Ha pasado un año desde que los Pevensie volvieran a Inglaterra y Aslan sumiera en un enterno sueño a Aveline pero ¿Cuántos años han pasado en Narnia? ¿Quiénes son los telmarinos? El rencuentro del mayor de los Pevensie con Aveline les deparará otra...
Aviso: Este capítulo contiene lemmon, por lo que será +18, si simplemente no queréis leerlo porque este tipo de cosas no os gustan, no pasa nada, no contiene nada fundamental de la historia y podréis continuar con ella en el capítulo que voy a subir en unos minutos.
Aveline p.o.v
-Unas narnianas te lo trajeron- dice Peter abriendo un ojo y sobresaltándome- no quieren que duermas con un simple vestido.
-Pensé que estabas dormido, me has asustado- sonrío, contagiándole la sonrisa a Peter. Después llevo las manos a mi espalda e intento desatar el cordón, sin éxito, solo hasta que siento unas suevas y cálidas manos sobre las mías.
-Te ayudo- dice Peter desatando cuidadosamente el vestido y cuando termina, hago un pequeño movimiento de hombros, haciendo que el vestido caiga, dejándome solo con un corsé, la ropa interior y las botas puestas- dios santo...
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Me quito las botas bajo la atenta mirada de Peter y después me desato yo sola el corsé, haciendo que el mayor de los Pevensie trague saliva. Después me pongo el camisón y me acuesto en la cama.
-No puedes dejarme así de nuevo- dice Peter muy sonrojado.
-Nos oirían- le digo a Peter, dándome la vuelta así dándole la espalda.
-Podría callarte con mis besos- ronronea Peter, poniéndome boca arriba y sentándose sobre mí.
-He dicho que...- mi frase se ve interrumpida por un gemido salido de mi boca, ocasionado por la mano de Peter, que se encuentra metido en el camisón, justo sobre el sostén- no.
-Será divertido, sé que lo disfrutaste las últimas veces...y de eso hace mucho- Peter susurra en mi oído, presionando su miembro sobre mi intimidad, ocasionando otro gemido por mi parte- eso es un sí.
Peter me quita el camisón, para después quitarse la fina camisa de lino que escondía su perfecto torso, suspiro y acaricio sus abdominales, haciendo que él sonría con sadismo.
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(Nota de la autora: No me pregunteis cómo conseguí esta imagen de Peter porque ni yo misma lo sé xD)
Peter se inclina hacia mí para empezar a besarme desabrochando mi sostén y tirándolo a la otra parte de la habitación. El rubio sigue su rastro de besos hasta mis pechos, los que empieza a masajear y mordisquear, elevando mis gemidos y la temperatura de mi cuerpo. Peter se aparta un momento para quitarse los pantalones y la ropa interior, aprovecho para ponerme sobre él y quitarme yo la ropa interior. Beso a Peter en el cuello, succionando y haciendo movimientos con la cadera hacia delante y hacia atrás, excitando al máximo al mayor de los Pevensie. Peter suelta un gruñido.
-Ugh, no aguanto más- dice Peter agarrando mis caderas y metiendo su miembro en mí intimidad, haciendo que grite de placer.
-Peter- gimo dando pequeños saltos, haciendo gemir a Peter también.
Peter se posiciona sobre mí y yo rodeo sus caderas con mis brazos, el rubio acelera sus embestidas, me muerdo el labio inferior y Peter me besa, haciendo que nuestros gemidos se mezclen entre besos.
Noto el cuerpo de Peter tensarse de repente, soltando unos sonoros gemidos. Al sentir el líquido de Peter en mi interior, llego al clímax súbitamente, clavando mis uñas en su espalda e inundando la habitación con mis gemidos.
Peter sale cuidadosamente de mí, mientras yo intento estabilizar mi respiración. Peter se recuesta a mi lado y me tapa con la manta hecha de pieles. Pego la cabeza sobre el cuerpo de Peter y los dos nos dormimos escuchando todavía nuestras agitadas respiraciones.
(...)
A la mañana siguiente, invoco de nuevo a los grifos y todos los narnianos preparamos el plan de ataque para la noche, este es el principio de esta guerra, que espero que termine pronto.
