#5 - Inseparables (#5.1 - helados)

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ALEX

Llegamos a casa de Luca tras haber estado al rededor de veinte minutos en el coche, me encantaba lo loco que se volvía Luca al volante. Literalmente, si hubiera habido algún control de velocidad seguro que nos habrían multado.

Abrimos la puerta de la casa y comprobamos si había alguien; estaba Alejandra, la madre de luca, pero estaba con su ordenador y de ahí no había quien la sacara.

Alejandra solía estar en casa la mayoría de veces que iba yo, (aunque no tanto como el padre de Luca, que no trabajaba casi fuera de casa) haciendo cosas de su trabajo; era abogada laboralista y necesitaba mucha relajación para trabajar. El padre de Luca no sabía exactamente a qué se dedicaba pero el misterio era parte de su encanto. Sin embargo, sí sabía que la empresa donde trabajaba ganaba mucho dinero.

(...)

Después de que Luca entrará a saludar a su madre fuimos a la cocina a prepararnos la comida. Cogí un vaso de agua y silenciosamente, yo, como usualmente, me tiré en el sofá a gorronear un poco el wifi de mi amigo mientras él cocinaba. Yo en esos temas era pésimo (a pesar de tener padres chefs).

Cuando hubo acabado me gritó desde la cocina y fui hacia allá.

- Hermano estos son los mejores macarrones que he probado nunca - dije con la boca llena de ellos a lo que Luca rió mientras me pasaba servilletas para limpiarme ya que me había manchado con el tomate.

- Me alegro de que te gusten, mi hermano me enseñó a prepararlos. - dijo Luca con esa sonrisa, esa que siempre ponía al hablar de su hermano, muy pocas veces, la verdad.

A él no le gustaba hablar de Manuel porque aún le dolía, Luca no lo decía, siempre se hacía el fuerte delante de todos, pero yo sabía que en el fondo aún no lo había superado.

Y lo sabía por experiencia. Porque yo ya había sufrido por la muerte de un ser querido. Mi abuelo. Murió cuando yo tenía 15, pero como vivía en casa con mis padres y conmigo, era muy cercano a mí, por esa razón me dolió el doble, fue un duro golpe pero aprendí a vivir con ello, como me dijo Luca.

Flashback

Hoy era el día en el que enterraban a mi Abuelo.

Era demasiado doloroso ver como todos lloraban por su muerte. No lo aguantaba más, no podía creer que fuera real, ya no lo volvería a ver. Pensamientos tan negativos pasaban por mí cabeza que salí corriendo de allí con lágrimas en los ojos.

Corrí y corrí hasta que los pulmones me impidieron continuar.

Había llegado a un parque abandonado que estaba no tan cerca del cementerio.

Me tiré en el suelo y seguí llorando con la respiración entre cortada.

No podía más. Era doloroso recordar los momentos que viví a su lado.

Las veces que me llevaba a pescar y cuando me daba consejos de chicas diciendo como conquistó a mi abuela, a la que no llegué a conocer.

Todos esos momentos rondaban por mi cabeza y se repetían. Una y otra vez. Hasta que no pude más, me levanté de golpe y grité lo mas fuerte que pude.

- Hey chico tranquilizate que vas a asustar a alguien - dijo una voz detrás de mí, lo que hizo que me asustara y me girara de golpe .

- perdón no sabía que habría alguien aquí, me has asustado.

- Lo siento - dijo sonriendo de lado - soy Luca Moriarity, ¿y tú? - dijo ofreciendome la mano en señal de presentación.
No estaba para socializarme con nadie en esos momentos, solo buscaba paz, pero el chico me estaba ofreciendo su mano y parecía buen tipo así que me presenté.

¿Gay?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora