Capítulo 34.

7.5K 285 16
                                    

Narras tú.

En el momento que leí el mensaje de Carly, Ashton notó que algo no andaba bien y preguntó tímido que había ocurrido.

Fue entonces cuando, imaginé mi rostro al leer el mensaje, sin duda alguna, yo también me habría asustado.

-Oh, no es nada. Solo que Caroline tuvo un problema con sus padres y ahora la echaron de casa-traté de sonar segura de lo que decía.

Por más que yo no lo aceptara del todo, sabía que estaba encubriendo a Justin. No lo hacía por él, sino por Ashton, que se había tomado la amabilidad de traerme aquí ¿para que yo me fuera con otro? Claro que no, eso sería tan malo y descortés de mi parte. Él no estaba involucrado en esto, y no quería meterlo en donde no debo.

-Pues, si hay alguna emergencia, lo mejor sería que nos vayamos-Ashton dijo con un tono dulce y yo me sentí tan mal por él.

«Eres una completa idiota» me dije para mis adentros.

-Siento mucho esto, pero Caroline es mi mejor amiga y no puedo no apoyarla en este momento que me necesita tanto-,«Te irás al infierno» una voz sonó en mi cabeza.

-Vamos-se levantó de su asiento y me ayudo a que me parara.

Con delicadeza tomó mi mano, que estaba muy sudada por cierto, y salimos juntos de allí.

Cuando subimos al coche no podía dejar de verlo sin no sentirme culpable de arruinarlo siempre todo. Ashton arrancó su mercedes negro y las llantas chillaron haciendo que un escalosfrío recorriera mi cuerpo de pies a cabeza.

- ¿A dónde la llevo linda dama?-dijo entre risas.

-A paparazzi, Caroline está allí bebiendo-reí y besé su mejilla haciendo que se estremeciera.

-A sus ordenes-me dio una sonrisa sincera y se enfocó en la carretera.

Observaba las calles vacías, sin ninguna persona caminando por las veredas rotas de la gran ciudad. En mi cabeza solo estaba Justin, Justin y Justin. El podría estar muy ebrio y dañarse a sí mismo, o quién sabe qué podría ocurrirle, porque está totalmente pasado de copas y dudo que pueda distinguir las cosas.

Seguíamos recorriendo las calles despobladas a estas altas horas de la noche y de un momento a otro, Ashton detuvo el coche.

Supe que habíamos llegado al bar y ahora, tendría que despedirme de él. Giré mi rostro y nos miramos por un largo tiempo, su cabellera dorada cubría parte de su frente y sus ojos azules transmitían ternura.

-Adiós-dije casi susurrando. Cuando estaba por salir del coche, su mano impidió que lo hiciera.

Volteé y él estaba ahí con una sonrisa observándome. Intimidada cerré la puerta del coche y me regresé al asiento del acompañante.

En un abrir y cerrar de ojos, lo tenía a milímetros de mi rostro, observando cada fracción de mi cara. Con su mano, corrió mi un mechón de mi oscuro cabello y tomó con la otra mi mentón, acercándome a él lo suficiente como para que nuestros alientos se mezclaran y nuestras narices chocaran.

Cerré mis párpados y algo caliente chocó contra mis labios con delicadeza, moví un poco los míos y él también lo hizo. Fue el beso más dulce que alguna vez me dieron, sus manos rodeaban mi cintura, mientras que las mías estaban enredadas en su cuello.

Estuvimos así por unos 25 segundos y luego yo me separé, agitada, traté de recuperar el ritmo normal de mi respiración y bajé del coche.

Él sonrió y con su mano hizo un gesto de saludo, fue entonces cuando se marchó y se perdió en la oscuridad de la noche.

Change me {Justin Bieber y tú}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora