Decisión de Amor (Borrador Completo)

Capítulo 20: ¿El Tiempo Te Hace Cambiar?

Cristhie

—Isaac, entiende que... Estoy acá por negocios y no pretendo obligarte a hacer nada. —No podía ser tan egoísta. La relación con Isaac me había cambiado.

—No lo estás haciendo... ¡Yo quiero estar contigo! —Parecía sincero y eso me dolía más, pero yo...

—No puedo Isaac... Tan solo no puedo —dije y tranqué la llamada. Sin saber muy bien cómo, por mis mejillas corrían unas lágrimas traicioneras, recordándome lo mal que me sentía, lo sola que estaba.

Seguía sola a kilómetros de distancia de las personas que amaba, de los seres que más me importaban, recordé que estaba preparando el baño y ahora lo necesitaba más que nunca. Me estaba quedando dormida en la bañera, tan agotada de haber llorado, y el cambio de horario que también me había afectado; así que me salí del baño directo a la cama, de todas maneras no tenía nada más que hacer, Xavier se encargaría de avisarle a mi padre de todos los asuntos, mientras yo me dedicaría a descansar.

Me despertó el fuerte ruido de la puerta, ¿Quién tocaría con tanta insistencia? Y sobre todo, ¿Qué hora era? Seguían tocando la puerta, así que resignada empecé a desperezarme, aún estaba agotada pero seguro era por el cambio de horario. Me coloqué una bata de las que había sacado de seda egipcia, me arreglé un poco el cabello con las manos y me dirigí a la puerta, quien quiera que fuera realmente quería hablar conmigo,

—¡Diga! —hablé con voz fuerte detrás de la puerta.

—Cristhie, es Xavier. —No sé por qué pero me sentí más tranquila al saber que era él, ya me estaba imaginando a Isaac llegando a mi puerta... Bajé rápido de la ensoñación mientras le abría la puerta a Xavier.

—Hola Xavier —le dije conteniendo un bostezo.

—Oh, lo siento Cris, no quería molestarte, había venido antes y no abrían así que bajé a la recepción y pregunté si habías salido, pero allí me dijeron que no habías salido y subí nuevamente a buscarte. —Lo decía todo tan rápido y yo aún estaba adormecida, tuve que hacer mi mejor esfuerzo por seguirle la idea.

—De acuerdo, Xavier ya me encontraste, debe ser algo muy importante ¿O no? —No quise parecer pedante, pero ya lo había dicho, además me había despertado.

—Eh, si Cristhie, ¡Tenemos el contrato!

—¿Cómo?

—La empresa quedó fascinada con la propuesta, así que tenemos Paris para rato.

—Eso es... —Tenía mil emociones encontradas, eso era lo que quería, por el bien del negocio de mi padre. Pero por otra parte mi corazón se encontraba tan lejos de Paris... —Es genial—, terminé de decir con fingido entusiasmo que Xavier no pareció notar.

—Es excelente, ya tengo todo planificado, cerramos trato para la semana que viene Cris, pero esto ya es un hecho, mañana o más bien hoy se lo digo a Edmund, esto de la diferencia de horario es algo confuso, ya nos acostumbraremos...

—Si —dije con menos ánimo aún.

—Bueno, esto es algo que definitivamente tenemos que celebrar.

—¿Qué? ¿Celebrar?

—Si Cristhie, salgamos esta noche, conozcamos a la Paris nocturna, ¡Vamos, la cuidad nos llama!

—No, no lo creo Xavier. —Me miró con ojitos de súplica. —Al menos no esta noche —prometí.

—Muy bien Cris, voy entonces a arreglar los detalles y mañana conversamos todo con más calma. —Su emoción era tal, que salía de su cuerpo y casi, solo casi, me contagia.