Good Graces (Kaisoo) - Traducción

Pillowtalk

Kyungsoo se despertó con el sonido de un niño llorando temprano en la mañana. La luz del sol entraba débilmente a través de la cortina transparente que cubría la pequeña ventana en su pequeña habitación en segundo nivel. El joven príncipe se levantó y estiró los brazos, mirando inconscientemente a Jongin, profundamente dormido en la otra cama doble. El cabello castaño del joven se caía suavemente sobre su cabeza y Kyungsoo solo suspiró. Ya era suficientemente malo tener que compartir una habitación, pero tuvo suerte de que no tuvieran que compartir una cama juntos. Preferiría dormir en los establos con Bela.

El llanto lo sacó de sus pensamientos y vacilando se levantó y abrió la puerta. Caminó hacia donde provenía el sonido, los gritos eran cada vez más fuertes y se preguntaba por qué nadie más había acudido en su rescate. Una vez que llegó a la puerta del otro extremo, abrió un poco, vio a una niña pequeña parada en su cuna, con lágrimas en los ojos que goteaban por todo su rostro regordete. La niña de un año también lo vio, y sus gritos se volvieron aún más fuertes cuando levantó las manos para él. Kyungsoo miró alrededor del pasillo, buscando a cualquiera que supiera o pudiera atender al niño, pero cuando no vio a nadie, caminó felizmente hacia ella y la levantó.

Su húmeda mejilla inmediatamente se posó contra su hombro mientras su pequeña mano se curvó en un puño alrededor de su camisa de algodón. Él la hizo callar y le acarició la espalda con dulzura mientras empezaba a tararear una canción de cuna que su niñera le cantaba cuando era bebé. En unos pocos minutos, la niña se había calmado y lo miraba con grandes ojos de gacela. Kyungsoo le sonrió y le dio un leve beso en la cabeza antes de tocarle la mejilla con el dedo índice. Ella le devolvió la sonrisa, revelando cuatro pequeños dientes y volvió a acurrucarse en la calidez de su cuerpo.

"Debe ser el portador en ti" Jongin habló. "Probablemente puede sentirlo." Kyungsoo asintió e ignoró al otro hombre, caminando hacia la puerta para ir a buscar a los padres de la niña.

"¿Cuándo tendrás hijos?" Preguntó Jongin de la nada, una vez que Kyungsoo estaba a su lado. Estaban mirando en direcciones opuestas, pero Kyungsoo giró la cabeza para mirar el perfil de Jongin.

"Nunca", respondió Kyungsoo en voz baja antes de irse escaleras abajo con el bebé.

La posada estaba en silencio mientras Kyungsoo vagaba por el primer piso. Todos los invitados todavía estaban dormidos y los dueños debieron haber estado preparándose para el día. Kyungsoo deambuló buscando a alguien que pudiera reclamar al niño, pero cuando su búsqueda no dio resultados, se conformó con sentarse a la mesa del comedor y jugar con el bebé. Ella era una pequeña angelical que aplaudía cada vez que él sonreía y sus pequeñas risitas angelicales llenaban la habitación mientras el sol continuaba elevándose. Finalmente, una mujer entró corriendo a la habitación y la pequeña dejó escapar un excitado chillido mientras hacía levantaba sus bracitos alegremente.

"Oh, debió haber sido una molestia", exclamó la madre mientras se llevaba a la niña lejos de Kyungsoo. "Muchas gracias por cuidarla. Por lo general, duerme hasta el desayuno, pero últimamente está dentando"

"No hay problema" sonrió Kyungsoo. "Ella se portó muy bien".

"Lamento mucho los inconvenientes" continuó la señora. "Te puedo dar la mitad del costo de la noche si quieres"

"Realmente no es problema" insistió Kyungsoo. "Pero si tiene algo de pan de sobra después del desayuno ..."

"¡Oh, no se diga más!" Respondió la dama. "¡Podemos empacarte lo suficiente como para durar hasta la cena!" Luego regresó a la cocina, con el bebé sobre la cadera, saludando a Kyungsoo con un lindo adiós. Tan pronto como la niña estuvo fuera de la vista, Kyungsoo sintió un doloroso vacío. La mayoría de los portadores de su edad ya estarían embarazadas o incluso tienen un hijo. Kyungsoo esperaba que la futura esposa de Taewoon lo dejara jugar con los pequeños herederos de vez en cuando.