-Hola Zayn-le extendió su mano luego de que lo liberara.
-Styles-dijo entredientes mientras se estrechaban las manos.
Pero sus ojos no estaban en el ruliento sino sobre mi.
Dedicandome una hermosa mirada de odio.
-Oh Zayn, cómo se me olvido avisarte que habia invitado a mi queridisimo Rizitos de chocolate-dije actuando exagerandamente-¡Cuánto lo siento!-pude escuchar una risita ahogada de Harry.
-Tu siempre tan despistada-contesto con una sonrisa falsa- Pasa, Styles-lo invito extendiendo sus manos para que le pasara las cajas de pizzas.
-Permiso-dijo el ruliento mientras entraba.
-Asi que comparten departamento mientras Liam esta de viaje-comento Harry mientras que Zayn apagaba el DVD y devolvia la pelicula al ruliento.
Le había pedido que trajera "El Horax".
La pelicula más aburrida del universo.
Ya la habiamos visto juntos.
Se la pedi sólo para aburrir a Malik.
Lastimosamente sólo durmio unos pocos minutos ya que tenia un ojo en la pelicula y otro sobre mi, con su continua mirada de odio.
-Algo así...-respondí.
-Hasta que uno se vaya-completo el moreno mirandome.
-Claro, porque no cabemos tres. Cuado venga Liam, Zayn se irá. ¿Verdad, Zayn?-Dije sonriendo.
Esto de las sonrisas ya me estaba causando dolor en las mejillas.
-Yo creo que... Me voy-dijo Harry interrumpiendo nuestra guerra de miradas.
Se puso de pie, guardo la pelicula en uno de los bolsillos de su campera y se acerco para despedirse.
-Espera-lo detuve-te acompañare hasta abajo-dije levantandome.
-Yo también voy-se agrego el moreno.
-Trae las llaves, las dejaste en la cocina-le dije al moreno.
Este me dedico una miradita y luego hizo caso.
Ni bien se dio la vuelta tome la mano de Harry y salimos disparados hasta el ascensor, que no tardo demasiado.
-Rápido, rápido-decia mientras empujaba a Rizitos dentro de éste.
-¿Qué haces?-preguntó.
Presione el boton para que se cerraran las puertas justo cuando Zayn recién salia del departamento.
Las puertas se cerraron dejandome ver una última imagen del moreno gruñendo.
-¡Al fin!-dije soltando una risita
-¿Qué?-Harry seguía sin entender.
-Obviamente tengo otro juego de llaves-se las mostré-sólo lo distraje para escapar.
-¿Escapar?-continuó.
-Me tiene encerrada-comenté- como Sirius en Azcaban-otra risita.
-Estas loca-acompaño mi risa.
-Gracias-le sonreí, esta vez no dolió porque no era una sonrisa figida, sino una verdadera- Eres mi héroe-sobreactué.
-Ya en serio.¿Y ahora?-las puertas se abrieron.
-La noche es jóven Rizitos. Hora de divertirnos...
Todo estaba planeado. Desde las pizzas, pasando por el Horax y terminando en el ascensor-que detuve unos minutos por si Malik quería darme alcance- Yo no iba a quedarme encerrada en una habitación siendo vigilada por Malik como aprendiz de niñera.
¡Por favor, era viernes!
Y los viernes ______ Sanders nunca se queda encerrada y menos aburrida.
-Ya estoy lista-dije pasando al asiento del copiloto. Me había cambiado en los asientos traseros del auto de Harry.
Antes de 'escaparnos' busque una muda de ropa en mi bolso, que seguia en mi auto.
-¿Se puede saber a dónde vamos?-El sólo conducía hacia ningún lado.
-Sorprendeme Potter ¿Un pub?¿Algún lugar para bailar?¿Pool?-ésta última fue acompañada por una risita de ambos-Pervertido-lo acusé.
-¡Hey, nadie te obligo a espiar!-dijo con otra risa.
-Gracias al cielo no vi nada, sólo a la peliroja-me defendí.
-¿Era peliroja?-preguntó confundido.
-Eso creo-comenté-¿A cuántas te tiraste?-solte sin pelos en la lengua.
Se me daba bien hablar libremente de cualquier tema.
-¿Qué clase de pregunta es esa?-trato de evadirme.
-¿Pregunta de amigos?- Inventé.
-La verdad no lo sé, no llevo la cuenta-confesó-¿Y tu?-desvio un segundo su mirada hacia mi.
-Soy una dama.
Esa ni yo me la creo. Ambos soltamos una carcajada.
¿Qué paso?
¿Me lo lleve a la cama?
¿Me embriague hasta perder el conocimiento?
¿Hicimos todo el kamasutra?
¿Orgía?¿Comimos un helado?
Algo asi... Resulta que el lugar al que me llevo Harry era una especie de discoteca pero con un pequeño detalle.
Los viernes las cosas subian un poco la temperatura, por dercirlo de alguna manera.
Cuando entramos tomamos un par de tragos y bailamos como el resto.
Pero a medida que el tiempo pasaba las cosas empezaron a subir de tono.
Los besos-de los demás- ya no eran sólo besos sino... ¡Sexo explicito! Varias parejas haciedolo aquí y allá, a donde quiera que miraras habia alguien haciedolo.
Al principio nos causo gracia y Harry se disculpo ya que no era su intención.
Luego de un par de ofertas para integrarnos para hacer trios y esas cosas decidimos salir e ir a tomar algo.
Llegamos a un Starbucks y nos pedimos un Frapuccino de Frutilla.
-¡Mi cerebro!-grité seguido de una carajada.
Sí habiamos tomado un poco de más.
-Espera, espera-dijo Harry-¡Hagamos una competencia!-propuso.
-Potter no... Nos va a doler el riñon-ambos volvimos a reir.
-Cobarde-dijo cuando se calmo.
-Qué, Dónde y Cuándo, Rizitos-nadie me llama cobarde.
-El que termine último debe pagar un muffin de chocolate al otro-explicó.
-¡Hecho!-grité.
-Listos...-comenzó.
-Preparados...-respire profundo.
Adiós cerebro.
-¡Ya!-gritó finalmente.
¡Oh Dios!
¡El cerebro se me congelo, lo juro!
Pero valió la pena, gané.
Tuve unos momentos para recuperarme y luego festeje mi victoria con gritos y un baile ridículo.
-¡En tu cara, Potter!-dije mientras el todavia arrugaba su cara por el dolor.
-¿Cómo lo hiciste? Yo a penas llegue a la mitad y ya estoy así-se quejó mirando su vacio medio lleno con odio.
-¡Gané!-canturreé.
-Ok, dejame recuperarme y te compro tu muf-lo interrumpí.
-No quiero el muffin-apoye mi dedo índice sobre sus labios.
