(Temporada 2) Capítulo 9.

7.4K 273 8
                                    

Segunda semana santa en Sevilla (IV)

Mis amigas y yo nos miramos, interrogantes. ¿Qué ha dicho? 

-¿Quién? -Repito al teléfono- ¡Diana!

Y no dejamos de oír los gritos de su madre. "Diana, por favor, deja el teléfono, no puedes decirles eso, dejame el teléfono y haz las maletas, estate tranquila, por favor" "¡Diana!" "¡Diana suelta el teléfono!" 

Y un sonido de un lado al otro. Juraría que Diana y su madre están forcejeando por el móvil. 

-¿Chicas? -Pregunta Diana, con voz más clara unos segundos más tarde.

-¡Estamos aquí! ¿Quién ha sido? 

-El policía le dijo a mi madre que fueron dos chicas de nuestra edad, del barrio, que nos vieron pasar por delante de la casa de una de ellas y que al día siguiente a primera hora fueron a la comisaría.

-Dos chicas... -Repito, aliviada. -¡Dos chicas! -Digo de nuevo, mirando a mis amigas abriendo mucho los ojos. 

-Escuchadme- Suelta Diana de corrido- Tenía que deciroslo y... Tengo que marcharme... ¡Mamá, dejame despedirme, porfavor! En cuanto llegue a estados unidos intentaré conseguir solucionar ya para tener otro móvil y poder hablar con vosotras... Os voy a echar mucho de menos. ¡Despedios de las demás por mi! ¡Os quiero muchísimo! Ya está ¿Ves? 

Y siento como le tiende el teléfono a su madre.

Dos chicas. Después de la despedida y de que todas parezcamos más tranquilas, reflexionamos. 

-Dos chicas.

-Que nos odien lo suficiente como para hacer algo tan serio... 

-Hay que ser retorcidas.

Suspiro. Y pienso. Retorcidas. ¿Quién puede querer hacernos tantísimo daño? ¡Al final no ha sido para tanto, pero podiamos haber acabado en el calabozo! No llegamos a ninguna conclusión.

Invito a Elena a comer conmigo, y nos separamos de Sandra y Laura aunque aún es temprano para volver. No nos apetece estar separadas. Ni tampoco seguir en el parque discutiendo algo sobre lo que no tenemos ni idea. Y teniendo en cuenta que ni Dani ni de Jesús se han dignado a hablarnos... Las dos caminamos cabizbajas y de mal humor por la acera cuando se hace la luz. Se hace la luz porque las veo. Las veo sentadas en el banco que hay enfrente de mi casa con una sonrisa de satisfacción, restregandonos lo bien que les ha salido la jugada. Abro mucho los ojos y le tiro del brazo a Elena. Carla y Fanny. Casi puedo oír el "Clic" en mi cabeza cuando encajan todas las piezas. 

Han sido Carla y Fanny. Han sido ellas. Han delatado a Diana y han provocado de paso una discusión por partida doble. Serán... 

La cara de Elena podría ser el espejo de todos mis pensamientos.

-¡Serán hijas de puta...! -Exclama mi amiga entre susurros. -Llevaban demasiado tiempo sin hacernos algo. Está claro. ¿Cómo no nos hemos dado cuenta?

-Somos tontas- Admito yo, ladeando la cabeza- ¿Cómo no se nos ha ocurrido?

Nos miramos un instante y en seguida nos plantamos delante de ellas.

-Anda, mira, Fanny, el roto y el descosido- Sonríe Carla con suficiencia- Justo os estabamos esperando. ¿Qué tal está vuestra amiga? ¿Cuánto habeis pedido de rescate?

-Repite eso- Jesús y Daniel(Gemelier) PARTE DOS.Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang