12| Supervivencia

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¡Hey! Oficialmente ya es año nuevo en Argentina, así que les traigo este capítulo de regalo. El año pasado trajo muchas cosas buenas para mi, especialmente ustedes. ¡FELIZ AÑO NUEVO! Espero que la pasen bien, rodeados de personas que valen la pena. Son increíbles, no lo olviden. Gracias por todo el apoyo que me dieron todo este año pasado.

CAPÍTULO DOCE

Keera no podía creer lo que veía. Él niño estaba vivo. El cuerpo de Rocco Pevensee temblaba por el miedo que él tenía, sus labios estaban pálidos y sólo estaba segura de que él estaba vivo por el movimiento de sus músculos. Su hermana no sabía si era un truco de su cabeza, ya que no estaba precisamente sana, pensó que quizás su mente le entregaba todo aquello que más anhelaba, pero, ¿Cuál sería el costo? Keera tenía intenciones de correr hacía él, abrazarlo hasta dormirse. Llorar de la alegría, saber que su hermano estaba vivo después de todo, era alucinante.

—¿Eres real?— fue lo que preguntó luego de unos segundos. Cayó de rodillas al suelo, aún con la pistola de su hermano cerca. No le temía a la muerte, no después de todo. El arma de fuego era la última de sus preocupaciones.

Katniss llegó corriendo, a su lado.

Había tardado unos segundos en dar con la habitación, que parecieron minutos. El sinsajo puso sus ojos en el niño con la pistola y notó que su amiga lo miraba sin creerlo. Su cabeza comenzó a reaccionar. La chica Pevensee se percató que la femenina también podía verlo y significaba que Keera no estaba del todo loca, o que quizás ambas lo estaban. Así que, algo dentro de ella se llenó de esperanza. Después de tanta oscuridad en su vida, había encontrado un camino a la luz.

—Keera.— dijo su hermano, él bajó el arma, y la puso en el suelo. Se preguntó cómo había conseguido ese horrible artefacto. Rocco jamás hubiera tocado algo que hiriera a alguien a propósito, jamás hubiera tomado un arma de guerra. Las lágrimas empezaron a salir de los ojos de ambos hermanos y ella no se resistió, corrió en búsqueda de su hermano pequeño, y lo envolvió en su cuerpo.

Era increíble sostenerlo y saber que en verdad él era carne y huesos. Que a pesar de que su hermano estuviera en mal estado, aún seguía allí. Vivo.


—¿Cómo lo lograste?— preguntó. Sintió las lágrimas del pequeño mojar su ropa, sus ojos azules la observaban llorosos y atormentados, todo rastro de inocencia había sido perdido. Ya no tenía la misma esperanza que solía tener, Rocco Pevensee parecía muerto en vida. Sus cabellos con rulos estaban despeinados, sucios y chamuscados. Su ceja estaba llena de sangre seca. Tocando su tórax lo sentía muchísimo más delgado. Había perdido alrededor de cinco kilos.

—Los agentes de la paz nos trajeron a todos aquí, al distrito doce, para ver lo que pasaba si apoyabamos a Katniss Everdeen y a ti.— explicó el niño, sollozando. El corazón se le partió por dentro. No toleraba ver a su hermano llorar.— Ellos mataron a papá y también a Malik. Ambos pelearon hasta el último momento, e hirieron a los agentes de la paz, pero eran muchos. Nunca se dieron por vencidos. Los mataron en frente de todo el distrito.
Artemis y yo estábamos juntos, asustados. Pero se la llevaron, Keera. Dijeron que quizás podía ganar dinero trabajando por ellos, haciendo lo que tú hacías.

Los hombres a los que más amaba en su completa vida estaban muertos, su papá y Malik. Sus ojos lloraron con más fuerza, sintiendo el dolor posarse por su cuerpo. Sollozó, aún abrazando a su hermano. Nunca más los vería, ellos solo eran cadáveres. Quizás eran uno de esos tantos cadáveres quemados en el suelo del distrito, algunos que había pisado sin quererlo. El hombre que le había dado la vida, y el muchacho que había ayudado en cada una de sus elecciones.
Pero la peor parte la estaba pasando Artemis, ella estaba siendo obligada a hacer todo lo que Keera siempre quiso evitar. A prostituirse en manos de hombres asquerosos. Cerró sus ojos con fuerza y apretó sus uñas en sus palmas. Quería gritar, golpear algo, arañarse, matar. Había jurado proteger a su familia a cualquier costo, pero les había fallado.

Hurricane ✓ ⋆ Finnick OdairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora