Segunda pieza: Bibury.

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Calum, Ashton y Michael estaban bastante comprometidos con la causa de buscar respuestas, pero antes de todo aquello, debían ocuparse de sus obligaciones y responsabilidades. Ninguno sabía con seguridad cuanto tiempo estarían afuera, por tal situación comenzaron a aplazar todos sus compromisos uno por uno y acordar fechas.


Dos meses para todos fue suficiente, pues aunque quizás su investigación sobre Luke pueda durar incluso una semana, la verdad es que ellos necesitaban tiempo para digerir la ausencia la falta de alguien tan querido y tan especial. Quizás sí, estuvieron distanciados y peleados por dos años y en el último se veían con más regularidad y cercanía, pero en todo aquel tiempo sabía que estaba en algún lugar, que estaba vivo y estaba bien, pues aunque Luke se hubiese alejado, Liz Hemmings se había encargado de mantener el contacto con esos tres chicos por los que tenía demasiado cariño.


Entonces, tales dos meses lo tomarían para investigar y luego descansar, recordar, emborracharse en nombre de su amigo Luke y recordarlo como lo merecía, con los buenos momentos, con sus extrañas bromas.


En reorganizar todo, debieron dedicarse una semana. Michael tenía que hablar con su nueva banda, con su manager, cambiar fechas de shows, cancelar otros, acordar sobre entrevistas en las que él no podía estar presente y más. Calum debió reagendar sus horas con diferentes artistas, otros prefirieron cancelarle, además que el moreno debía de ver con quién dejaría a su mejor compañía, Duke. Ashton debió hacer lo mismo, hablar con grandes productores de la industria y cancelar juntas, su asistencia, entre otras cosas. 


Luego de que cada uno de aquellos se preocupó de sus responsabilidades individuales, comenzaron a organizarse entre sí. Compraron los boletos para Londres, además de ver pasajes en tren hasta Bibury, quería de todas formas conocer más de Inglaterra, hicieron la reservación en un hotel del pueblo por un tiempo indefinido.


Una semana se demoraron en posponer sus vidas y estar listos para averiguar la verdadera historia de Luke, así que una mañana soleada en Los Ángeles, tomaron un avión en primera clase para volar a un Londres que los recibió con nubes, con tímidas gotas, como demostrando que en aquel lugar existían muchos secretos que necesitaban ser soplados para despejar mentes, almas y corazones.


...


Del aeropuerto, pagaron una avan por el resto de la tarde, pues habían llegado a las siete en un Londres atardeciendo. En tal vehículo, los tres con sus maletas, requirieron al conductor que los llevara a cualquier joyería de la ciudad y este, con su acento particular, les mencionó que solo existían joyerías de cadenas internacionales en esa ciudad, así que los llevaría a una que quedaba cerca de la estación de trenes. Los chicos aceptaron sin perder tiempo.


El viaje hasta la tienda lo pasaron en silencio, cambiando las tarjetas de contactos de sus teléfonos, por unas con números ingleses, para luego agendarse los unos a los otros y crear un grupo. Era necesario aquello, tener el contacto, redes de internet fuera de los hoteles.


  —Caballeros, hemos llegado—comunicó el conductor, logrando captar la atención de los amigos, quienes agradecieron y comenzaron a descender del vehículo. 


El primero en entrar  la tienda y captar la atención de los vendedores, fue Michael, quien llevaba en su mano el anillo misterio, el anillo que los traía a aquella tienda. Los tres observaron el lujo que tal dependencia exclamaba con sus cristales, sus diamantes y los candelabros que colgaban del techo.

Puzzle. 5 Seconds of Summer.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora