XXXV -TE AMO-

62.8K 6.6K 564
                                    

Me pusieron el fragmento de una canción y... Me puse muy melancólica 😢
Así que compartiré mi dolor con ustedes jajaja 😢😭💔
Este capítulo no debía ser publicado hasta el viernes/sábado.

.
.
.

Llegó a su casa agotado, solo quería ver a Ann, abrazarla, besarla y luego ir ambos a la cama y olvidar por un momento el trabajo y toda esa mierda relacionada a la empresa.
Miró confundido unas maletas en medio de la sala, no recordaba haberle dicho que saldrían de viaje.
—¿Ann? —Preguntó extrañado.
La morena salió de la cocina y al verlo a él, comenzó a llorar.
Se acercó a ella preocupado, abrazándola.
—¿Qué ocurre? ¿Te duele algo? ¿Le pasó algo a Crema?
—N-No, nada de eso.
—¿Entonces por qué lloras de este modo?
—Me voy.
La separó y la miró desconcertado.
—¿Te vas? ¿De qué hablas?
—Y-Yo... Ya no quiero vivir contigo Aiden.
—No entiendo ¿Qué es lo que pasa?
—Conocí a alguien más, y-
—¿Alguien más? Sé clara.
—Ya no te amo Aiden.
Se alejó de ella al escuchar eso, sintiendo que algo dentro suyo se quebraba.
—O sea que conociste a alguien más, no sé donde, ¿y de la noche a la mañana todo tu amor se fue a la mierda? ¿Así de simple Ann?
Asintió con la cabeza, sin poder hablar por el nudo en la garganta.
—No, no puedo creer eso.
—E-Es la verdad.
—Entonces dime quien mierda es ese tipo.
—James.
Al escuchar alquel nombre, supo de inmediato de quien se trataba.
Y realmente tuvo ganas de ir, buscarlo, y molerlo a golpes hasta cansarse, pero no pudo.
Se sentía destrozado, deshecho.
—¿Te vas con él? ¿Con un tipo que apenas te conoce?
Ella no dijo nada, solo continuó llorando, no quería seguir con eso, no quería hacerlo, lo estaba lastimando.
—No puedo entenderlo, te creí, creí que me amabas, creí que lo nuestro era real... Creí en ti.
—A-Aiden.
—No digas que lo sientes, ya no me mientas más, sabía que no debía confiar en ti, que no debía... Dejar que entraras en mi vida, solo dime una cosa, ¿Él te conoce mejor que yo? ¿A él si lo amas?
Espero una respuesta, pero ella solo cerró los ojos, llorando en silencio.
—Contéstame Ann.
—N-No lo sé Aiden —pronunció bajo.
—¿Qué puede conocerte este tipo? —le dijo ya perdiendo su tan característica compostura—, ¡¿Cómo puede hacerte dudar cuándo no sabes nada de él?! ¡Nada! ¡¿Qué ha hecho por ti?!
—Él no me hace llorar —pronunció en un hilo de voz.
Fue lo único que se cruzó por su mente en ese momento.
La miró deshecho al escuchar eso.
Si le mentiría, tenía que hacerlo sonar real, para que él no la buscará, para que Aiden le creyera.
Y de ese modo, aunque lo lastimara, los dos estarían a salvo, era lo único que importaba.
Respiró profundo varias veces, y continuó mirando hacia abajo, no podría continuar con aquello si lo miraba a los ojos.
—Con él siempre todo son risas, es atento —pronunció con la voz teblorosa—, me dice que me ama, lo especial que soy en su vida, me lo recuerda siempre, pero sobre todo... él no me hace llorar.
—¿Él te ha visto en tu peor estado y aun así cree que eres hermosa? ¿Él te cuidó alguna vez enferma? ¿Se ha quedado velando tus sueños para que durmieras tranquila?
Negó con la cabeza y su voz sonó tan rota, como se sentía él en ese momento.
No podía estar perdiéndola, no quería aceptarlo.
—Dime Ann ¿Cuántas veces arriesgó su vida por ti? Si jamás te ha hecho llorar, ¿Como saber cuan frágil eres? Solo te hace reír, solo eso sabe hacerte sentir... ¿Te hará reír cuando las cosas se pongan malas? ¿Te hará reír cuando vuelva cansado? ¿Cuando tenga un mal un día? ¡¿De que mierda sirve que te haga reír si la vida no es un juego Ann?! ¡Entiende que no siempre todo es felicidad!
Lo pensó por un momento y creyó saber a que venía todo eso.
