Yo era una chica normal, con una vida normal hasta que todo ocurrió.
Tenía mi grupo de amigas, Mara, era muy inteligente y le encantaba hacer experimentos, Black, estaba obsesionada con los gatos y hasta se vestía como uno de ellos y luego estoy yo, Sonia, que lo único que se hacer es dormir, ver películas de miedo y de zombies, comer chufi chufis y escuchar k-pop.
— Sonia, tu amiga la lista esta abajo — Me avisó mi hermano Manolo. Rodé los ojos y bajé al salón para encontrarme con Mara.
— Black y yo vamos a espiar a su vecino, ¿te vienes? — Me preguntó riendo.
— Si, pero antes voy a por unos chufi chufis y ya de paso me cambio, no voy a ir con mi pijama — Reí y subí las escaleras, me puse unas mayas y una camiseta que ponía "te jodes y bailas" y salí de casa junto a Mara. Llegamos pronto a la casa de Black ya que era bastante cercana a la mía. Ella nos abrió al momento y corrimos hacia su habitación, Black tenia un vecino nuevo, muy guapo según Mara, y siempre lo espiabamos por ella.
— ¿Volveis a espiar al vecino? Se va a enterar, y dejad la cámara dais mal rollo — Rodé los ojos al escuchar a Angel el hermano de Black.
— Eres un Waterpartie — Dije y el comenzó a reír.
— Sonia, mira, esta andando — Mara realmente parecía una imbécil cuando estaba enamorada.
— Si quieres se va a arrastrar como las serpientes — Reí apoyándome en la ventana.
— Agachate, que te va a ver — Mara no dejaba de tirar de la manga de mi camiseta.
— Eh, tu mozo, ¿como te llamas? — Le pregunté, sus ojos mieles se posaron en mi. — Si, te digo a ti —
— Soy Carlos — Sonrió y Mara se acostó en el suelo pidiendo agua y aire.
— ¿Quieres venir a jugar? — Le pregunté y Angel no dejaba de reír por la reacción de Mara.
— Vale — El timbre sonó y baje a abrirle. — ¿Como te llamas? —
— Sonia — Dije mientras entraba a la habitación de Black. Estuve fastidiando un poco a Mara pero ella no quería hablar ni nada. Cuando Carlos se fue empezó a pegarme.
— Eres imbécil — Lloraba mientras me daba con el cinturón.
— Pero si es un tio normal. No se que le ves — Reí.
— Pero, pero, es alto, su pelo castaño es hermoso, sus ojos marrones miel son tan profundos como...
— Como el amor que Sonia siente hacia los chufi chufis — Intervino Angel y Mara lo ignoró.
— Y su sonrisa, es tan bonita que enamora— Finalizó mi amiga y salí corriendo antes de que me pegara. Volví a casa y me acosté, vi todos los mensajes que mi mejor amigo Tono me había enviado y los ignoré. Comencé a dar vueltas en la cama hasta que decidí comprar mas chufi chufis, ya que me los había dejado en casa de Black.
Fuí a la tienda y me encontré a Mara. Cuando no quería verla la veía, no quería que me volviera a pegar a si que recé por que no me viera y comencé a retroceder.
— Sonia — Me acerqué a ella y llevaba una bolsa de chufi chufis. — Iba a ser una sorpresa, pero te enselaré lo que he estado haciendo — Rió malevolamente cogiendo mi muñeca y llevándome hacia su casa.
— ¿Has hecho un collage de fotos sobre Carlos? — Ella me pegó con una revista que pilló y me llevó a su sótano. — ¿No me irás a violar? —
— Mira que eres imbécil — Reí ante su comentario y ví su enorme laboratorio. — He creado algo para darle vida a los chufi chufis, obviamente también se harán mas grandes — Ella cogió y cachumbo de los suyos y hechó unas gotas sobre un chufi chufi, este se volvió mas gigante, le salieron boca, ojos, manos y pies. Me asusté y me escondí tras Mara.
— Es bueno, no hace nada —Me informó. Pero no lo parecía, no dejaba de destruir cosas hasta que se giró hacia nosotras. Se acercó y abrió la boca por lo que sin querer le pegué e hice que el cachumbo de Mara se esparciera sobre los demás chufi chufis que Mara había comprado. Salimos corriendo de allí y los encerramos en el sótano pero consiguieron salir.
