Capítulo Sesenta y Cuatro

772K 53.2K 105K
                                    


CAPÍTULO SESENTA Y CUATRO



25 de abril, 2012.

Harry esta sobre mí, entre mis piernas. Ambos desnudos.

Sus labios están entretenidos con mi sensible y algo crecido pecho izquierdo mientras su otra mano le da atención a mi pecho libre. Mis gemidos, quejas y susurros se escuchan por la habitación. Es una suerte que mamá hace siete días volviera a Liverpool, de lo contrario hubiese sido muy vergonzoso el que me escuchara ser tan ruidosa, porque simplemente mis hormonas me enloquecen y me convierten en una mujer ruidosa.

Enredo mis dedos en su cabello mientras me retuerzo bajo su cuerpo que procura no aplastar ni lastimar mi vientre.

En algún momento, después de tener un alucinante orgasmo, sólo con el tacto de su boca en diversos lugares de mi cuerpo yo me encuentro sobre él mientras hacemos el amor.

Harry y yo podría decirse que no hemos perdido tiempo, en todo caso, hemos estado recuperándolo. En cada ocasión que podemos, en cada lugar que se permita y siempre y cuando mi cuerpo me lo permita.

Me muevo sobre él mientras nos besamos, esta sin duda es una excelente forma de despertar, una de mis favoritas.

Estoy concentrada en nosotros haciendo el amor y nuestras bocas saqueándose una a la otra, en sus manos en mis caderas guiándome en suaves asensos y descensos sobre su masculinidad, pero entonces dejo de moverme mientras, sin poder evitarlo, comienzo a reír tomándolo por sorpresa.

—¿Qué sucede?

—¿No lo sientes? —pregunto, tomando una de sus manos de mis caderas y guiándolas a la parte más baja de mi vientre—. Se está moviendo, y así me es imposible no reírme, además de que creo que mis pechos están muy pesados, creo que estoy a instantes de...

No termino de hablar cuando mis sospechas se hacen ciertas y lactancia materna muy clara y liquida sale de mi pecho izquierdo sobre el pecho de Harry, no lo puedo evitar, realmente comienzo a reír ante el desconcierto de Harry.

—Lo siento, que asco Harry, lo siento —digo, cubriendo mis senos con mis manos pero sin dejar de reír, es como si él no terminara de entender qué es exactamente lo que sucede.

Mis manos se sienten húmedas ante la lactancia que sale de mis pezones, aunque ahora es como agua de un claro color blanco, con el tiempo se volverá la adecuada y el que esté sobre el pecho de Harry es algo que me resulta extraño, es una situación bastante peculiar.

—¿Esto que tengo sobre mi pecho es tu leche? —me pregunta lentamente.

—Sí, es lo que es.

—¿Y porque sale tan caliente? Es como si hubiese estado en un microondas...

—No lo sé —cubro con una mano mi boca para dejar de reír.

—Bueno, entonces lo que acaba de pasar es que mientras hacíamos el amor, bebé en camino decidió moverse, hacerte reír y luego tu pecho "explotó" —hace las comillas con sus dedos— en mi pecho. Y entonces de alguna manera bastante peculiar yo tengo mi pecho lleno de lactancia materna, ¿correcto?

—Correcto.

Harry me ve con fijeza, pero luego él realmente comienza a reír, y como aún se encuentra dentro de mí, el movimiento de su risa hace que gima un poco, él me mira con diversión.

—Qué experiencia y anécdota más loca nos dejará esto —murmura, besando mi cuello con cariño—. ¿Continuamos esto en el baño? Así puedo limpiar mi pecho y no correr el riego de ser bombeado por tus hermosos pechos.

H de Harry (BG.5 libro #1) Disponible en Librerías.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora