Camille Casablancas es obligada a asistir a Berkley, internado para gente talentosa, mayormente poblada por hijos de celebridades en Canberra, Australia.
Conoce al hijo del enemigo universal de su padre, Kaidan Jaxx, sinónimo de "hijo de puta". Com...
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Son cerca de las seis y los padres comienzan a llegar. Luego de mi plática con Kaidan, he decidido venir a mi habitación para ponerme mi ropa.
Inna deja de verse en el espejo y acomoda su cabello en una cola de caballo para sentarse a mi lado, en el largo sofá cerca de la ventana. Usa un pantalón negro bastante pegado y una camisa rosada que se parece al estilo del uniforme. Cuando veo sus pies, llego a la fácil conclusión que es una chica de tacones.
—Mamá vendrá —dice, pero por su mirada, lo hace más a sí misma—. Mamá vendrá y me echará en cara que ya no administrare la empresa.
Paris sale del baño con su cepillo de dientes en su boca, rodeada de espuma entre blanca y azul.
—Mi papá está en prisión, chica reloj —sonríe de una manera que me entristece, forzada.
Reegan deja de girar en la silla al lado del escritorio, suspirando.
—Mis padres están algo ocupados como para venir —suspira—. Así que solo Camille e Inna tendrán visitas.
—Mi padre tiene problemas con su vista así que es probable que solo mis tíos vengan a verme a mi y a Chris.
Las tres cabezas me voltean a ver en movimientos bruscos. Me toma un momento darme cuenta que la he cagado y que se viene una muy buena cantidad de preguntas.
—¿Por qué vendrían a ver a Chris, Camille? —pregunta Paris, señalándome con su cepillo.
La miro en busca de una rápida excusa en mi cabeza pero es tarde. Ella corre hasta su gaveta al lado del sofá, saca su plancha y la conecta para apuntarme con ella. Quiero reírme porque todavía tiene espuma en sus mejillas y mandíbula.
—Camille Casablancas, te he hecho una pregunta y no la has contestado. Para que veas que hay algo de educación en este cuerpo delgado, te daré otra oportunidad. ¿Por qué vendrían a ver a la peste con patas?
—Me estas apuntando a la cara con una plancha para el cabello, no pienso responderte así —furiosa, se pone encima de mi y la acerca aún más. Trato de quitársela de encima pero tengo miedo de lastimarla—. Paris Cohen, quita eso lejos de mi jodida cara, hablo en serio.
—¡Sólo debes responder! ¡Ocultas algo!
—¡Y tú me amenazas con quemarme la cara!
—Son hermanos —se levanta Reegan, sosteniendo su teléfono en el aire. Inna se levanta de su puesto y camina hasta ella para verla—. Eso es lo que dice Wikipedia.
Ah, aquí, normal, toda mi historia de vida en Internet.
Paris deja de ver a Reegan para verme en un movimiento exorcista que hace parecer que su cuello se rompe. La miro asustada, en especial cuando sonríe. Entonces, deja caer la plancha en mi pierna. No tardo nada en reaccionar, moviendo mi pierna haciendo que el arma mortal caiga al suelo terminando en dos pedazos.
