XV - (2º Temporada)

2.1K 95 7
                                    

Cojo las llaves y el móvil, procuro que no se me olvide nada y voy a subirme a la furgoneta que ha venido primero a recogerme a mi.

Saludo al conductor que por cierto no tengo ni idea de quién es, y vamos a casa de los gemelos.

Paramos en una urbanización de unos seis edificios más o menos, y al ver que no seguimos decido preguntar.

-¿Por qué hemos parado aquí?

-Los gemelos viven aquí. -Me aclara y asiento.

No me da tiempo a sacar el móvil y ya están los gemelos entrando tan alegres.

Dani se sienta delante al lado de David y Jesus detrás conmigo, creo que esto va a ser demasiado difícil.

-¿Has hablado con el? -Me susurra Jesus y niego en modo de respuesta. -Deberías.

-Lo sé. -Respondo en el mismo modo que el.

-¿De qué habláis por ahí detrás? -Pregunta David mirando por el espejo retrovisor.

-Oh nada. -Respondo yo quitándole importancia.

Observo a Dani que está mirando por la ventana totalmente en silencio, durante el viaje no se ha dignado a moverse ni a hablar.

-Oye. -Dice posando su mano sobre mi hombro. -¿Podemos hablar?

-Si.

Nos apartamos un poco de los demás y me cruzo de brazos esperando que hable.

-¿Por qué me llamaste ayer? -Pregunta intentando estar tranquilo, pero sé perfectamente que no lo está.

-Para ver si me escuchabas, pero ya veo que no.

-Quiero hacerlo. -Susurra. -Quiero escucharte. ¿Por qué hiciste eso?

-A ver. -Doy un suspiro buscando las palabras exactas. -Quede con él y me dijo que me quería, y yo también a él Dani. No sabía qué hacer, obviamente no te iba a dejar por el, ni tampoco iba a estar contigo incomoda por Marcos, y mucho menos estar con los dos a la vez.

-Siento no haberte escuchado. -Dice rascándose la nuca. -De verdad que lo siento.

-No te preocupes. -Digo cogiéndole del brazo para tranquilizarlo.

-Joder. -Añade apretando los puños y sin que se lo espere lo abrazo.

Apoyo mi cabeza en su hombro y él me acaricia la espalda con cariño.

-¿Me perdonas por no haberte escuchado? -Susurra en mi oído haciendo que me estremezca.

-Claro. -Sonrío levemente y él se separa de mí para mirarme a los ojos.

-¿Qué va a pasar ahora? -Pregunta quitándome los pelos de la cara.

-No lo sé Dani. -Me sincero. -La situación en la que estoy es la misma.

-¿Sabes? Ya me da igual, tómate el tiempo que necesites que yo te voy a esperar, ¿vale?

-Vale. -Le doy un beso en la mejilla. -Deberíamos volver.

-Si, vamos.

Los dos volvemos en silencio hasta dónde está Jesus que está hablando con alguien.

-Oh, estáis aquí. -Dice esta mujer sonriendo. -Entráis en dos minutos.

Dani y yo asentimos en modo de respuesta, y cuando la mujer se va Jesus nos mira de brazos cruzado y sonriendo.

-¿Qué ha pasado?

-Estamos bien. -Responde Dani haciendo que Jesus sonría aún más.

-Ya hablaremos. -Me señala con el dedo índice mientras que todos están ya listos, la presentadora nos presentan y salimos.

Miro a Jesus algo nerviosa y el sonríe mostrando tranquilidad, claro, ellos llevan haciendo esto desde los cuatro años, en cambio yo... Es mi primera vez.

-Vaya, no os esperaba de nuevo por aquí chicos, qué sorpresa.

-Pues si. -Responde Dani. -Siempre nos ha gustado estar con vosotros.

-Y además con compañera nueva. -Me sonríe la mujer. -¿Cómo ha sido esta última incorporación?

Dani me mira disimuladamente y me da un pequeño pellizco en la pierna para que responda yo.

-Siempre me ha gustado cantar. -Admito. -Nos conocemos desde que somos pequeños y siempre estábamos cantando, aunque fuese una canción de los anuncios.

-Es verdad. -Dice Dani ayudándome. -Y bueno, este año hicimos un dúo ella y yo en un campamento de verano que quedó muy bonito, y pensé en cómo sería si ella cantara junto a nosotros.

-Vaya, ¿y cómo es?

-Es increíble. -Responde esta vez Jesus. -De solo vernos dos meses en verano a tenerla todo el día con nosotros es... Increíble. -Jesus me mira y le sonrío, poco a poco se me están pasando los nervios.

-Y bueno Ana, ¿tú cómo llevas esto? Sabemos que ellos ya tienen experiencia, pero tú supongo que no.

-De momento bien. -Respondo y los gemelos se ríen a carcajadas, les fulmino con la mirada y Dani me da un leve beso en la mejilla dejándose de reír. -No de verdad, me gusta hacer esto y además al lado de dos personas que merecen la pena.

Me arriesgué a quererte |Gemeliers|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora