Pero por otro lado ¿En dónde está? ¿Quien la tiene? No sé qué hacer, y la mirada acusatoria de los padres de Carlos no me ayuda en nada. Me miran como si fuera la mismita mierda.

Ya sé que no fui la mejor persona antes, que cometí errores. Pero soy humano y cambie.

Yo no soy más ese adolescente que jugaba con las chicas y con sus sentimientos .Aprendí lo que es amar, aprendí a perder el amor y a encontrarlo de vuelta con Julieta.

Si algo se, es que el amor puede mover hasta montañas y me voy a encargar de que todos entiendan eso .De que yo cambie.

- Julieta no estaría desaparecida si no fuera por vos.- Se quejó el padre de Carlos.

Nunca le voy a caer bien a ese hombre. Lo ignoro, no tengo tiempo de hacer manobras para agradarle. Estoy nervioso, los padres de Julieta no tardan en llegar al igual que los padres de Ada.

- Papa ya basta, suficiente con que Juli no aparezca para que le eches la culpa de algo que el ciertamente no tiene.- Me defiende Carlos, el cual está abrazando su esposa que no para de sollozar. La verdad me estoy preocupando por ella y él bebe. No está bien que este así.

- Esta bien Carlos. - Digo tranquilizado la riña de padre e hijo.-Lo único que quiero por ahora es que Julieta aparezca sana y salva.

- Eso queremos todos.- Solloza Ada , ella tenía los ojos rojos de tanto llorar..

Carlos la abraza y le da muchos besos a su alrededor. Susurrándole que va estar todo bien, que la ama y que Juli va a aparecer.

Eso espero no puedo y no me imagino una vida sin ella. ¿En qué momento la llegue a amar tanto?

Golpean la puerta, sacándome de mis pensamientos. Me encargo yo de ir a abrirla, esperando que sean los padres de Julieta. Efectivamente eran ellos, los cuales me miraban confusos. No sabían por qué razón los había llamado, la verdad solo les dije que vinieran rápido al departamento de su hija y colgué.

- Señores tenemos que hablar.-Hablo serio, dejándolos pasar.

- No me digas que dejaste embarazada a mi niña.- Habla molesto Arturo.

Los tres pasamos hasta la estancia en donde se encontraban todos.

- No, no es eso lo que sucede.

Los padres de Julieta se ven extrañados al ver a todos aquí. Yo los miro con nerviosismo. No se cómo decirle saque su hija no aparece.

- ¿Que paso? – Pregunta Ana, mirando extrañada a todos. Se acercó a saludar a su sobrino y a su cuñado. El padre de Carlos es hermano del papa de Julieta .Ambos se abrazaron.

No sé cómo empezara hablar, recuerdo el día en que secuestraron a Ariel. Y no le deseo a ningún padre pasar por esos sentimientos de desesperación e impotencia.

- ¿Hermano que ocurre? Ustedes que hacen con el novio de mi hija.- Comenta mirando para todos lados.- Y por cierto ¿Mi hija?- Pregunto extrañado el padre de Julieta.

Dios como me duele el pecho, no sé cómo ser lo menos brusco posible. ¿Cómo les decís que no sabes en donde esta?

Nadie en la habitación dijo una palabra, tofos me miraban a mí. Esperando que les diga.

- De eso es lo que les quiero hablar. – Digo en tono bajo. Todos me miraban atentos.- Ayer a la noche planee encontrarme con Julieta aquí en su departamento. La espere toda la noche y gran parte del día .Me dijo que estaba saliendo del trabajo.- Me costaba seguir hablando con ellos.- Pero nunca llego.- Finalizo, con la voz temblorosa.

Ana suelta un chillido y se larga a llorar en los brazos de su esposo.

- ¿Qué quieres decir? – Pregunta Arturo gritando .Intentando creer que no es cierto, lo que yo les estoy diciendo, que Julieta está bien y ya va a volver.- Es mentira mi hijita, está bien.- Grita, haciendo asustar a los niños.

- Eso es lo que no sabemos, no sabemos en donde esta o con quien.- Digo.

- Yo te dije que teníamos que cuidarla más. –Solloza Ana. Entre los padres se culpaban por lo que le paso a su hija.

Como si ellos tuvieran la culpa de que un loco enfermo se la haya llevado. Maldito mundo inseguro, en donde una chica no sabe si va a volver a su casa.

Los padres de Julieta, discutían entre ellos. Los de Carlos me miraban con enojo, Ada y Carlos trataban a de calmar a los niños.

Me sentía aturdido y perdido ¿Qué hago?

Pienso en ella, en mi faro. Ella si estuviera acá, ya sabría qué hacer. Estaría planeado todo. ¿Qué haría Julieta Ahora? Me pregunto y ahí es cuando se me ocurre hacer lo mas sensato, ir a la policía a hacer una denuncia.

- Silencio.- Grito, haciendo que la habitación quede en un silencio absoluto.- Primero tenemos que hacer una denuncia a la policía y luego hacer carteles y pedir información de ella por las redes. Hay que encontrarla.- Digo en tono autoritario.- No es momento de buscar de quien fue la culpa u odiarme.- Eso ultimo lo digo mirando a los padres de Carlos.-No quiero que peleemos, somos todos familia y ahora es cuando tenemos que estar unidos, para encontrar rápidamente a Julieta.

- Si tienes razón, yo te acompaña la comisaria.- Dice Carlos, parándose.- Ustedes hagan los carteles y difúndanlos. – Murmura hacia Ada .

- Dale.- Respondí mientras buscaba mis cosas. Vi a mi hijo y corrí abrazarlo

- Te amo hijo, nunca lo olvides. Sos mi campeón.- Digo en un susurro para que solo él me escuche.

- Yo también te amo papa.- Me dijo abrazando me.

Si algo se es que nunca me tengo que ir sin decirles a las personas que amo, que las amo. Porque nunca voy a saber si las vuelvo a ver.

Loca, sexy y pelirroja [2]Where stories live. Discover now