hado: (s. m.) Fuerza sobrenatural que influye y decide sobre los sucesos y las vidas de las personas
advertencias: mención de asesinatos, sangre, violencia. inicios de smut girlxgirl
La sangre tiñó el blanco lavabo del baño de gasolinera de un rojo macabro. El agua se deslizaba por la llave, mezclándose poco a poco, minimizando la tinta roja hasta que agua clara se deslavaba por sus manos.
Jane cerró la llave del agua, y dándose una última mirada al espejo asegurándose de que el papel sanitario manchado de sangre hubiera bajado por la taza del baño, salió del sanitario.
Nadie volteó a verla. Nadie sospechaba. ¿Quién lo haría, en realidad? Jane apenas alcanzaba el metro sesenta de altura y tenía una sonrisa adorable. Provocaba ternura. Jane lo odiaba. Pero había aprendido a aprovechar lo que más odiaba hasta convertirlo en su mejor arma.
Jane encendió su auto, disfrutando del sonido del motor característico de un coche nuevo. Lo había robado hacia un par de ciudades, y le dolía realmente pensar que tendría que dejarlo en algún punto, abandonándolo por completo. No era solamente que el automóvil fuera más rápido que uno común, lo cual era necesario cuando se trataba de huir; sino que era la carnada perfecta para sus víctimas, atrayéndolas como moscas a la miel.
Ella no despreciaba a nadie, ni tenía preferencias. Cualquiera podía ser un blanco.
Una chica, saliendo del departamento de un extraño al amanecer.
Un adulto cuarentón promedio, saliendo de un bar de mala muerte.
Una ama de casa, escabulléndose de un motel barato después de pasar una noche con su amante.
Un adolescente con las hormonas alborotadas, que se dejaba guiar por una chica bonita en un coche bonito.
No le importaba realmente. Todos servían para lo mismo. Todos le producían esa euforia que ninguna droga podría igualar. Esa energía al tener el control de su vida o muerte. Sus ojos desesperados, los llantos suplicando ayuda, sus intentos por salvar su vida.
Era glorioso.
Jane conducía sin rumbo alguno, viajando de ciudad en ciudad, de pueblo en pueblo sin dejar ningún rastro ni impresión en nadie. No dejaba nada atrás, más que un montón de cadáveres y asesinatos sin resolver. Los policías lo intentarían un rato, pero sería inútil al Jane estar a kilómetros de distancia. Siempre era inútil.
A veces, Jane acechaba a las víctimas. Las observaba. Analizaba sus siguientes movimientos y las seguía. Esa era su parte favorita. Observar cómo vivían su vida normal, sin preocupaciones, sin saber que Jane llegaría de la nada con una sonrisa amable y les arrebataría todo.
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WRITER IN THE DARK /historias cortas.
Randomhistorias cortas, de todo tipo. prácticamente todo lo que no es fanfic lo subo aquí.