CAPÍTULO LIX: Somebody else

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 …Somebody else...

                                                                  

                -¡Me gustas mucho Marisol!- Aquella última frase retumbaba en sus oídos – Pero ¿Qué significa esto?– la veterinaria estaba en shock. Veía el avergonzado rostro de Junsu y tímidamente posaba su mirada en la de ella lo que provocaba la coloración completa en el rostro de la fémina.

Marisol automáticamente retira su mano y la esconde en el bolso. Pensaba que aquel fugaz pensamiento eran los despechos de Hyun Ae, pero desgraciadamente eran la verdad, ¿Cómo se supone que debería reaccionar nuestra protagonista?.

 El afamado artista dibuja una dulce sonrisa en su sonrojado rostro al ver la tímida reacción de la veterinaria. Armándose de valor saca la voz de nuevo ante la incómoda situación. 

-          Siento mucho ponerte en aprietos, de todas maneras yo sé cuál es tu respuesta – brindándole una dulce sonrisa a la atónita extranjera.

-          Yo… - tragaba doble al intentar decir algo – No puedo correspondes a tus sentimientos – decía bajando su mirada.

-          No es lo que busco – decía extendiendo su mano – Yo solamente quería decírtelo, ya que para mí es la única forma de despedirme de este hermoso sentimiento – confundiendo a la veterinaria – Deja explicarme, yo sé que amas a Young Bae, pero yo al contarte esto es más que nada para dar vuelta la página y continuar con la linda amistad que tenemos – sonriendo.

Marisol le observar con confusión por unos segundos, intentando comprender aquellas inesperadas palabras. Aceptando tímidamente la mano de su “amigo” le responde con una dulce sonrisa – Yo sé que encontrarás a una chica que te corresponda de la misma forma, y que te haga el hombre más feliz del mundo – decía estrechándole la mano al ser sincero con sus sentimientos. 

-          ¿Por qué no simplemente me dices que soy un idiota, que no soy lo suficiente para ti o algo por el estilo?, así sería más fácil olvidarte – dejando a la veterinaria con el corazón en la boca.

-          ¡No puedo decir eso! Es un alago que sientas eso por mí, pero no eres un idiota y eres un gran hombre de un hermoso corazón, yo sé que encontrarás a la chica de tus sueños – sonriendo gratamente.

-          ¡Marisol! Siempre tan linda hasta en estos momentos – ruborizando automáticamente la veterinaria. 

        Dejándola en estacionamiento le hace señas con su mano despidiéndola, mientras ella doblaba en su Jeep para retomar su rumbo. ¿Su corazón?, destrozado, tenía muy clara cuál iba a ser la respuesta pero el corazón nunca está preparado para escucharla, y menos para aceptarla. Rodando una pequeña lágrima por su mejilla, - ¡Sigamos! Que la vida debe continuar – el objetivo de su confesión era para poder enterrar aquellos sentimientos, sabía que no tenía futuro con ellos y además que no quería perder la bonita amistad que tienen gracias a los pequeños gatubelos. – Eres una chica excepcional, realmente envidio a Young Bae – pensaba mientras subía a su automóvil a continuar con su inolvidable día.

El reloj marcaba las nueve de la noche en punto. BIGBANG ya se encontraba en el país del Sol Naciente y Marisol en las afuera de la casa de la madre de su novio. – Junsu ojalá sigamos siendo amigos – pensaba aun sorprendida por la confesión.

 Bajando del auto, camina hasta la puerta para tocar el timbre de la hermosa casona. Escuchando los ladridos del perro guardián oía acercase unos pasos. -¡Hola! – decía la veterinaria al abrir la puerta la señora Dong. 

I FEEL A LOVE CONNECTIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora