Soltó las llaves encima del mueble de su recibidor, frunciendo el ceño al instante. De los pares de zapatillas que siempre habían en aquella entrada, unos seguían en el mismo sitio de siempre: unas negras con líneas violetas y amarillas que estaban mal colocadas en el centro, una pisando sobre la otra. No cabía duda que correspondían a la chica ya que las suyas solían estar por cualquier lado de ese rectángulo, pero nunca juntas; y las de Kirishima estaban ordenadas y colocadas justo para salir y no perder el tiempo.
—No me digas que no has hecho nada desde que me he ido. —Bramó Bakugou desde la puerta al ver los pies de ella asomando por el reposabrazos.
—Es toda tu culpa. —dijo en un quejido, alargando exageradamente las palabras.
— ¿Y Kirishima? —Se apoyó en el marco de la puerta. Ella ni hizo el amago de mover la cabeza para poder mirarle.
—Ahora una persona desconocida se piensa que hablo en un idioma encriptado por tu culpa y sabe que soy lo suficientemente idiota para contestar con un simple "hola" a todas esas preguntas.
Él rodó los ojos, soltando varios insultos que perfectamente ella pudo escuchar. En un par de zancadas, se acercó a Jirou y volvió a arrebatarle el móvil de su mano, la cual colgaba del lateral del sofá vagamente.
A la de cabellos morados no le hacía falta ver a aquel amigo para saber que mueca adornaba su rostro: una de asco inmenso. Este chasqueó la lengua antes de devolverle el móvil o, más bien, tirárselo encima.
—Voy a ducharme. —Concluyó dirigiéndose a las habitaciones.
Jirou no tardó ni un segundo en ponerse de rodillas sobre el sofá, agarrando de la camiseta al chico.
— ¿Me quieres ayudar con el problema en el que me has metido?
—No. Ya lo hará Kirishima.
Dicho eso, el chico se escurrió dejando la camiseta en la mano de ella mientras que él, descamisado, podía ser libre de ir a su bendita ducha, sitio a prueba de dramas en esa casa.
— ¿Cómo que lo hará Kirishima? —Ella sacudió la camiseta de lado a lado, intentando llamar la atención de Bakugou.
—Estoy cansado, me ducharé e iré a dormir.
—Por lo menos cuéntame como te ha ido con Ca-
Escuchó como cerró la puerta de un portazo, sentenciando la conversación y dejando sola de nuevo a Jirou, quién se sentía hasta mal por la habitual reacción del chico.
Tanto Bakugou como Kirishima sabían que su amiga necesitaba compañía. Ya no hablaban de una pareja, hablaban de gente con los mismos gustos que ella que pudieran sacarle de casa, ya que esos no eran ellos dos debido a que entre los estudios de uno, las prácticas para bombero del otro, el gimnasio y sus respectivas parejas, no podían llevarle con ellos sin que se sentiría incómoda.
Las pocas veces que salía de casa eran para ir a una tienda de música, a algún tema de la discográfica de sus padres o a sus clases, donde estaban las dos personas que tenían gustos similares a los de ella, pero también una personalidad difícil de comprender a la primera. Y a la segunda. Y hasta la tercera o cuarta.
A Bakugou le rechinaban siempre los dientes cuando se los encontraba de pura casualidad en su casa para realizar algún trabajo de clase. Esa era una de las única razón por la que se veían fuera de clase y él odiaba que fuera en su hogar. No soportaba ni a Shinsou ni a Todoroki. Les resultaban demasiado complicados y no quería tratar con gente así. Le enfurecía tener que hablar con gente que se cree superior a él o que no comprenden las situaciones que se les presentan, pero sabía que esos dos, fuera de la gente de ese chat, eran parte de la vida de su compañera y una parte que cada vez parecía más imprescindible en sus sueños.
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Conectados; Kamijirou
FanfictionPor culpa de uno de sus compañeros de piso y la novia del otro, Jirou comenzó a hablar con un desconocido que sería la calve para que sus sueños no se quedaran en sólo eso. • Au sin poderes. • Pareja principal: Kamijirou. • Parejas secundarias: Baku...