15. BYBEE

144K 11.3K 1.8K
                                    

15ÁLBUM: Pick Up CANCIÓN: True to myself - Ziggy Marley

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

15
ÁLBUM: Pick Up
CANCIÓN: True to myself - Ziggy Marley

           

En todo el día no pude centrarme en ni una sola clase. La preocupación por el dinero me tenía mordisqueando todas y cada una de las uñas.

Nunca antes me había preocupado tanto por encontrar una forma de mantenerme, sobre todo porque antes vivía en el campus, luego fui a vivir con Mike. Y obviamente no podía quedarme a vivir de enchufada con las chicas. Por muy amigas que fuéramos Eve y yo no podía ser una carga para ellas más que unos días.

Eso lo tenía más claro que el agua.

Después de clase, caminé dos manzanas hasta el metro. No quería coger el coche y pagar dos tickets de parking, eso sería el doble de caro que dejar el coche allí un día más.

Al ser hora punta, el metro estaba a rebosar, me sentía más apretujada que una sardina enlatada. Apenas podía moverme.
Me quedan exactamente treinta y cinco pavos, no es que eso fuera a dar para más de un par de días, debía ponerme manos a la obra y vender mi coche.

Podía perfectamente vivir yendo de metro de un lado a otro, aunque tenía la leve corazonada de que a mí padre eso no le iba gustar nada.
Bueno, era eso o vivir bajo un puente o en el mismísimo coche y ninguna de esas ideas me resultaba atractiva.

Cuando llegué al departamento de las chicas solo encontré a Katz. Al recibirme sonrió y se fue hacia la cocina.
Dejé un par de libros y el bolso en el suelo al lado del sofá y la seguí.

De la cocina emanaba un agradable olor a queso Cheddar.

— ¿Qué estás preparando? —pregunté asomándome y sentándome en una de las sillas del comedor minimalista. Las chicas aprovechaban hasta el rinconcito más recóndito, sabían administrar bien el espacio del que disponían. No podía considerar que el piso fuera enorme pero tampoco llegaba a ser tan pequeño como para que te asfixiaras.

—Macarrones con queso.

—Huele de maravilla —halagué babeando. Tenía un hambre brutal.

Oí a Katz reírse a lo bajini.

—¿Has podido encontrar algo de trabajo en el periódico?

La misma Katz me dio la idea de mirarlo ya que mi teléfono había muerto y no podía bajarme ninguna app de empleo. Definitivamente había dejado de funcionar. El golpe del accidente había acabado con el pobre. Debí memorizar mi agenda cuando pude porque solo entonces me di cuenta de que no sabía el número de nadie conocido. Apenas sabía el mío, y eso ya era bastante, creedme.

No he encontrado nada que encajara con lo que estoy buscando— confesé apoyando el codo sobre la mesa y la mejilla en mi mano sintiéndome devastada —. A este paso voy a tener que vender mi coche para sobrevivir hasta los exámenes finales.

Dejó de remover la olla y me miró con los ojos abiertos de par en par.
Eso me asustó.
Sus increíbles ojos azules parecían a los de un gato al ver un ovillo de lana.

 Sus increíbles ojos azules parecían a los de un gato al ver un ovillo de lana

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—¿Qué clase de coche?

—¿Uno con cuatro ruedas? —pregunté encogiéndome de hombros.
Siento el sarcasmo, pero... ¿Quién diantres pregunta qué clase de coche? Pues uno de cuatro ruedas, leñe.

—Serás mema, hablo de la marca.

Ella puso los ojos en blanco, una expresión muy habitual en ella y luego suspiró poniendo los brazos en jarra.

—Un pick up.

— ¡Ah! — exclamó ella abriendo tanto la boca como los ojos.

— ¿Y en qué estado está?

—Pues, tiene más años que yo pero funciona perfectamente, en verano mi padre le dio un repaso... ¿Por qué?

Ella volvió a poner los ojos en blanco y luego empezó a remover la salsa de queso cheddar, nuevamente.

—Estoy pensando en comprarme un coche...

—¡Cómpramelo! Te lo ruego, haz una buena obra por una amiga y cómpramelo.

—¡Cómpramelo! Te lo ruego, haz una buena obra por una amiga y cómpramelo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ella se volteó riéndose y suspiró.

—Necesito mirar primero el coche, y dar una vuelta con él, claramente.

Okaaaaay.

Volvió a centrarse en lo suyo, echó los macarrones en la salsa y se dedicó a remover.

¿Sería Katz la nueva compradora?

Oh, cielos. Estoy desesperada. ¡Señor, ayúdame!

Sirvió dos platos llenos de macarrones y se sentó en la mesa, colocando un plato delante mío.

— Te doy doce mil, ni un céntimo más—anunció ella llevándose un tenedor lleno de macarrones con queso a la boca.

Abrí la boca de par en par.

¿Doce mil? Yo pensaba pedir dos mil, pero eso era perfecto. Más que perfecto, era brillante.

—  ¡Perfecto!—chillé como una niña emocionada con ir a Disneyland.

Hasta lunes bombones❤️

ACCIDENTALMENTE TUYA © 1º PARTEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora