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Hola♥  antes de comenzar este capítulo debo dejarles algo claro, este capítulo será un poco diferente a los demás. ¿Por qué?...bien, ya saben como soy yo con lo del drama y todo lo raro😂 así que este capítulo tendrá narración por Lucía y por mí. :)

¿Cómo pueden reconocer?. Diría fácil, pero quiero que así sea, así que... Separaré con estas (-----------....) -en negrilla claro😂- , Aunque sería obvio que se dieran cuenta cuando relata Lucía xdxdxdxd sólo quería aclarar eso♥ si tienen problemas con el capítulo, sólo avísenme. :)

💣

Lo miré una última vez, abrí la puerta y salí corriendo

"Huye, no lo ames".

El amor es tan doloroso...🎵

🔸🔸🔸

No he vuelto a ver a Nicolás.

     Me alivia ello, pero también me preocupa. Y no quiero, no quiero preocuparme por él, no quiero pensar más en él...

     Pero lo hago.

    Quisiera... nunca haber llegado aquí.

    Quisiera no haberlo conocido.

     Es entonces cuando mi celular emite un sonido, por lo cual lo alcanzo, casi cayéndome, y miro la pantalla.

~Llamada entrante~

    ¡Lily! saludo alegremente al contestar.

    —¡Lucía! Dime que ya te estás vistiend-

     Ya estoy casi lista, no te preocupes —Sonreí.

     —Más te vale —Se escuchó su risa y luego aclaró su garganta—. Amiga...

     Ante el cambio repentino de su voz, dejo de moverme y centro mi atención en ella.

    ¿Sí?

    —Nunca pienses que eres el mal tercio, ¿vale? Sabes... sabes que eres mi mejor amiga, y me hace feliz que vengas con nosotros. ¡Así que no lo pienses!

    —No lo pensaré entonces —Miré mis pies aún descalzos—. Me pondré mis zapatos, Lily; así que hago eso y estoy lista.

     —¡Qué buena noticia me has dado! —exclamó—. Te recogeremos en unos quince minutos, ¿está bien?

    —Aw, no creí que se fueran a pasar los semáforos en rojo por mí —Escuché su risa—, pero está bien.

     —Lo que sea por ti, ma-mi-ta.

     Reímos y colgué.

     Me dirigí al lugar en el cual se hallaba el espejo, para prontamente centrar mi vista en... mí; en mis ojos marrones, en mi cabello ondulado, en mi figura, en mi ropa, y en la sonrisa que mantenía en mis labios, incluso cuando sentía que no era del todo real.

Vendida A Un Playboy © | Libro 1&2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora