O calla para siempre

4.5K 358 941
                                    

—Te amaré por siempre –le prometía él mientras tomaba su mano.

—Chat Noir, no insistas, sabes que nunca pasará –le aseguró Ladybug.

Han pasado diez años desde entonces. Diez años de tantos cambios, caídas, combates, rechazos; y después de tanto tiempo que parecía que las promesas nunca se romperían llegaron a su cruel fin.

Hacía un par de meses que Ladybug notaba a su compañero distante, era verdad que agradecía que ya no le coqueteara, le llevara flores o dijera sus tontas frases de ligue, aunque creía que algo en él había cambiado. Su amistad había cambiado.

Hubiera jurado que eso jamás le hubiera afectado pero la soledad comenzaba a resentirse en su corazón; no tenía mucho que Adrien Agreste tenía una relación con Lila Rossi, una ex compañera suya de la preparatoria, y a pesar de que ellos aún se trataban e incluso en algún momento de su vida fueron mejores amigos, la verdad era que nunca pasó más de un "te quiero" o miradas nerviosas. Con el tiempo Marinette supo sobrellevarlo y aceptarlo, nunca sería suficiente para aquél chico, aunque en realidad, él creía que nunca sería suficiente para la mujer que le profesó amor eterno tantos años.

—Entonces nos vemos a la próxima, Ladybug –anunciaba el gato de la noche mientras preparaba su bastón para salir huyendo antes de que su transformación llegara.

—¡Espera, Chat Noir! –le pidió la moteada mientras se acercaba con cierto recelo, lo que sentía en su interior estaba a punto de hacerla explotar, pedía por saber qué ocurría con su compañero, con su mayor confidente.

—¿Qué ocurre? –preguntó algo desinteresado desviando la mirada.

Ella apretó sus labios y lo dudo por un momento, algo la hacía sentirse mal por el interior, parecido a tener su corazón roto en miles de pedazos que no sabría cómo unir de nuevo, pero no sabía explicar cómo o porqué. Tal vez, al final de cuentas, él era más importante de lo que hubiera pensado.

—Quisiera saber qué ocurre entre nosotros, Chat Noir. Te he notado distante en estas últimas semanas y quisiera saber cómo llegaste a ser de pocas palabras, ¿qué hice? Dime si es que...

—Ladybug –le interrumpió él soltando un suspiro al desviar su mirada—. No hay un nosotros.

La chica de ojos zarcos sólo se quedó callada, observándolo. Miraba como los hombros de aquél muchacho se agachaban y pasaba sus garras por los mechones de su cabello mientras intentaba elaborar las palabras correctas qué decirle.

—Me costó mucho tiempo entenderlo, alrededor de diez años para ser exactos –decía él mientras se negaba así mismo, parecía que aquellos sentimientos que había luchado por quitarse querían salir a flote de nuevo, pero ya no podía ser así, él tenía que seguir y ser hombre de palabra—. Tenías razón, nosotros nunca estuvimos destinados a ser, ¿qué ironía, no crees? Tú la creación, yo la destrucción... no era más que eso, no era un complemento, cuánto me disculpo por haberte molestado tanto tiempo...

Ladybug seguía anonadada, ¿qué era lo que le estaba diciendo? Negó despacio mientras daba un paso hacia él pero Chat Noir sólo reaccionó alejándose.

—No tienes que preocuparte por mí, estoy bien, de verdad –le dijo él sin mirarla-. Sólo tardé en comprenderlo, es todo.

—Chat Noir, yo lo siento –se disculpaba ella sinceramente. En su pecho su corazón ardía y sus ojos anunciaban un mar de lágrimas. Jamás lo había visto de esa manera y lamentaba haber quebrado algo que jamás pudiera repararse.

—No tienes por qué sentirlo, my lady –dijo aun intentando sonreír un poco ante aquella frase antigua—. Lo pasado, pasado es...

Habla Ahora - MLB [Two Shot-Ladrien]Where stories live. Discover now