Parte 8

128K 13.4K 2.3K
                                    


David.

—Mi King Kong no necesita estimulantes, mi King Kong es todo un orangután —Hago sonidos leves con mis puños contra mi pecho al estilo gorila y todos gritan eufóricos, no puede ser. Llevo mis manos a mi frente intentando tapar mi vergüenza al ver este video.

—UN ORANGUTAAAAAAAN —más gritos y escucho de fondo como aclaman a Patricio Schmitt. Trago saliva ¿Qué es esta mierda? Y para rematar las cosas uno de los estúpidos en trajes de ballet me pasan un cigarrillo y yo doy una larga calada... esperen... eso no es un cigarrillo ¡No puede ser!

ACABO DE FUMARRR MARIHUANNNNAAAA —más gritos eufóricos —ACABO DE...

Detengo el maldito video de inmediato y me quedo en shock, viendo hacia un lugar dentro de mi auto, no sé cuántos minutos pasan y yo en esta misma posición, esto es peor que aquel video mío bailando en una tanga roja, aquel que la maldita de Sara le envió a Oliver para chantajearme, yo no quería una relación formal, tampoco quería darle diez mil dólares.

Bueno, ¿Por qué querría una relación formal con una chica que quería diez mil dólares, mi auto y mi casa a su nombre?

Pero ese video no era ni la mitad de vergonzoso que este.

Adiós vida increíble de David Schmitt, adiós chicas calientes, adiós respeto; espero ese video no esté en internet porque me tiro de la cúspide del edificio Anderson. Dejo caer mi cabeza sobre el volante produciendo un sostenido pitido del claxón, ya no tengo motivos para vivir, mi celular suena y levanto mi cabeza para tomar el estúpido aparato que está sobre el asiento del copiloto, estoy seguro es otro de mis socios felicitándome por el "gran paso".

Tomo el celular y observo la pantalla...

Es Natalie.

Y su fotito en traje de baño es la que se muestra en mi pantalla, sí, esa había puesto para su número de contacto, decido cambiarla porque no es sano para mi bienestar emocional; pero antes, reviso su mensaje.

"Ya estoy llegando. El tráfico está pesado"

Ni siquiera contesto, me quedo viendo aquella foto una y otra vez. Tal vez no sea tan malo estar casado con ella. Estar casado con ella significa sexo todas las noches.

Pero analizándolo desde otra perspectiva, cuando quieres tomar leche no te compras una vaca entera, no puedo estar casado sólo por sexo con ella si puedo conseguirlo sin compartir esos escalofriantes papeles firmados.

Pero bueno, también depende de qué tan seguido quieras tomar leche... es economía básica.

Qué mierda estoy hablando.

Vuelvo a dejar caer mi frente sobre el claxon. Estoy comenzando a odiar mi vida.

El maldito celular vuelve a sonar, "Amiguis Marisol" se muestra en la pantalla ¿Amiguis Marisol? Que p..., y para rematar las cosas la foto de contacto es de él o ella, lo que sea, junto a mí con ese jodido traje amarillo; oficialmente, el día de hoy odio el amarillo. Respiro hondo, había dejado a estos dos tipos en las Vegas, ojalá se queden allá para siempre. Ahora tendré que cambiar de número.

Paso las manos por mi cara a modo de frustración, mientras consigo el valor para salir de mi auto y caminar hacia el interior del restaurante en el que nos habíamos quedado de ver con Natalie, vamos David, tú puedes. Tomo una calada de aire y salgo, mis zapatos tocan el pavimento y tengo la sensación que todos me miran, debe ser mi imaginación.

Camino hacia el lugar y antes de llegar a la puerta dos chicos bastante jóvenes se me acercan haciéndome ahogar un grito.

¡Maldita sea!

Recién Cazados © (Borrador de la 1era edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora