Otabek Altín es un exitoso empresario como cualquier otro de su edad: con una vida estable, una economía perfecta y una soledad invisible. Tras hacerse cargo del hermano menor de uno de sus amigos más allegados de la universidad, su vida da un giro...
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❝ Querido mío, trae esos (Levi's) 501 un poquito más cerca, un poquito más cerca. Y cariño, mi amante, haz eso que nunca hacemos estando sobrios, sobrios.
Oh, sí, bajo las luces de la cocina, todavía pareces dinamita. Y quiero acabar encima de ti. Oh, no necesitamos un sitio al que ir, solo pon la radio. Sabes lo que quiero hacer. ❞
━Dance to this, Troye Sivan ft. Ariana Grande.
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Presentación Moulin Rouge: una semana antes. Casa Babichev. 10:15 P.M
Yuri suelta un suspiro una vez que se extiende por las sábanas rojas de Mila. Ella a su vez termina de secarse los cabellos pelirrojos mientras su gatita descansa en la almohada y el otro juega con los mechones dorados del muchacho, justo a su izquierda, cuando pensaba en las posibilidades que tiene de tomar sus cosas en ese momento para regresar a su casa después de haberse perdido por cinco días enteros durmiendo en el suelo del cuarto de su compañera.
Ra y Bastet son los mininos de Mila. Ella cuenta en ese instante que, cuando se hallaba en medio de una borrachera, los encontró en la puerta de su casa en una caja junto a una nota que decía que los animales eran feos y que ella los cuidara porque de toda la calle, ella era quien parecía poder quererlos.
—No sé cómo pueden odiar a los gatos esfinge —dice ella desde su sitio en el tocador de madera blanco, alaciando sus mechones rojizos—. Bastet usando suetercitos rosas es lo más adorable del universo.
Los nombres fueron escogidos por Georgi. A él le fascina la cultura egipcia y creyó que los dioses eran dignos para estar en las plaquitas de los nombres de cada uno de los gatitos. De igual modo, cada uno alza la cabeza cuando se les llama por ellos.
—Tú tienes un gato también, ¿no? —pregunta la chica desde su punto, terminando de arreglarse para ir por la mascarilla facial, de esas que venden en sobrecitos y huelen a frutillas— ¿Cómo se llama?
—Es el gato de Otabek —responde el chico, extendiendo el brazo en dirección a su amiga, pidiéndole una mascarilla para él. Cuando Mila le lanza el sobre plateado, él lo recibe junto con la bandita para retirar los cabellos de la frente—. Su nombre es Bruno, es el mejor maldito gato de este universo.
