Prólogo

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Prólogo

Son cinco familias las escogidas para ir al paraíso este año. Es genial la idea de dejar de trabajar, de vivir gratis y sólo con la obligación de disfrutar. Están ya siendo transportados en un vehículo que tiene asientos varios, todos colocados en círculo, mirando siempre al centro. Las cinco familias disfrutan del viaje. Los adultos hablan sobre sus vidas, se presentan. Los niños juegan y ríen. El buen humor es contagioso para todos. Hay cinco bebés colocados en una cuna grande, que pese al escándalo no se despiertan. El viaje no es muy largo, al fin y al cabo el paraíso no está al alcance de cualquiera, aunque sí muy cerca de todos. El transporte se detiene, han llegado. La compuerta trasera se abre, hay un hombre esperándolos a todos. Dos mujeres se acercan a recoger a sus respectivos hijos de la cuna. El hombre dice algo, y las mujeres, dubitativas, se detienen. Después se baja todo el grupo del vehículo, excepto los bebés. La compuerta se cierra una vez la última persona ha salido. Uno de ellos estalla a llorar, despertando al resto, que también lloran. Fuera de la nave se oyen gritos de socorro. Alguien golpea la pared del vehículo con desesperación, todo el buen ánimo se ha esfumado de pronto. Y en un instante las cosas fuera se calman, aunque los niños, sin familia, lloran como uno solo.

Las tres puntasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora