Posesivo

[41] - Reagan

[40] - Reagan

Reagan tenía una debilidad y todos, incluso yo, sabíamos cuál era esa debilidad, su padre. No le teme a nadie tanto como a ese hombre, ni siquiera a Dios todo poderoso. Demonios, incluso su padre me asustó en el momento más inesperado. Y me estoy saliendo de la corazonada y adivinando que Reagan no tenía suficiente cerebro para esconder el dinero en un lugar razonable. Probablemente esté sentado en el fondo del armario con el resto de su escondite porno. Por lo tanto, hizo que la idea sea aún más creíble si su padre encontrara esa gran cantidad de dinero.

"No soy así, Aiden. Si quiero resolver las cosas con este chico, entonces será mi camino. Él no solo se librará con esta clase de cosas, nadie lo hace. No cuando te hacen daño " finalizó y comenzó a caminar hacia la entrada de la escuela.

"Kieran" me arrastré antes de que él pudiera ingresar a la escuela.

Dejó escapar un suspiro audible y se frotó la sien, como si le estuviera dando dolor de cabeza o algo así. Únete al maldito club. "Bien, no lo lastimaré. Solo quiero hablar con él" dijo Kieran, volteándose con una sonrisa en su rostro. Perra bipolar.

"¿Recuerdas la última vez que me dijiste que solo querías hablar?" Le pregunté, cruzando los brazos sobre mi pecho con una mirada escéptica.

"Sí, tuvimos la mente soplando de sexo" reflexionó, sonriendo cada vez más amplia como mi cara halagada.

"No lo hicimos".

"Pero lo hicimos".

"Solo prométeme, prométeme que no le harás nada a menos que primero haga algo. Entonces puedes ir diciendo que fue en defensa propia" dije.

"No estoy haciendo promesas por él momento" dijo, poniéndose serio. ¿Por qué? ¿Por qué debo elegir a alguien tan complicado como este hombre? Es grosero, arrogante, y nunca me escucha cuando solo hago cosas para su propio bien.

"Al menos dime que no llevas una pistola contigo ahora mismo" le dije, bajando la voz por si había alguien cerca.

"Ojalá lo hiciera, mi Sol" arrastró Kieran, como si hubiera cometido el error. Y sin otra palabra mía, Kieran cruzó las puertas de la escuela y, en ese momento, sonó el timbre. Me encogí ante el sonido.

Antes de que pudiera perder de vista a Kieran, corrí hacia él, sujeto a su cadera mientras la gente comenzaba a salir de sus clases. Kieran envolvió su brazo sobre mis hombros en una postura de protección y fui amable con esta acción. Estas personas se sienten menos intimidantes cuando Kieran está aquí conmigo.

Todos los ojos parecían estar sobre nosotros mientras caminábamos por el pasillo, en dirección a mi viejo casillero. Nunca pensé en siquiera registrarme en esta escuela, pero ahora que estuvimos aquí parece bastante conveniente. Caminar con Kieran es como caminar con un imán, atrayendo cosas, pero en este caso llamó la atención de la gente. La gente ni siquiera ocultaba el hecho de que estaban mirando, simplemente continuaban como si fuera algo normal.

Y fue entonces cuando lo vi, Reagan. Estaba contra su casillero, riéndo con un grupo de otros estudiantes que asumí que eran sus amigos. Es como si su vida se hubiera vuelto aún más glamorosa en mi tiempo de ausencia y eso me puso nervioso. ¿Por qué llegó a vivir una vida tan pacífica después de que él hizo de mí un infierno tan miserable, después de lo que él hizo no solo a mí sino a Kieran? No es justo.

Reagan no parecía mostrar ningún signo de saber que estábamos en esta sala, y mucho menos en la escuela, y eso me hizo feliz. Esto le sorprenderá bastante. Descubrir que no solo estamos vivos y decentemente sanos, sino que él debe temer lo que hagamos. Ni siquiera quería que Kieran fuera quien lo derrotara sin sentido; Quería hacerlo yo, como él me había hecho un millón de veces antes.