Estréname /Yoonmin (Omegaverse)

Soy un problema

Jimin se encontraba en uno de sus usuales trances al escribir, donde solo era él, tecleando agresivamente cada botón de la máquina, creando una melodía que Jungkook odio los primeros días, pero que con el tiempo, se acostumbró identificando que mientras más rápido y ruidoso escribiera, más animado estaba el Omega. El Hámster paró abruptamente, releyendo lo que ya llevaba, la idea estaba organizada en su cabeza, ahora el reto era tratar de plasmarla, cuidando cada detalle, de la personalidad e interacción de sus personajes, como del escenario, todo debía ser perfecto.

Un poco frustrado saco la hoja que apenas había llenado hasta la mitad, porque no estaba contento con el rumbo que estaba tomando la trama, ahora que lo leía en conjunto con lo demás, parecía que la idea original se había perdido, que los nuevos personajes no aportaban al progreso ni del personaje principal ni de la narración. Bufo, descartando todas las hojas, no le gustaba releer lo que ya había escrito, porque siempre encontraría errores, vería fallos o huecos y querría rehacer toda la obra otra vez. Odiaba ser tan inseguro, ponía mucho de sí mismo al publicar algo, ¿Cómo le gustaría a otras personas cuando no terminaba de gustarte a ti mismo?

-¿Estas triste? ¿Te está molestando otra pesadilla?- El cachorro interrumpió la auto-tortura a la que se sometía el escritor.

-Algo así- Acepto cabizbajo al mismo tiempo que Jungkook escalaba con maestría, hasta posicionarse en su regazo, propinándole un fuerte abrazo. Tal vez Jimin nunca se acostumbraría al contacto tan repentino de los Lobos, lo dejaba paralizado una buena cantidad de segundos, hasta que lograba reaccionar y devolver como podía, el gesto.

-¿Esta de que trata?- Pregunto la dulce voz del cachorro, era extraño como un niño podía escuchar todo tan atentamente y ser tan adorable en su forma de ayudar, de verdad se preocupaba por la salud del roedor, tratando de protegerlo como todo un Alfa valeroso, el Omega se arrepentía tanto por haberle dicho cosas tan desagradables al principio.

-No lo sé con exactitud- ¿Cómo se lo explicaba a un pequeño de 6 años? Que le gustaba escribir, lo relajaba, es más era lo único en lo que sentía que lo hacía bien, pero habían veces, que algo no le cuadraban a la hora de relatar una situación o trasmitir un mensaje. A veces su cabeza le decía que era malo en lo que hacía, donde resaltaba sus tramas estúpidas y repetitivas, que los personajes eran planos y aburridos, que nadie lo leería. Una vez Jenny le aconsejo que escribiera para sí mismo pero era imposible y... difícil, porque por medio de las letras era el medio donde se liberaba, allí sus sentimientos y pensamientos tomaba forma, era su talento o eso quería creer -Es como cuando dibujas, quieres mostrárselo a todo el mundo, eso te hace sentirte bien contigo mismo y tal vez valorado pero en mi caso sin importar cuando me digan que mi dibujo es bonito y les gusta, me siento de otro modo, como si no fuera lo suficiente, como si todo lo que tratara de enseñar, fuera un error, es como una voz que nunca deja de recordarme mis errores.

-No se oye como una pesadilla- El cachorro le costaba un poco entenderlo, si a él le decían que su dibujo era bonito, lo creía, tal vez porque no tenía esa voz de la que hablaba el Hámster -¿Por qué no la ignoras o le dices que se calle? Papá hace eso cuando no quiere oír a los demás, no pedí tu opinión o cuando mamá le decía que hacer, él le respondía que cuando quisiera que las cosas salieran mal, le pediría consejos, que por el momento, él siempre sabía qué hacer y cómo actuar, no necesitaba una voz molesta quejándose detrás de él, ¿Es como lo que te pasa a ti?- Aunque sabía que el lobezno lo decía de forma inocente, no podía no temerlo un poco al Alfa, siempre le pareció bastante frío, cruel y directo, claro y ahora sabía que era bastante prepotente, entonces por qué era tan distinto a la imagen hogareña que presentaba a diario.