Capitulo 5

10.7K 529 10
                                    


Es difícil para mí, me encantaba mi trabajo, me sentía tan bien, pero la vida sigue. Conduzco hasta mi casa, se que encontrare algo mejor. Al llegar, entro con mi pequeña caja y acomodo unas cuantas cosas. Me siento un poco agobiada pero eso no es nada, todo pasara, tengo que ser fuerte por mi bebé.

Los días van pasando y junto con estos las semanas y uno que otro mes, ya tengo 5 meses de embarazo y se nota mi chiquito creciendo dentro de mí. No tengo un trabajo estable, llevo la contabilidad de unas 3 pequeñas empresas, pagan bien y puedo trabajar desde casa.

Hoy sentí la necesidad de ir por un helado, así que preparo mi cartera y tomo las llaves de mi auto. Conduzco hasta la plaza central. Me estaciono en los parqueos y voy camino por mi helado. Tengo ese deseo por un mantecado, hasta agua se me hace la boca. Pido el manjar y lo disfruto sentada en una de las mesas. Que delicia mmm!!

-Ana?- escucho detrás de mí.

-Señor Roberts, que sorpresa- respondo sacando la cuchara de mi boca.

-estas más hermosa.

-si, la maternidad me está sentando bien.

-eso veo, puedo sentarme?

-si quiere, aunque veo que lleva prisa, quizás lo interrumpiría en su trabajo.

-solo ando buscando un regalo para mi madre, mañana es su cumpleaños y tendremos una cena familiar.

-que bien- sigo comiendo mi helado mientras este se sienta.

-porque cambiaste tu numero.

-no quería ser molestada.

-y también te mudaste.

-porque le preocupa eso ahora?

-porque te estuve buscando Ana.

-no debería, no necesito su dinero como me lo hice creer, puedo con mi hijo, además, quien dice que es suyo? Me lo dejo bien claro en la cafetería.

-Ana, comprende, es extraño que de buenas a primera, aparezca una mujer diciendo que tiene un hijo mío. Un hombre que solo piensa en trabajo.

-por eso mismo, quise desaparecer, para que siguiera en su trabajo y no molestarlo con la prensa. Eso sería un escándalo.

-por dios Ana, porque actúas así?

-no soy de estas mujeres casa fortuna, vengo de una familia adinerada, esos lujos no me llaman la atención. Aprendí a trabajar desde pequeña y a comprender el valor del esfuerzo.

-déjame ayudarte con el bebé.

-para que cuando nazca le haga la prueba de paternidad? A ver si es cierto para darle su apellido? Ya esas cosas me las se Señor Roberts.

-joder Ana, permíteme estar contigo, dame una oportunidad.

-oportunidad para qué? Pretende que formemos una familia? No quiero esa falsedad para mi chiquito. El no tiene culpa de una noche de borracheras.

-bien, empecemos de cero, que dices?

-lo voy a pensar- me levanto, ya termine el helado y me iré a casa.

-espera, déjame llevarte.

-viene en mi auto.

-no puedes conducir así, y si te pasa algo?

-ahora esta preocupado? Puedo conducir hasta los 6 meses y medio. No se moleste.

-Ana, por el amor de dios, baja tus defensas. Hablemos como personas civilizadas.

-si quiere que hablemos como adultos, quedamos aquí mañana a las 3- asiente y me retiro.

Subo a mi auto y me encamino a casa, mi deseo por el helado no fue como espere, debí comprarlo para llevar a casa. Al llegar, veo el auto de mi hermano, este me espera en la puerta cuando me ve llegar.

-dónde estabas bolita de queso?- río por el sobre nombre.

-comprando helado, le tengo amor a los mantecados.

-y quien es el que te viene siguiendo?- giro y veo que es el imbécil de Ricardo.

-el padre del bebé- respondo entrando a la casa.

-ese es el idiota que te embarazo?

-si

-y que quiere?

-que le de participación con el niño.

-y entonces?

-no quiero, quiero criarlo yo, el no tiene porque estar detrás de mi ahora, me dejo en claro que no cree que es suyo.

-pues, está en la puerta- dice mirándome, esto me está estresando. Escucho como toca la puerta y voy a abrirla.

-porque me seguiste?

-quería ver dónde vas a cuidar a nuestro hijo.

-ahora es nuestro?

-escucha Ana, quieras o no, soy el padre y tengo derecho a estar con él.

-oh! Ahora tienes derecho. Ricardo por favor, dejemos esto por la paz y vete.

-Ana, por favor, permíteme estar con ustedes, es una oportunidad, solo una y veras que no lo arruinare.- escucho a mi hermano detrás de mí, el dice que sí, que acepte las disculpas.

-bien, pero no quiero que pases el día metido en mi casa.

-de acuerdo, quiero que vengas conmigo a la cena con mis padres.

-no

-ven por favor, así conoces a mis padres.

-no

-mujer, que terca eres...

-ella ira, ven a buscarla mañana temprano-responde Randy al lado de mi, Ricardo lo mira con confusión.- solo devuélvela temprano.

-quien eres?- pregunta Ricardo.

-soy su hermano- estrechan las manos y puedo notar como se relaja su cuerpo.

-un placer, Ricardo.

-Randy, solo espero que no metas la pata o si no te corto las pelotas- Ricardo ríe pero sé que Randy habla en serio.

-nos vemos mañana entonces- se despide y sube a su auto.

-esta me las vas a pagar- amenazo a mi estúpido hermano.

-no te preocupes hermanita, veras que no te vas a arrepentir!!

Nuestro {N.1}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora