Ben
Me hubiese encantado decir que luego de ingresar la solicitud, el proceso fue rápido, pero no fue así.
Pasaron varias semanas en las que no obtuvimos una sola respuesta, ni una sola llamada, nada, absolutamente nada y comenzaba a creer, que nunca sucedería.
Sabía que Caroline comenzaba a pensar lo mismo, aunque quisiera disimularlo, su ánimo había decaído. Y yo no podía dejar de pensar en que, si nuestra solicitud era rechazada, la desilusión que pasaríamos no sería otra cosa que mi culpa.
Levanto la vista del celular en cuanto escucho la puerta abrirse, Connor, uno de mis mejores abogados y amigo, aparece frente a mí con su habitual sonrisa y buen humor.
No entendía como era capaz de conseguir aquello.
—Oh, parece que hoy no es un buen día —murmura mientras toma asiento frente a mí. Desliza uno de los vasos de café a través de la mesa y me observa con una pequeña sonrisa.
—Es medio día ¿y traes café? —cuestiono extendiendo una de mis manos para poder tomar el vaso.
—Nunca se le dice que no a un poco de café —dice encogiéndose de hombros —Ahora ¿por qué no me dices el motivo de tu mal humor? —inquiere.
Dejo de mirarlo para centrar de nuevo mi atención en el celular.
—Ignorarme no va a hacer que deje de insistir —dice mientras me arrebata el celular de las manos. —. ¿Qué ocurre contigo?
Tomo una profunda inhalación antes de atreverme a hablar. Connor Miller era lo más cercano que tenía a un amigo, estaba conmigo en cualquier momento, y me ofrecía su ayuda en cada oportunidad.
Teníamos poco más de un año de conocernos, pero lo cierto era que ya lo consideraba como un amigo de toda la vida.
—No nos han llamado de la oficina de adopción —murmuro con una mueca —y comienzo a creer que no van a hacerlo.
Él parece comprender.
—¿Hay algo en lo que pueda ayudar? —pregunta.
Niego.
—Por ahora intento no perder las esperanzas, pero a este paso, comienzan a agotarse todas mis ilusiones. Es decir, en el fondo esperaba que fuese rápido, somos un matrimonio estable, tenemos una economía más que buena para ofrecer estabilidad, no entiendo que ha ocurrido.
—Como abogado puedo decirte que no son los únicos elementos que se evalúan en una solicitud de adopción, más aún si el matrimonio no cuenta con hijos. Es tardado Ben, pero eso no quiere decir que no vayan a darles la oportunidad.
—Quiero creer que vamos a conseguirlo —murmuro en un suspiro. —en serio quiero hacerlo.
Mi amigo sonríe.
—Verás que si —asegura —no tienes que preocuparte de nada, tarde o temprano llamarán, no pierdas la esperanza.
Asiento, intentando creer en sus palabras, intentando por todos los medios que la última chispa de esperanza, no se consumiera dentro de mí.
(...)
Cuando llego a casa después del trabajo, el olor a galletas llega hasta mí. Distingo la voz de Caroline, cantando alguna canción que no logro reconocer.
—Hola —saludo cuando me encuentro en la puerta de la cocina. Ella se gira, me recibe con una sonrisa antes de caminar hacia donde me encuentro.
—Hola ¿qué tal el trabajo? —cuestiona plantando un rápido beso en mis labios. Luego me da la espalda y se concentra de nuevo en la estufa.
—Bien, demasiado trabajo, como siempre —respondo, ella me mira sobre su hombro.

ESTÁS LEYENDO
Lo que más deseo.
ChickLitSer madre es probablemente el sueño de toda mujer. Desgraciadamente no a todas les toca cumplir dicho sueño. Caroline es una mujer independiente, bondadosa y con un ferviente deseo de ser madre. Junto a Ben, su esposo lo han intentado innumerables...