—¿Me estás dejando por la distancia que hemos tomado en estas semanas?... Ann yo también tengo responsabilidades, no puedo quedarme contigo siempre que tú quieras, yo-
—Ya basta Aiden —le pidió comenzando a llorar nuevamente.
—¿Cómo quieres que pare? Si me estás dejando por un tipo que no vivió contigo ni un cuarto de lo que yo viví a tu lado. El llega y te dice te amo ¿Y tú le crees? ¿Qué ha hecho para demostrártelo? Si hacerte reír cualquiera puede hacerlo, y no por decirte te amo significa que lo sienta realmente.
—Es algo que tú jamás hiciste.
—¡Maldita sea contigo Ann! —le gritó sintiendo sus ojos arder—, ¡¿Es que acaso todo este tiempo no significó nada?! ¿Crees que pudo haber existido otro motivo para salvarte, cuidarte, quedarme contigo que no fuera por amor?
Se dejó caer sentando en el sofá, estaba cansado, no tenía sentido seguir discutiendo con ella.
—Ya no sé como más demostrartelo, si estos meses para ti no fueron nada, vete, largo.
—Tú solo... Lo hiciste por lástima.
—Vete Ann, no quiero verte... jamás debí... permitirme sentir esto.
—No —le dijo ella negando con la cabeza, sollozando, ya lo había conseguido, él no la buscaría después de eso—, jamás debiste permitir que llegáramos tan lejos.
Se cubrió los ojos con una de sus manos, sintiéndose tan miserable, pero al fin de cuenta, ella tenía razón, el permitió que su relación avanzara.
Era la primera vez que lo veía llorar, y sabía que nadie más lo había hecho antes.
Tomó su maleta, miró la puerta y luego a él, si iba a irse, quería saber aunque sea porque lo hacía, si era solo por su orgullo herido... O porque realmente sentía amor por ella.
—¿P-Por qué lloras?
—¡Porque te amo! —le gritó entre lágrimas —, ya no sé como demostrártelo, ya no sé que más hacer...
Y ya no le importaba nada, ni llorar frente a ella, ni parecer débil, nada.
—Te amo, me enamoré de ti, me enamoré como creí que jamás podría hacerlo, como jamás lo hubiese querido. Eres todo lo que quiero, solo tú, y si te pierdo-
Su voz se quebró, se sentía tan estúpido de estar llorando, pero no podía evitarlo.
—No sé que será de mi, si no estás a mi lado, ya nada me importa. Tú te convertiste en mi mundo, te pedí que no fueras dependiente de mi, y soy yo ahora él que no puede, ni quiere vivir sin ti.
—A-Aiden.
Se acercó a él y lo abrazó, él se aferró a su cintura, llorando ambos.
No, no podría irse, no sabiendo eso.
—Y-Yo te amo a ti, eres el único hombre para mi Aiden, yo te amo sólo a ti... lo juro.
Se arrodilló frente a él y lo tomó del rostro.
—Te amo... él no significa nada para mí, tú eres mi amor.
Necesitaba creerle, necesitaba hacerlo, porque el dolor que sentía en su interior lo estaba consumiendo.
—Y tú eres el mío Ann.
Le dijo antes de besarla con desesperación.
No quería que se fuera, pero ya no había vuelta atrás, si la perdía... Ya nada más le importaría.
—Te amo, te amo —le repitió entre besos, y se lo diría hasta cansarse, hasta que ella lo entendiera.
Dejó sus labios para bajar a su cuello, la morena pasó sus manos por su nuca, bajando por su espalda.
—Aiden... espera.
—Quiero demostrártelo... Quizás solo así lo entiendas una vez más.
Como aquella primera vez que lo habían hecho juntos.
Tal vez no se lo había dicho con palabras, pero la amaba. Y era la primera vez que hacía el amor con alguien. Y solo porque era ella.
Se abrazó a él, cerrando los ojos, dejándose llevar por sus suaves caricias y besos.
Esperaría para darle la noticia, porque ahora lo único que necesitaban ambos desesperadamente, era sentirse uno.

...

(Bello recuerdo la nota del comienzo ❤
Y la canción, era lamento boliviano 💔

Muñecas de compañíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora