IF NOT WITH ME│YOONTAE。o○.｡o○.

40.- Infierno

"Estoy enamorado de él", es lo que anuncia ChanYeol con ilusión y sonríe de manera tal que sus ojos se iluminan. TaeHyung no entiende en qué momento ChanYeol comenzó a mostrar su verdadero yo, donde la violencia que caracterizaban sus actos y palabras quedaron en el olvido.

— ...y la peor parte de estar enamorado —continúa diciendo—, es verlo en brazos de ese idiota.

TaeHyung lo escucha en silencio, obligado a mantener la calma mientras ChanYeol lo tiene prácticamente aprisionado contra una de las barras del club. Es complejo tenerlo cerca suyo, sentir cómo su mano acaricia una de sus piernas y se acerca lo suficiente para hacerse escuchar por sobre la música. Es complejo porque TaeHyung sabe que están siendo observados en todo momento y, aunque ChanYeol se sincera con respecto a lo que siente por BaekHyun, el resto debe estar malinterpretando lo que realmente ocurre entre ellos.

— Para mí es divertido coquetear contigo —insinúa ChanYeol—, pero me preocupa lo que pueda pensar YoonGi.

— Pensé... que te gustaba hacerlo enojar...

— Hey, no... —sostiene su rostro cuando TaeHyung pretendía bajar la mirada— Lo que menos quiero es que ustedes se peleen por esto.

— ¿Entonces por qué chantajeaste a YoonGi? ¿Por qué me elegiste a mí?

— Porque si estás saliendo YoonGi, imagino que harías cualquier cosa por él. Incluso serías capaz de jamás revelar que se aman con tal de no perjudicarlo, ¿o me equivoco?

ChanYeol está tan cerca de sus labios que TaeHyung lo tiene que detener. De tal modo, para apartarlo le acaricia la mejilla y sonríe, en una perfecta actuación que desde la mesa en que permanecen HoSeok, JiMin, Suho, BaekHyun y YoonGi nada parece hacerlos sospechar.

— No quiero que YoonGi salga lastimado.

— Si confía en ti no tendría por qué salir lastimado —sentencia ChanYeol y luego lo besa en la mejilla— ¿Volvamos?

ChanYeol no espera respuesta, sino que toma las dos botellas de whiskey que fueron a pedir e intenta emprender el camino de regreso a la mesa que comparten con los demás. No obstante, TaeHyung no sabe cómo mirará a YoonGi luego de todo lo que está pasando, por lo que anuncia que antes debe ir al baño y ahí, al ingresar y sentir que la música retumba en las paredes, se aferra al lavamanos en un intento por mantener el control de sus emociones.

En definitiva, ChanYeol los está haciendo pasar por un infierno y cada vez se percibe con mayor énfasis en el modo en que BaekHyun y YoonGi beben una y otra copa como si de agua se tratase. Al contrario, JiMin siente que está en el cielo y parece obnubilado por todo; por estar vestido con costosas ropas, por beber whiskey por primera vez, por las luces del exclusivo lugar en el que se encuentra y que lo marean más de lo que está. Es una suma de estímulos que lo mantienen en medio de la pista bailando a pesar de que sus pies no dan más, pues disfruta con miedo a que jamás se vuelva a sentir así, vivo, al fin sin miradas que lo juzguen y anhelando que a futuro su carrera como bailarín le permita revivir lo que está sintiendo ahora. Frente a él, bailando frente a él, HoSeok sonríe, entregado a la música luego de haber olvidado el miedo paralizante que implicaba estar rodeado de personas ajenas a su mundo. Por ello, se atreve a mirar a ChanYeol y sonríe, convencido de que, si TaeHyung se ve cómodo ante él, entonces no tiene por qué oponerse a que estén juntos, menos cuando en el colegio nadie se ha atrevido a volver a molestar a ChanYeol y a TaeHyung por su aparente noviazgo.

No obstante, muchas veces el infierno le tuerce la mano al cielo y se interpone como le gusta, con escándalo, siempre con escándalo. Por ello, basta una provocación, tan sólo una para que cualquiera de los que se siente en el infierno termine revelando sus sentimientos sin filtro alguno y así, cuando el baile es la excusa para que ChanYeol oculte el rostro en el cuello de TaeHyung, la verdad sale a la luz a través de un grito que se interpone a la algarabía.