G-TOP

• Capítulo 2.- Día Agridulce

G-TOP - (G-Dragon & TOP)

• Capítulo 2.- Día agridulce.

        Mientras caminaba no podía dejar de pensar en el chico nuevo, me intrigaba su mirada, su voz, pero... No tengo ni idea el por qué estoy pensando en él. Me siento extraño como si algo en mí se inquietara al recordarlo. A pesar de eso tengo que decirle a TOP sobre... Bueno por el por qué las chicas no se me acercan mucho, es por que... Bueno... Mañana se lo diré en persona, espero que no me dejé de hablar.
Eso espero...

Desperté muy temprano y antes de vestirme encendí la televisión en ese momento me quedé en shock al ver la fecha y que se celebraba hoy... En realidad ya habían pasado semanas desde que tenía planeado decirle a TOP pero nunca me atreví a decírselo pues ya nos habíamos convertido en buenos amigos, después de recuperarme del shock, fui al baño para después vestirme y tomé mi desayuno que constaba de carne, terminé, con mucha flojera tomé mi mochila saliendo de mi departamento y me dispuse a caminar hasta la parada de autobús, subí y entonces miré todo decorado mientras algunas personas traían flores y regalos ya que hoy era día de San Valentín. Odiaba estas celebraciones, muchas chicas siempre quieren verme gordo, me regalan chocolates, dulces y hasta comida casera. Pero tiene su punto bueno, por que puedo saltarme las clases sin que los maestros se den cuenta, ya al momento de bajarme y caminar a la preparatoria, unas chicas me tomaron por sorpresa llevándome hasta la entrada en donde estaba casi un salón completo pero sólo de chicas, me regalaron chocolates y golosinas, sentí que me asfixiaban, eran muchos regalos para mí solo.

—Muchas gracias— sonreí alegremente y tomé los regalos metiéndolos en una bolsa.

Eran pequeños regalos pero en una gran cantidad si estaban bastante pesados, fui a mi salón y allí me encontré a TOP quien me ayudó a cargar la bolsa, la dejamos en la mesa, entonces, él con curiosidad abrió la bolsa para luego voltear a verme.

—Parece que quieren que te dé un coma diabético— se reía y en eso él sacó una carta decorada. —¿Qué es esto?— abrió los ojos de par en par, me dio la carta en manos y me miró fijamente.

—No lo sé— abrí la carta y me di cuenta que era una confesión, mi corazón estaba contento pero algo en mí me hacia sentir algo confuso.

—Uh~ Traes pegue, ¿Quién será la atrevida?— siempre TOP tenía una mirada y facciones de muchacho serio, pero eso era sólo su faceta y en verdad él era todo lo contrario. Me hacia burlas, pequeñas hasta eran muy graciosas bromas y yo sólo me sonrojaba un poco sin saber el por qué.

—Tal vez será una broma...— en voz baja me dije a mí mismo con desilusión.

—¿Cómo? No te entiendo. ¿Las chicas te han jugado bromas de esa manera?— me preguntó acercándose a mí, lo volteé a ver a la cara, no tenía el valor para decirle pero... Era el momento.

—Bueno... La razón por la cual no tengo novia es... Es mejor que te lo diga en privado— decidí callar cuando las chicas del salón llegaron, guardé los regalos y fui con TOP a un salón vacío.

Lo miré fijamente, me puse muy nervioso que ni siquiera podía articular ni una palabra, tomé aire y en eso él se acercó a mí abrazándome pasando sus manos por mi espalda.

—Debe ser algo doloroso, ¿No es así?— no alcancé a ver su rostro cuando me dijo esas palabras, su abrazo era muy cálido y confortante, mi corazón se comenzó a acelerar un poco y me puse nervioso alejándome logrando soltarme de ese abrazo.

