Siempre Tuya

Capítulo 46

- abuela, no es mi culpa, llego en media hora... - le digo a mi abuela por teléfono, cuelgo antes que me empiece a gritar por el celular. Así que trato de darme prisa. Salgo de mi apartamento y me regreso, me siento tan retrasada, vuelvo ya que se me olvidan las llaves del coche.

Entró de prisa y salgo casi corriendo hacia el elevador.
Cuando llegó a la recepción miró a Owen reunido con los de seguridad del edificio. Cuando me mira se soprende y me hace una señal de que lo espere unos minutos, solo le sonrió y me colocó detrás de él, un poco alejada.
Reviso mi celular, mientras Fernando mi primo me cuenta que mi abuela esta molesta por no llegar a tiempo.
Me rio en mi celular cuando alguien me habla.

- Emily Miller... - me dice una voz de un hombre que está enfrente de mi, rubio,alto, fornido, ojos azules. Lo quedo viendo de manera a que me hable rápido, no tengo tiempo para desconocidos. - como has cambiado. - sonríe.
Doy unos pasos atrás y chocó contra Owen, él voltea y se coloca enfrente de mi, colocó las manos en su espalda y el hombre rubio sonríe.

- algún problema? - pregunta Owen.

- soy Robert Hardford... - sonríe y me señala - tu hermano. - me quedo asombrada por lo que dice. Niego con la cabeza. - soy hijo de Beatriz y de Robert Miller, tu padre - mi papá siempre quiso un hijo varón, pero se mira mucho mayor que yo y mi papá nunca menciono a un hijo, bueno que yo recuerde.

- que quieres? - le digo mientras salgo de mi escondite, la espalda de Owen.

- solo quería volverte a ver... - me dice - eres mi hermanita, mi mamá siempre me hablo con la verdad y mi papá siempre me enseñó a proteger a la familia. - me dice mientras dudo de lo que dice.

- bueno mi papá no es de los que protege a la familia - le digo dudando.

Se ríe y se hace un lado, levantando su mano para que me dirija a los muebles de la recepción.
Me dirijo hacia los muebles seguida de él.

- mi papá es Connor Hardford, él me crío. - sonríe. - Robert nunca me acepto, - agacha la cabeza - un día fui a tu casa, era tu cumpleaños, solo iba a dejarte un obsequio, aunque también quería conocer a Robert... él me corrió de la casa, fue la primera vez que me trataron como basura y la primera vez que me pegaron tan fuerte - sonríe. - sabes, a pesar de que mi padre es narcotraficante, él me quería de verdad, jamás me pego, y siempre me apoyo. - al oír sus palabras, los recuerdos de aquella golpiza por mi padre inunda mi mente, dejándome cicatrices, pero la que mas duele, es la del recuerdo que tengo en mi memoria.

- Emily Miller.

- Reynolds - le corrijo.

Él me queda viendo extraño - bueno, Emily Reynolds, te preguntarás que quiere este pobre diablo... - dice acomodándose su saco - estoy aquí porque... - tartamudea - bueno en realidad porque Elliot me lo pidió - se ríe y yo igual - talvez tengas miedo de formar una familia con él, pero el amor es más poderoso de lo que te imaginas, puede ser que Elliot sea el dueño de un enorme infierno, pero tu serás ese ángel que lo libre de todo... Elliot de verdad te ama, solo es cuestión de que los dos no se den por vencidos. Mi padre nunca lo hizo y mira, somos una gran familia, aunque... tengas que dormir con una arma bajo la almohada, ir a practicar tu puntería los fin de semana... - dice con ironía, sonriendo. Se levanta y se coloca sus lentes de sol.

- sabes, siempre te seguía, cuando estabas en el colegio, miraba como eras la luz de los ojos de Robert, eras su adoración, miraba que Robert daría la vida por su princesa. Aveces te envidiaba porque jamás había visto tanto amor entre un padre y una hija.

- sin embargo no era su adoración, solo trataba de fingir ser un padre comprensivo... - le digo con lágrimas en los ojos.

- hace 5 años, recuerdo que fui a la mansión... Robert lloraba como niño pequeño en el sofá de tu balcón. - dice lentamente. - creo que él simplemente no aceptaba que su princesa había crecido - se encoje de hombros.

No, él no debió de tratarme así, no debió de correrme de la casa, no debió de decirme esas palabras que marcaron mi vida, tenía que apoyarme en el momento en que mi vida se derrumbaba y exactamente porque me alejaran de un amor.
Pero tengo que ser fuerte, no me tiene que afectar nada.

- felicidades Emily... y... bienvenida a la familia - sonríe y se marcha.

Ahora estoy demasido retrasada, y mi abuela me matará, si mi padre no lo hizo hace cinco años, mi abuela si lo hará por llegar tarde.
Salgo del edificio acompañada de Owen.

Al llegar a la casa, entro pensado en Robert mi hermano. Mi padre nos mintió, le mintió a mi mamá, pensé que eramos una familia unida, libre de mentiras, pero mi papá nos engaño, me ha defraudado de nuevo.

Entró y mi abuela me esta esperando, cruzado de brazo.

- donde estabas Emily? - me pregunta mi abuela.

Me quedo pensando un rato, oigo que ya llego toda mi familia, oigo que ríen y que hablan.

- con mi medio hermano - la enfrentó.

Ella me queda viendo confundida - con Brian?... - me pregunta.

- con Robert Hardford - le digo y ella empieza a caminar.

- a mi despacho Emily - me dice mientras la sigo.
Al entrar me siento en el sillón mientras ella se sienta enfrente de mi.
Ella saca una fotografía de un florero.

- ella es Beatriz y tu padre - me enseña la foto, mi padre está super joven en esa foto. - ellos dos se enamoraron cuando tenían 18 años - dice caminando hacia su escritorio - Beatriz estaba enamorada de Robert y Robert de ella, pero los padres de Beatriz estaban pasando por un momento difícil de sus vidas y no tenían más opción que aceptar la propuesta de la mafia - agacha su cabeza. - tu padre lucho por ella, a tal punto que tuve que desaparecer a tu padre del país para que estuviera a salvo. Yo también cometí un error como el de tu padre, lo aleje sin saber que iba a tener un hijo con ella, le destroce la vida a los dos, sin querer. - mi abuela queda viendo hacia la ventada.

¿va a llorar?

- tiene los ojos de tu padre, verdad?... - sonríe.

La verdad casi no recuerdo el rostro de mis padres. Así que no puedo asegurar nada.

Me dirijo donde mi abuela y le extiendo la mano. Ella se levanta y me abraza.
Mi abuela tiene una foto de la boda de mi padre, él se mira feliz con mi mamá. Recuerdo una ocasión, yo iba en el coche y mi madre le tomo la mano a mi padre, y los dos se quedaron viendo de una manera encantadora, que se podría decir que estaban expresando sus sentimientos a través de sus miradas.

Salimos del despacho, no quise hacer más preguntas, ya que a mi abuela le afecta hablar de eso. Así que salimos a divertirnos con nuestra familia.
Todos me saludan y empezamos a hablar y reir. La vida me ha dado la mejor familia del mundo, ellos son la razón de mi felicidad.