No estaba para ir tirando mi tiempo con cualquier persona, animal o cosa. No tenía suficiente tiempo como para gastarlo con alguien como tú. Nunca lo tuve, pero lo derroché contigo. Lo gasté en y por ti, sabiendo que nunca más volvería a mí. Ahora me quedé sin él y sin ti. Bendita suerte, ¿no? Lo que no me pase a mí por ti, no lo ha vivido nadie. Lo que hice te puedo asegurar que nunca nadie antes lo ha hecho por otra persona, y tampoco lo harán en un futuro; ni por otra gente ni por ti.
Sabes que yo fui la única estúpida que lo haría, y lo hice, y lo perdí, y te perdí, y me perdí. Ahora no me queda nada; ni mi tiempo, ni tú, ni yo misma. Pero lo cambié por ti y por estar contigo, así que tampoco lo malgasté con nada.
Me faltaba tiempo, y lo poco que tenía lo intercambié por tu compañía. Pero valía la pena; y la alegría.
ESTÁS LEYENDO
Memorias de un corazón.
Short StoryBienvenidos al lugar más profundo de mi mente. Porque, si estáis aquí, supongo que será porque sentís que vuestro corazón tiene recuerdos, que cada pulsación no solo hace que la sangre recorra vuestro cuerpo, sino que tiene algo más. Y también supo...