Capítulo 7 -•- En problemas

424 55 10
                                    

         Mi padre se quedó así hasta que pudiera calmarme, me quedaría más tiempo si el timbre no hubiera sonado, fue entonces cuando nos separamos porque mi padre fue a abrir, en lo que bajo yo me levante y limpie mi rostro con el dorso de mi mano para quitar las pocas gotas que quedaban, sorbí mi nariz y comencé a recoger las cosas que había tirado en mi momentánea de descontrol.

        Suspire poniendo una fotografía en un portarretrato donde estábamos Michael y yo, el cristal se había estrellado, algunos trozos se cayeron cuando lo levanté dejando a la fotografía expuesta. La foto es de algunos años, en una fiesta de cumpleaños de Michael, cumplía nueve años y ambos sonreímos arriba de la mesa, nos en con grabamos ahí para destapar los regalos.

        Frunci el ceño y miré hacia la puerta.

        —¿Qué mierda paso aquí?.

        —No te importa, largate.

        Quiero arreglar las cosas con Michael y todo eso... Pero no ahora que cuando lo veo me dan ganas de asesinarlo y no estoy bromeando y si no se va dudo que pueda controlarme, aprieto mis puños conteniendo la ira que vuelve a salir al verlo como si nada ahí parado.

          —Caroline... —Sé que está arrepentido, puedo verlo en su rostro pero en estos momentos no me importará eso para poder contenerme.

         —Vete. —Lo hago por su bien, no por el mío, Michael es demasiado importante en mi vida como para lastimarlo.

         —Lo siento... —Está siendo sincero pero aún así me está sacando de quicio con tanto sólo escuchar su voz.

         No podría perdonarme si le llego a hacer algo.

         —¡Que te vayas!. —Michael agachó la mirada y dejo pegada a la pared mi mochila, me miró de nuevo y comenzó a acercarse...

         —Caroline por favor... —suplicó.

        «Merece sufrir por lo que hizo» —fue como si mi conciencia mala hablara.

        Retrocedí por miedo a herirlo, pero él no se detuvo... Al igual que esa extraña consciencia.

         «No tengas piedad, no la merece» —Ahí está de nuevo.

         Respire con pesadez.

         —Michael que te vayas.

         —Quiero arreglar las cosas...
  
         —No lo voy a repetir una vez más... Ahora haz lo que te dije —le amenace entre dientes, si vuelve a abrir la boca soy capaz de lanzarlo por la ventana.

         Y como Michael y yo vamos contra las amenazas, siguió acercándose y decidió hablar:

         —Quiero arreglar las cosas Caroline... —Intento tomar mis manos.

         Apenas las rozo y yo no pude contenerme, como si fuera ahora yo un volcán que hizo erupción, lo tome por el cuello con una de mis manos y lo estampe contra la pared, sorprendido por mi reacción trató de hablar pero de lo fuerte que aprieto su cuello no lo puede hacer.

        No es suficiente dolor para él... Y no lo será hasta que lo haga pagar.

        Es su culpa no debió meterse conmigo.

        Uso mi otra mano para apretar aún más, Michael intenta quitarme las manos pero no puede.

         Aprieto más con la satisfacción que me da ver su rostro tornarse de otro color, lo estoy matando y no quiero parar hasta que su corazón no de ni un solo latido.

El bosque ll •Transformación•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora