audífonos en el teléfono y guardándolos en mi mochila. Me levanto y ella también- Sip -dice saltando y con una sonrisa- Eso es bueno -comento- pero me tengo que ir Noa, hablamos luego por mensaje -aviso justo antes de salir del salón. Me toca literatura.

-Hey, Jordan -la profesora llama cuando apenas he entrado en el salón. La profesora Jenn es muy bonita. Es joven, piel blanca, cabello color chocolate y ojos azules- Hola -saludo con una sonrisa- Mi amiga la psicóloga quiere saber cuando estas libre, digo para tu primera cita -su emoción me hace reír. Mmm, supongo que hoy tengo libre -digo encogiéndome de hombros. Ella sonríe- Perfecto, le haré saber, nos reunimos acá a las cinco, y te llevaré a su clínica -dicho eso da un pequeño salto y un aplauso.

-¡Jordan! -La voz chillona y veloz de Noa me llama a la hora de salida- ¿Harás algo hoy? -Estoy a punto de responder que no, cuando recuerdo mi maldita cita con la psicóloga- Um, si -respondo con una mueca- Oh... bueno, no importa. ¿Cómo va todo con Matt? -Pregunta ya en la puerta principal de salida- No sé, supongo que vamos bien -contesto sonriendo- Me alegro, te hablo después entonces -contesta. Me despido con la mano y me voy camino a casa.

La ansiedad se apodera de mi cuando mi reloj marca las cuatro y media. Me pongo un short azul y una sudadera gris enorme. Mis Toms nunca faltan en mi conjunto, tengo al menos cinco pares. Tomo unos grises con detalles de zebra azules. Para finalizar, en lugar de peinarme, amarro mi cabello en una cola alta.

"Estoy por ir con la psicóloga. Deséame suerte. Espero que la estés pasando increíble" envío a Matt por mensaje privado en Twitter. No contesta enseguida, ya que debe estar muy ocupado con su gira y esas cosas que no entiendo.

Mis piernas tiemblan mientras me dirijo hacia la escuela. Esta vacía, con sólo el auto de la profesora Jenn. Ella esta afuera del auto apoyada en la puerta. Me ve y camina rápidamente hacia mi.

-Jordan, pensé que no vendrías -admite con alivio. Sonrío, pero estoy segura que más bien fue una mueca- Vamos, no está muy lejos de acá -sonríe y me conduce a la puerta del copiloto. Entro y ella rodea el auto.

Al cabo de diez minutos ella aparca el auto enfrente de la supuesta clínica. No parece una clínica, es más una casa. Los nervios me comen las entrañas mientras entramos. Hay una señora limándose las uñas detrás de un escritorio. La profesora carraspea y la anciana nos observa con una ceja elevada- Hola, busco a Amanda... a la licenciada Turner -la anciana levanta el teléfono- La buscan, licenciada... es una joven, bueno, dos jóvenes -me observa antes de continuar- bien -finaliza-. Ya viene.

Sus pasos se escuchan por las escaleras y me llevo mi mano al brazo, sintiendo la peculiar necesidad de rascarlo. La psicóloga es igual de joven que mi profesora. Tiene el cabello largo y lacio, que le llega a la cintura, por lo que me siento celosa. Sus ojos color avellana son grandes y los acompañan sus finas y largas pestañas. Finalmente su atributo más envidiable es su sonrisa, blanca y con los dientes rectos. Llega a mi lado y noto que es unos centímetros más alta que yo.

-Hola, Jordan -saluda sonriendo, y presiento que va a tratarme como a una niña pequeña- Um, hola -tímidamente y sin verla respondo- Te la encargo -dice a su amiga y luego se dirige a mi- Bien, mucha suerte. Vengo por ti en una hora -sonríe, se despide con un abrazo y se va. Volteo a ver a la psicóloga, quien me hace un gesto con los brazos señalando las escaleras. Subo y puedo sentirla pisando mis talones.

-Es ahí -señala una oficina de las tres que hay. Parece ser la más grande ya que es la de en medio. Las paredes son blancas, tiene un pequeño escritorio negro en una esquina, y en los estantes hay muchas fotos, incluso algunas plantas. Su diploma es el único cuadro en la pared. Dos sillones hay en la esquina, ella se sienta en uno y luego me indica que me siente en el otro.

-Comencemos por lo básico -saca un pequeño portafolio y coloca unas páginas en blanco sobre él- ¿Por qué acudiste a mi? -mira las páginas y luego a mi. Mi interior se llena de rabia.- Yo no acudí a ti, me obligaron -respondo con la mandíbula tensa. Ella ríe- Bien, cuéntame el problema -es muy difícil para mi abrirme con las personas, pero si voy a estar en tratamiento con ella tengo que hacerlo.

-Todo empezó cuando tenía tres años. Mi padre abandonó mi hogar. Mi madre no trabajaba ya que él nos mantenía. Mientras mi mamá pasó horas buscando trabajo mi abuela cuidaba de nosotros. Una niña de tres años y un niño de seis -ella asiente y escribe en sus benditas páginas- Bien, continúa -alienta.

-Mi madre se volvió muy... agresiva. Recuerdo la rabia que sentía cuando mi hermano recibía regalos de su parte en navidad. Yo nunca recibía ninguno. No sé en realidad porque descargaba su ira en mi, si era la más pequeña. Dylan fue, es y siempre será el favorito.

-Tu padre, ¿no has sabido más de él? -pregunta mordiendo su lapicero- No -digo viendo hacia abajo- Bueno, entonces, cuéntame de tus amigos -ella cambia el tema muy rápido para mi gusto- Um... este año hice mi primer amigo. Su nombre es Matthew. Es famoso -río y niego con la cabeza con solo pensarlo, en realidad siempre olvido que tiene fans, es incluso raro- Oh -ella levanta las cejas y abre la boca en sorpresa.

-También tengo una amiga llamada Noa, hace poco más de una semana que la conozco -juego con mis manos, evitando así ver a la psicóloga.

-Mi sobrina se llama Noa, Noa Collins -mis ojos se abren de golpe y la observo- ¡Oh por Dios! hablamos de la misma Noa -río, y ella lo hace conmigo- Siempre obsesionada con Nash, ¿no? -me pregunta con una sonrisa. Río y asiento.

Esta mujer me agrada.

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Probablemente es lo más que me he tardado en escribir un capítulo, y lo peor es que es tan malo como este. Definitivamente el capítulo más aburrido que he escrito en mis quince largos años de vida.

Pero bueh.

¡OMFG 1.5K MIL GRACIAS LINDURAS BELLAS! Gracias también por su paciencia.

Oigan creo que estoy haciendo más larga la nota final que el capítulo en sí pero me gusta hablar con ustedes. Pero ¿vieron el drama que pasó ayer con todo lo de Taylor? me puse a llorar y al final terminó siendo broma del maldito, lo peor es que en pleno cumpleaños de Shawn pero buEH. ¡ESPERO QUE MATT GANE SU CATEGORÍA EN LOS TCA! ¡ESPERO QUE MI MAMÁ SE DIGNE EN COCINARME ALGO QUE TENGO HAMBRE!

GRACIAS POR TODO BESOS MUAK LAS AMO CUÍDENSE SONRÍAN PORQUE YO DIGO. Comenten voten y eso.

Pd: al lado dejo a la profa Jenn