Confesión

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Sabía perfectamente quién me estaba llamando, -ella.

Mi teléfono celular era nuevo, tenía poco tiempo en tenerlo. Solamente a una persona se lo he proporcionado. –ella.

Confieso que durante estos últimos días la comunicación ha sido muy constante. –Ella, ha despertado muchas sensaciones que nunca había sentido.

Todo comenzó en aquella tarde tan pintoresca en la ciudad de Antigua Guatemala, si no hubiera enviado ese correo electrónico el rumbo de mi vida fuera muy distinto y apuesto que no sería interesante.

La melodía dejo de sonar, no tenía el valor de dar unos cuantos pasos, tomar el celular y devolverle la llamada, paralizado y con el corazón palpitante a mil, era en la situación que me encontraba. -lo que ocasiona una mujer en mi vida, ella es fantástica.

De inmediato me puse a pensar – ¿le habría pasado algo? ¿Estaría en problemas? ¿Necesitaba nada más escuchar mi voz?

Podía percibir a la distancia que Valeska se encontraba despierta, su respiración tan agitada la delataba, solo con pensar... si ella se enterará que en mi apartamento se encontraba una mujer, sabiendo que yo soy una persona solitaria, hasta allí podría llegar nuestra historia.

No cabe duda que si hubiera escuchado su voz a esta hora de la madrugada, estaría en el cielo. – ¡Me estaría enamorando de ella!

Así que esperé al día siguiente para devolverle la llamada. –Ella lo comprenderá.

El tiempo fue testigo de este momento tan celestial, al momento de escuchar su voz a las 9 de la mañana en aquel parque de la zona. A Dios gracias que todo estaba bajo control y que la llamada de anoche fue únicamente de saludo.

Estoy en el parque derivado a la situación en la que me encuentro y que tengo que empezar a poner las cosas en orden. –Ella, me motiva cada día.

Los días transcurrieron rápidamente como un destello de luz, he descubierto que Valeska es una persona con mucha disciplina, responsable, inteligente, y su ética como honradez la han llevado a cambiar su personalidad, su forma de expresarse y sobre todo su vestimenta. No me costó nada en poder brindarle una mano, conforme los días pasaban más me enorgullecía. Su corazón y sentimientos fueron abiertos de par en par, donde tome la responsabilidad de hacerme cargo de ella, prepararla para la vida de la mejor forma correcta.

Hoy la considero parte de mi familia, y la veo como una hija... aunque nunca he experimentado esa etapa de sangre.

Tratar este tema con ella no fue fácil, su apoyo me lo demostró a pesar de la distancia de una forma que no me lo esperaba. –Los celos más maravillosos que jamás me han hecho, ella los tiene.

Mi emoción de viajar a la Argentina era demasiada, ¿Era por ella o por mí? ¿Qué pasaría con Valeska?

Tome un tiempo de meditación, entre a una cafetería me senté en la primer mesa que vi. Estilo contemporáneo, incienso olor a mirra, dibujos a mano alzada enmarcados en bellos marcos. Cada una de las personas que se encontraban en el lugar estaban enfocadas en lo que hacían, el ruido no existía el silencio imperaba sobre todo.

Todo estaba saliendo muy bien y eso me emocionaba. Ese mismo día, al regresar a mi hogar continúe elaborando un ensayo económico con perspectivas de todo tipo de riesgos, cuando mi asesora de viajes me llamó, Angel felicidades ya le tengo los pasajes y partirá según lo acordado. Mi gratitud fue espontanea agradeciendo a Margareth e indicándole que llegaría la próxima mañana.

Tenía que llamar a mis amigos y darles está noticia, o bien estaba pensando llegar improvisadamente lo bueno es que conocía buenos aires como la palma de mi mano y no me constaba movilizarme.

Ella es espectacular, es una mujer guapísima nunca me había dado cuenta de eso. Nuestras conversaciones son más consecutivas y agradables por lo que he percibido durante estos últimos días y aún no sabe nada de lo pronto que volveremos a vernos cara a cara.

Llegar a Buenos Aires era un sentimiento como aquel día en que llegue por primera vez a la Argentina. Estaba enfocado a emprender y verla a ella era el motor que me impulsaba hacerlo.

Caminando por las calles del centro histórico, observé a la distancia un lugar sobre la sexta avenida, me aproxime lo más cerca posible y percibí que estaba lleno de historia y mucha magia, me atraparon las fuertes melodías de la marimba, no pude pasarlo por desapercibido. Por lo que accedimos al restaurante junto a Valeska, me senté y pedí la carta a la mesera, que por cierto tenía una fisonomía europea y en efecto era Italiana.

Un caldo de pepián fue mi elección y para Valeska un caldo de res.

No es nada fácil dejar tu país después de todo lo que te ha dado, pero estoy consciente que regresaré y veré a mis hijos andar por estas calles. Todo es muy complicado hoy en día... la finalidad de está decisión es poder prepararme más, desarrollarme como persona, trasladar conocimientos, hacer un poco de capital para regresar con más fuerza para poder incentivar un crecimiento económico en Guatemala y porque no decirlo... -con el amor de mi vida. ¿Ella?

Tenía una noticia para Valeska era justo el momento para darle la buena noticia... ¿Valeska estas dispuesta acompañarme en esté pequeño viaje lleno de mucha ilusión?... me vio fijamente a los ojos, en un estado de shock sin decir ni una palabra. 

El placer de mis caídasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora