505 [m.c.]

03.

¡Toc toc toc! Tocó Michael de nuevo en el 505.

Amber abrió la puerta lentamente y asomo su cabeza, Michael tenía que bajar su rostro para poder verla, ella lo reconoció y su semblante se llenó de pena.

"Lo siento." dijo sin mirarlo a los ojos.

"Hey, soy yo quien debería estar avergonzado." suspiró. "Lamento haberte tratado así, yo..."

"Tú lo sabes ¿no es así?" interrumpió ella, su manera de hablar era diferente a la de la noche anterior, más baja y pausada. Él no podía ocultarlo, así que asintió suavemente. "Michelle te contó ¿no es cierto?"

"Si, ella solo..., ehm, no creas que es una entrometida..."

"Está bien, todos aquí lo saben no es ningún secreto."

"Yo no y lo siento, soy Michael el hermano de Michelle." el chico extendió su mano amablemente y ella la apretó con suavidad, las curitas de sus dedos rozaban la palma de él.

"Soy Amber tu vecina, pero eso es obvio" sonrió y Michael no pudo evitar hacerlo también, era contagiosa. "Lamento los inconvenientes que ella te haya causado, es algo mal educada." agregó apenada.

"Esta bien Amber, no es tu culpa."

"Todos dicen eso" suspiró cansada.

"Ya veo porque era el único amargado que se quejaba de, ehm, eh.. ¿ella?"

"Ashley."

"¿Ashley?"

"Si, ese es su nombre." respondió llevándose las uñas a su boca. "Lo siento."

"Esta bien no sigas disculpándote, aunque Amber es más lindo." y sonrió haciéndola reír, ella lucía joven, pero sus ojeras decían que eran de la misma edad.

"Gracias." titubeo durante un instante. "Eres muy amable."

"Fui un idiota contigo, es lo mínimo que puedo hacer."

De repente un timbrazo se oyó a espaldas de Amber interrumpiendo la conversación.

"Oh, es mi teléfono" fue lo único que dijo.

"Está bien" respondió Michael "Nos vemos mañana, un placer conocerte Amber."

"Igual Michael, un placer conocerte siendo yo misma." dijo ella y cerró la puerta de su apartamento con una gran sonrisa estampada en su rostro.