—No... Bueno, en realidad sí. Pero ya no aguanto más, la razón por la cual no he tenido es... Es por que... Por que soy...— el nudo en mi garganta no me dejaba hablar, no soportaba esa presión sólo quería decirlo y ya. —Soy bisexual... Me llegaron a gustar los hombres tanto como las mujeres— comencé a sudar frío y un miedo recorrió mi espalda, cerré los ojos fuertemente y justamente mi corazón comenzó a quebrarse lentamente. —Si quieres odiarme y no hablarme tienes derecho de hacerlo. Aunque me alegra haber tenido a un nuevo amigo durante un tiempo—

Él me abrazó tomando mi cabello y se rió de mí, en ese momento mi corazón se puso cálido, quería permanecer en sus brazos por mucho mas tiempo, inconscientemente lo abracé más fuerte como si mi vida dependiera de ello, lo miré a la cara y me fui acercando a sus labios, le planté un suave beso pero en segundos reaccioné alejando mi rostro de él pero seguía abrazándome, creo que va a darme la paliza más grande de toda mi vida, así que lo ví directamente a la cara notando que no estaba enojado, me sonrió y entonces, me quedé en seco mirándolo, no sabía si salir corriendo o seguir abrazándolo.

—Gracias por el regalo... Pero ahora sigo yo— el selló mis labios con los suyos, era un beso muy tierno pero en minutos se volvió un beso muy apasionado ya que él jugaba con mi lengua, me sentía un completo torpe jugando con su experimentada lengua, se alejó lentamente de mi rostro y me miró muy preocupado mientras yo estaba al borde de las lágrimas.

No sabía como reaccionar ante esa situación, no podía creer que el muchacho más heterosexual y de apariencia tan masculina de la preparatoria me estuviera haciendo esto, me sentía feliz pero tenía miedo y lo único que hice fue llorar como una niña asustada.

—¿Te encuentras bien, G-D?— me tomó de los hombros aplicando un poco de fuerza e hizo que lo mirara fijamente a los ojos. —¿Estas bien?— me soltó lentamente y acarició mi rostro, sin razón me sonrió tratando de calmarme.

—Si esto es una broma, por favor. Detente, ya tuve suficiente, ¿Que quieres de mí? ¿Quieres burlarte ahora? ¿Por que tú?, TOP creí que eras diferente...— tenía obviamente mis razones para sentirme así, me solté de su agarre quitando su mano y le di una bofetada. —Te dije mi sexualidad y tú con todo el descaro del mundo te burlas de mí y tratas de humillarme.. No lo soporto... ¡¿Que fue lo que hice para que tú me estés hiriendo de esta forma?!, soy patético, hasta yo mismo lo sé... Pero no tienes que hacerme sentir tan miserable como me siento ahora, no lo entiendo... ¿Por que tú?, ¡Contéstame!— sin razón alguna comencé a sentirme enfadado, traicionado y completamente confundido, en ese momento creé mi dura realidad que probablemente es la correcta. Tomé mi camino hasta llegar al punto más doloroso de toda esa realidad.

—¡Calláte!, ¿A caso eres un chiquillo tonto que no tiene sentido alguno?, eso es lo que no me gusta de ti, crees que todo el mundo es malvado y que sólo hay personas que quieren lastimarte, pero tú me estás diciendo eso y en verdad me duele, tú crees que soy igual a ellos pues estás muy equivocado, te quiero demasiado— él tomó mis manos entrelazando mis dedos con los suyos, me miró seriamente y dijo. —Si crees que soy igual a los demás, entonces, suelta mis manos y juro que nunca más te voy a volver a molestar, te lo juro... Pero por favor dame una respuesta— me siguió mirando mientras aun tomaba mis manos.

Me fui soltando lentamente de sus cálidas manos y me alejé de su rostro dejando de mirarlo, estaba muy triste y sólo quería salir corriendo lo más rápido posible. —Por favor, deja de jugar...— di unos pasos hasta que me quedé frente a la puerta dándole la espalda a TOP. —Creí que eras diferente... Pero me equivoqué— salí del salón dejándolo atrás y corrí lejos antes de que mis lágrimas cayeran.

Continuará...