23.

2.1K 88 14
                                    

Siento una respiración en mi oreja y un brazo me rodea la cintura,pegandome a un cuerpo realmente grande y musculoso.
Me giro para quedar cara a cara y hago el esfuerzo de abrir los ojos.

El rostro de Manuel me golpea mentalmente dejándome algo anonada.
Me acaricia el pelo lentamente y sonrie.

-Buenos dias,mi amor.-Dice dandome un leve pico-¿Feliz de que estemos casados?

¿Que?

-Si,mi vida.-Yo no respondía,que me pasaba no podía preguntar o responder.-Te amo tanto...

-Te quiero comer.-Dijo metiendose en el hueco que ocasionaba la almohada y mi cuello depositando pequeños besitos.

-Idiota...-Susurré.

Entonces se separó brutalmente.
Se levanto y se dio la vuelta,de la nada tenia un esmoquin y se dio la vuelta.
Tenia la cara ensangrentada,llorando.

-¿Ves Camila?-Me decia llorando.-Me haces daño jurando un amor que no es verdadero.
No puedes follar con el porque solo me deseas a mi.
Te amo y me amas ¿¡Porque no dejas de jugar de una vez?!

Mi rostro se cubrió de miedo,mi cara estaba espantada.
Estaba alli parada yo misma mientras veia a mi misma en una cama desnuda peleando con el.

Es como si yo fuera un fantasma debido a que no me veían.

-¡No!-Decia mi doble-¡Yo no te quiero Manuel,amo a Iván!

Sentía mis lágrimas correr por las mejillas.

-¡callate doble!-Grité aun sabiendo que no me escuchaban.-Yo si te amo, Manuel,mas que a nada.

Entonces Manuel giró el rostro hasta mi figura.

-Si me amas no te cases.

Se acercó y empezó agitarme fuerte.

-¡Camila,Camila,Camila,Camila,Camila!-

•••

10;30.
Toqué el otro lado de la cama y no estaba Iván.
Solo habia una bandeja con un desayuno preparado y una nota.

He salido a reservar el dia,propongo en una semana ya que todo está listo.
Te quiero muchisimo,Iván. Xx

Miro la bandeja donde habia dos tostadas,un vaso de leche y otro de zumo,un recipiente con mantequilla y un cuenco con mermelada de melocotón.
Y como viniendo de Iván,un jarrón pequeño con una rosa blanca.

Que lo idiota se haga amor.

Ponía en una pequeña etiqueta enganchada en la rosa.
Junté la mantequilla en la tostada y le pegué un gran bocado.
Estaban muy bien las tostadas,Iván es todo un chef.

Mi movil al lado mía vibra y le doy dos segundos para poder tragar,lo cojo y le echo un vistazo.

Paula:
Vamos estas noche al Karaoke,una mini despedida de soltera,iremos todos. Menos Ivan me dijo que andaba ocupado.

-Bien,¿Me arreglo mucho?

Paula:
Nah,algo normalito,paso a por ti a las 6.
Te quiero ❤

-Adios

Dejo el móvil encima de la cama y termino rápidamente. Lo dejo todo encima de la cama y me levanto,busco las zapatillas en el frio suelo,en esta realmente hace fresquito.

Bajo con la bandeja en la mano y cuando llego a la cocina encuentro a Iván sin camisa,cocinando.
Me paro en seco. Observo sus grandes omoplatos,sus grandes tatuajes nunca vistos,y toda su espalda.

–¿No habías salido?–Dije dejando la taza y los platos en el lavaplatos.

–Llegué y se me olvido quitar la nota.–Dijo apagando el fuego y dejando las tortitas en un plato,le echa sirope y se las come.

–¿Y tu camisa?–Dije nerviosa.

–Hace calor en la cocina,me la quité.–Dijo riendo.

Se encaminó a mi con movimientos vacilantes.
Me acorraló contra la encimera.

–Desde que te conozco no te he tocado,¿Me merezco algo no?–Dijo dandome besos en la clavícula.–Necesito.

–Yo también necesito.–Dije enganchandome en su cuello.

Sus labios dulces con regustillo a sirope se estamparon contra los mios.
Vi que contaba todo de la encimera y me recostaba en ella,la isla de la cocina era realmente grande y redonda.
Me tumbó en ella quedando el arriba y quitándome rápido los pantalones del pijama.
Yo le desabroché los pantalones con torpeza y rapidez.
Se los bajé dejandolo en sus boxer azules y su gran amigo marcado.
Yo ya tenia las piernas al aire y sin bragas. Esto estaba descontrolado.

–Te deseo tanto...–jadeó en mi oreja.–Joder.

De un momento a otro ya ninguno tenia abajo nada.
Lo sentí,sentí como entraba despacio en mi.
Lo hacia como si fuera a romperme y yo quería más.

–Joder Iván–Dije enfurruñada–Más rápido.

Aceleró los movimientos,me agarré fuerte a su cuello por miedo a caer al suelo.
Lo mas jodido fue cuando se corrió dentro de mi sin condón,gracias a dios tomo las pastillas,pero el se corrió.
Yo no.

Salio lento de mi,dejandome con las ganas y me miró extraño.

–¿Hice algo mal?–Por mi cara de mala hostia lo dedujo.–No jodas.

Entonces metió un dedo,incluso dos,no lo se.
Ni me acuerdo porque fue rapido y dejandome en el lugar.

Iván no se compara con Manuel en el sexo.
Iván es mejor.

Tonto,Mi tonto.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora